Introducción
La incorporación de árboles o arbustos forrajeros en los sistemas silvopastoriles, ha sido posible gracias al aporte del conocimiento local (Galeano, Gomez, & Gomez, 2013; Navas, 2017) caracterizado por la pérdida de la diversidad, el incremento de áreas en proceso de desertificación, el deterioro de los recursos naturales y los sistemas ganaderos ineficientes. Los sistemas silvopastoriles son una alternativa para recuperar el territorio. El objetivo del trabajo fue recopilar el conocimiento local de productores ganaderos sobre especies de árboles con potencial forrajero, para diseñar sistemas silvopastoriles participativos que mejoren la conectividad y los sistemas ganaderos. Se encuestaron 35 productores de tres departamentos, a quienes se les preguntó por el consumo de especies arbóreas por bovinos y otros animales de la costa caribe durante el año. Los productores identificaron las especies; se tomaron muestras de árboles adultos sin manejo para su clasificación taxonómica y calidad nutricional. Se identificaron 16 especies de árboles consumidas por animales domésticos y silvestres; los bovinos consumen las hojas durante todo el año y los frutos en la época seca. La calidad nutricional varió entre especies. Las hojas presentaron altas concentraciones de proteína, pero baja o media digestibilidad debido a la edad (forraje viejo cuya validación científica ha sido indispensable para poder dotar de alimentos ricos en proteínas y minerales a los animales, componentes deficientes en algunos pastos (Verdecia et al., 2014) En este sentido, la diversidad de especies forrajeras es de vital importancia como fuentes de alimentación para las especies ganaderas (Sánchez et al., 2017), es así como el follaje de especies arbóreas y arbustivas representan alternativas sostenibles de alimentación, por tener no solo influencia positiva en la biomasa y valor nutricional de los pastos (Oliva et al., 2018), sino porque muchas de ellas son usadas como forraje especialmente en épocas de sequía y en zonas áridas (Cáceres & Gonzáles, 2002). Trabajos de Galeano et al. (2013), con especies arbóreas de gran potencial forrajero: Gliricidia sepium, Paramentiera acuelata, Leucaena leucocephala, Guazuma ulmifolia, Morus alba, indican el uso de ellas como alimento alternativo en la dieta de vacunos, asimismo Pinto et al. (2010) presenta especies forestales cuyos contenidos nutricionales muestran alternativas promisorias en la alimentación ganadera: Guazuma ulmifolia, Parmetiera edulis, Cordia dentata, Pithecellobium dulce, Acacia milleriana, Quercus sp., Erythrina goldmanii y Gliricidia sepium.Toral & Iglesias (2008) encontraron preferencias alimenticias de bovinos por Leucaena leucocephala, Albizia lebbeck, Gliricidia sepium, Bauhinia purpurea, Enterolobium berteroana, Morus nigra y Erythrina cyclocarpum.
En la región Cajamarca, el 75,15% de parcelas se cultivan al secano (Instituto Nacional de Estadística e Informática, 2012); por lo que, la época seca se convierte en el periodo más crítico en la oferta de forraje. En estas condiciones, las especies arbustivas y arbóreas de hoja perenne se convierten en fuente de abastecimiento de forraje, convirtiendo los sistemas silvopastoriles en alternativas sostenibles para el abastecimiento de forraje (Oliva et al., 2018) y recuperación de territorios fragmentados por la ganadería (Navas, 2017). Así, los bosques del Perú se ven convertidos en fuentes de alimento para vacunos, debido a la alta diversidad de especies arbóreas con hojas perennes que se encuentran ahí. No obstante, el limitado el conocimiento científico de las preferencias alimenticias de vacunos y de la composición química del follaje de las especies arbóreas que sirven de forraje, contribuyen a que su uso sea limitado, por ello la investigación realizada es de suma utilidad para los productores agropecuarios de la región, así como para diseñar sistemas silvopastoriles a futuro.
El siguiente trabajo tuvo como objetivo conocer las preferencias alimenticias de vacunos y evaluar la composición química del follaje de Clusiapseudomangle (Clusiaceae) “lalush” y Delostoma integrifolium (Bignoniaceae) “babilla”, ambas usadas en la región de Cajamarca como combustible y en la construcción de viviendas, muebles y herramientas agrícolas, asimismo, ofrecen una alta resistencia a la sequía, facilidad de propagación, un alto valor nutritivo y rebrote.
