INTRODUCCIÓN
Los perros han sido utilizados en la antigüedad de apoyo a la actividad humana como acompañantes en la caza, vigilancia y pastoreo de ganado; sin embargo, en la medida en que la sociedad ha evolucionado el rol del perro ha cambiado convirtiéndose en un animal de compañía (Alabama A&M y Auburn Universities, 2016).
La utilidad de los perros se basa en el aprovechamiento de los órganos de los sentidos. El perro es capaz de percibir ultrasonidos entre 47 000 y 60 000 Hz, dependiendo de la raza y la forma de la oreja, habiendo desarrollado una capacidad olfativa que le permite percibir el olor de un animal o persona durante varias horas o incluso varios días, así como para encontrar explosivos, drogas o buscar personas enterradas como consecuencia de desastres naturales (Arner et al., 1986; Yllera et al., 2016, Lazarowski et al., 2020).
En caso de animales destinados a seguridad y control del orden público, es fundamental que los perros tengan el tamaño y contextura adecuados (Parenti et al., 2015; Zink y Schlehr, 2020), siendo las razas preferidas el Dóberman y el Rottweiler, por tamaño y estampa. Para búsqueda de drogas, explosivos o rescate se prefiere a perros de las razas Pastor Alemán, Labrador, Golden Retriever y Pastor Belga (Sharir et al., 2006; Ellis et al., 2008; Fischer et al., 2018; Kim et al., 2018; Zink y Schlehr, 2020).
El uso de perros para seguridad se ha incrementado ante la ola de violencia y asaltos producidos en el país. Entre las medidas que toma la población para prevenir y protegerse de la delincuencia, además de asegurar las viviendas, se encuentra conseguir un perro guardián (González y Rodríguez, 2001; Bermejo, 2010; Porras y Victoria, 2013), en tanto que la seguridad pública debe ser provista por el Estado (Maxit, 2012; Soria, 2017).
A fin de enfrentar el fenómeno de inseguridad en el Perú, en la década de los noventa se crea el serenazgo municipal que es un órgano civil al servicio de la comunidad que realiza un trabajo disuasivo en conjunto con la Policía Nacional del Perú. Sus procedimientos están enmarcados por la Constitución Política del Perú en irrestricto respeto a los derechos humanos y demás normas legales vigentes en materia de seguridad ciudadana (Congreso de la República, 2020). Los primeros serenazgos municipales fueron constituidos en los distritos de Miraflores y San Isidro hace unos 20 años, y desde entonces se han extendido a casi todas las ciudades del país (Miranda, 2018). En este contexto, el objetivo del estudio fue identificar y cuantificar el número de municipalidades y perros utilizados como elementos de seguridad dentro del programa de serenazgo, según lo reportado al Registro Nacional de Municipalidades en el periodo 2016-2020.
MATERIALES Y MÉTODOS
El estudio hizo uso de información de fuentes secundarias (base de datos) provenientes del Registro Nacional de Municipalidades (RENAMU) dentro del periodo 2016-2020, la cual ha sido desarrollada por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). El análisis de la información se llevó a cabo en el Laboratorio de Epidemiología y Salud Pública en Veterinaria de la Facultad de Medicina Veterinaria y Zootecnia, Universidad Peruana Cayetano Heredia (FAVEZ UPCH) en Lima, Perú. La investigación correspondió a un estudio observacional, descriptivo y retrospectivo.
La población objetivo correspondió a los resultados sobre la tenencia y número de perros destinados a la seguridad ciudadana que mantuvieron los servicios de serenazgo según el RENAMU en el periodo 2016-2020. Las variables de clasificación consideradas en el estudio fueron: (a) Tipo de municipalidad (provincial o distrital), (b) Departamento (24 departamentos en el país, además de la Provincia Constitucional del Callao) y (c) Años estudiados (2016 al 2020). Las variables de medición que se consideraron fueron: (a) Municipalidades que disponen de perros en el servicio de serenazgo (Sí o No) y (b) Número de perros utilizados por el servicio de serenazgo.