Materiales y métodos
El análisis químico se realizó en el Laboratorio de Evaluación Nutricional de Alimentos de la Facultad de ZootecniaDepartamento Académico de Nutrición de la Universidad Nacional Agraria La Molina - Lima, donde se determinó el contenido nutricional de las hojas de Clusia pseudomangle y Delostoma integrifolium, para ellos se colectaron muestras de cinco individuos arbóreos elegidos al azar del Bosque La Palma Chota (6° 30’ 20,929” S, 78° 37’14,195” W, altitud 2932 m.s.n.m.) hasta obtener un peso seco de 166 g para Clusia pseudomangle y un peso seco de 312 g de Delostoma integrifolium; a dichas muestras se les sometió al análisis respectivo siguiendo las metodologías propuestas por la Asociación Oficial de Análisis Químico (AOAC) (Association of Official Agricultural Chemists, 2005) y ANKOM Technology (ANKOM, 2005); el contenido de proteína total se obtuvo según la norma AOAC (2005), 984.13, la grasa o extracto etéreo según AOAC (2005), 2003.05 y los valores de ceniza utilizando AOAC (2005), 942.05, para la fibra detergente ácido se utilizó el ANKOM (2005) Method N° 5 Acid Detergent Fiber in feed. Filter bags technique, la fibra detergente neutro se determinó mediante el ANKOM (2005) Method N° 6 Neutral Detergent Fiber in feed. Filter bags technique y lignina detergente ácida a través de ANKOM (2005) Method N° 8 Acid Detergent Lignin in beakers. Filter bags technique.
Las preferencias alimenticias se desarrollaron en el sector Bosque El Chuspimayo - Los Lanches, Chota (6° 30’ 53,839” S, 78° 37’19,389” W, altitud 2943 m.s.n.m), donde mediante un test de selección múltiple aplicado a cuatro vacunos raza Brown Swiss, se registró el consumo de forraje (diferencia entre el peso del material ofertado y el rechazado) durante un tiempo de exposición de 15 minutos entre las 7:00 y 7:30 hrs durante 14 días consecutivos para cada individuo; cinco días de adaptación de los animales al forraje ofertado y nueve días de evaluación. Por cada especie se utilizó un kilogramo de forraje fresco (hojas y tallos tiernos menores o iguales a 5 mm de diámetro) el cual fue colectado un día antes de la prueba, dicho forraje estuvo constituido por especies arbóreas de Clusia pseudomangle Planch. & Triana “lalush”, Delostoma integrifolium D. Don “babilla” y Myrcianthes sp. “lanche”.
Los resultados obtenidos en el test de selección múltiple se sometieron a un análisis de varianza para determinar la existencia de diferencias significativas entre variables. Luego se realizó un test de comparaciones múltiples de Duncan con un nivel de significancia de p<0.05 con el fin de conocer las diferencias estadísticas entre los tratamientos. Se utilizó el paquete estadístico SAS.
Resultados
En la Tabla 1 se presenta los resultados de la composición química del follaje para C. pseudomangle y D. integrifolium. Se observa un mayor contenido de proteína total (15,44 %), fibra detergente ácido (32,60 %), fibra detergente neutro (38,40 %) y lignina detergente ácida (16,67 %) para D. integrifolium, y mayor contenido de grasa (3,99 %), ceniza (4,55 %) y humedad (83,72%) para C. pseudomangle.
Para el test de selección múltiple se obtuvo un total de 36 evaluaciones, siendo el promedio de consumo diario de C. pseudomangle 256,11 g, para D. integrifolium fue de 689,47 g y Myrcianthes sp. tuvo un consumo de 167,92 g por kilogramo ofertado de material vegetal (Tabla 2).
En la Tabla 3 se observan diferencias estadísticas entre el consumo de forraje de D. integrifolium seguido de C. pseudomangle y Myrcianthes sp.
Discusión
Los vacunos muestran preferencia alimenticia (p<0.001) por D. integrifolium, seguido por C. pseudomangle y Myrcianthes sp. lo que muestra su utilidad como sistema silvopastoral en época de baja producción de pasturas. Trabajos similares muestran a especies de porte arbóreo y arbustivo como Tithonia diversifolia, Sambucus nigra (Guatusmal et al., 2020), Leucaena leucocephala (Gaviria, Rivera, & Barahona, 2015) Morus sp (Trulls et al., 2018) y Guazuma ulmifolia (Pérez & Zapata, 2004), utilizadas como alternativas alimenticias en la nutrición animal.
El contenido de proteína total del follaje de D. integrifolium (15,44%) es superior al de C. pseudomangle (7,43 %), valores superiores al 7% recomendado para alimentos de rumiantes, resultados similares a los de Ramírez & Giraldo (2017), cuyos valores para el pasto de Kikuyo fue de 24,2%, Oliva et al. (2018) reportó valores para Trifolium repens de 20% y Lolium multiflorum superior al 13%; valores inferiores para maíz y sorgo 12,93% y 14,34% respectivamente fueron reportados por (Osuna-Ceja & MartínezGamiño, 2017), Axonopus catarinensi con 13,46% (Pantiu, Capellari, & Giménez, 2015) y Pennisetum purpureum con valores entre 7,2% y 9,1% (Vivas-Quila, Criollo-dorado, & Cedeño-Gómez, 2019).
El porcentaje de grasa o extracto etéreo de C. pseudomangle (3,99%) es superior al de D. integrifolium (2,65%). Valores similares se registraron en pasto Kikuyo (2,6%) (Ramírez & Giraldo, 2017) y Lolium multiflorum (3,7%) (Oliva et al., 2018), valores que satisfacen el requerimiento nutricional del ganado.
El 4,55% y 4,19% del peso seco de C. pseudomangle y D. integrifolium corresponde a ceniza, respectivamente. Cantidades superiores se reportaron para Pennisetum purpureum entre 14,7% y 16,2% (VivasQuila et al., 2019).
Fibra detergente ácido (FDA) de C. pseudomangle y D. integrifolium asciende a 21,08% y 32,60%, respectivamente, cantidad similar encontrada en pasto Kikuyo con 23,5% (Ramírez & Giraldo, 2017) y Pithecellobium dulce con 26,01% (PintoRuiz et al., 2010) y menor a la encontrada en Pennisetum purpureum entre 39,3% y 44,9% (Vivas-Quila et al., 2019) y Tabebuia pentaphylla con 50,07%.
C. pseudomangle y D. integrifolium contienen 24,15% y 38,40% de fibra detergente neutro (FDN), respectivamente, valores inferiores a los encontrados en Parmetiera edulis con 67,61% (Pinto-Ruiz et al., 2010), valores superiores se han encontrado en Pennisetum purpureum entre 57,8% y 62,8% (Vivas-Quila et al., 2019), pasto Kikuyo con 58,6% (Ramírez & Giraldo, 2017) y Pithecellobium dulce con 37,84% (Pinto-Ruiz et al., 2010).
El porcentaje de lignina detergente ácida (LDA) de C. pseudomangle y D. integrifolium es 7,62% y 16,67%, respectivamente, cantidades elevadas por lo que se consideran forrajes duros. En pasto Kikuyo (1,5%) se ha reportado menor cantidad de lignina (Ramírez & Giraldo, 2017). El alto contenido de lignina de las especies analizadas puede deberse a la alta cantidad de cutinas del follaje, lo que puede afectar la degradación ruminal por parte de los microorganismos, y el valor de la energía digestible.
Los altos contenidos de lignina y de fibra ácido detergente de D. integrifolium y C. pseudomangle, pueden afectar negativamente la degradación de la materia seca y de la fibra neutro detergente.
Cabe indicar que el contenido nutricional de las plantas varia en condiciones de estrés, pues los individuos “pueden neutralizar o compensar daños mediante procesos de naturaleza homeostática”, procesos compensatorios dependientes del ambiente (Obeso Suárez, Fernández-Lema, Rodríguez-Roiloa et al., 2003). Así mismo, la edad del forraje determina la calidad nutricional (Navas, 2017).
Conclusiones
Los resultados indican la ventaja de utilizar el follaje de Delostoma integrifolium frente a Clusia pseudomangle como forraje para la alimentación de vacunos debido a la mayor palatabilidad y mejor composición química.
Se recomienda complementar la investigación con evaluaciones de degradación ruminal del forraje D. integrifolium y C. pseudomangle.