La información fue extraída del Sistema de Microdatos (http://iinei.inei.gob.pe/microdatos/index.htm), que corresponde al banco de información de estudios de encuestas realizadas por el INEI. El sistema facilita el rastreo, reconocimiento y recuperación de datos de investigaciones efectuadas por el INEI, de modo que se pudo obtener los patrones y documentos como archivos comerciales y de fácil accesibilidad (SPSS, Microsoft Excel, Acrobat Reader). En este caso, se recuperó la información de las encuestas en formato Excel y el diccionario de variables en el formato del programa Acrobat Reader.
Los resultados de la investigación fueron resumidos mediante estadística descriptiva a través de cuadros que presentan frecuencias absolutas y relativas de acuerdo con las categorías en las que se subdividió las variables estudiadas. Asimismo, la cantidad de perros por municipalidad fue resumida mediante estadística descriptiva, utilizando principalmente la media como medida de tendencia central. El protocolo del estudio fue aprobado por el Comité Institucional de Ética de la Universidad Peruana Cayetano Heredia (CAREG-ORVEI-142-22).
RESULTADOS
La muestra estuvo conformada por todas las municipalidades del Perú que ofrecieron información al RENAMU en el periodo 2016-2020. Los serenazgos de las municipalidades provinciales fueron las que en mayor proporción utilizaron perros (Cuadro 1), mientras que el mayor número de perros utilizados por estos servicios ocurrió en 2016 y 2017 (Cuadro 2).
Las municipalidades que en mayor proporción reportaron el uso de perros en el servicio de serenazgo se encontraron en la Provincia Constitucional del Callao y en el departamento de Lima. La mayoría de los departamentos reportaron al menos en un año el uso de perros como elemento de apoyo al servicio de serenazgo, siendo los departamentos de Amazonas y Madre de Dios los que no utilizaron perros (Cuadro 3).
n = municipalidades que reportaron usar perros como elemento de seguridad en el serenazgo
N = total de municipalidades (suma provinciales y distritales) que registraron información en el Registro Nacional de Municipalidades - RENAMU en cada año de estudio
El mayor número de perros registrados para uso de serenazgo se reportó en el departamento de Lima, seguido de la Provincia Constitucional del Callao, y los departamentos de Piura, La Libertad y Cusco. El Cuadro 4 muestra el detalle de la distribución anual del total de perros utilizados por el serenazgo como elemento de apoyo a la seguridad, así como la media de perros por año (para casos que hayan registrado información de al menos 4 años).
Departamento | 2016 | 2017 | 2018 | 2019 | 2020 | Total | Media anual1 |
---|---|---|---|---|---|---|---|
Lima | 340 | 347 | 320 | 299 | 288 | 1,594 | 319 |
Callao | 103 | 26 | 21 | 16 | 15 | 181 | 36 |
Piura | 27 | 35 | 44 | 21 | 16 | 143 | 29 |
La libertad | 25 | 21 | 32 | 32 | 32 | 142 | 28 |
Cusco | 3 | 13 | 3 | 34 | 79 | 132 | 26 |
Ancash | 14 | 25 | 17 | 22 | 11 | 89 | 18 |
Cajamarca | - | 13 | 13 | 1 | 31 | 58 | 15 |
Junín | 15 | 16 | 13 | 10 | 11 | 65 | 13 |
Puno | 22 | 5 | 4 | 2 | 13 | 46 | 9 |
Huánuco | 11 | 16 | 2 | 3 | - | 32 | 8 |
Apurímac | 3 | 1 | 1 | 5 | 14 | 24 | 5 |
Arequipa | 4 | 15 | 1 | 1 | 3 | 24 | 5 |
Pasco | 2 | - | 12 | 2 | 3 | 19 | 5 |
Ayacucho | 4 | 6 | 5 | - | 2 | 17 | 4 |
Ica | 6 | 5 | 2 | 2 | - | 15 | 4 |
Moquegua | 3 | 6 | 4 | - | 4 | 17 | 4 |
Loreto | - | - | 3 | 3 | 3 | 9 | Nc |
San Martin | 2 | 5 | 1 | - | - | 8 | Nc |
Huancavelica | - | 3 | - | - | - | 3 | Nc |
Lambayeque | - | - | 2 | 2 | 2 | 6 | Nc |
Tacna | - | 2 | 2 | - | - | 4 | Nc |
Amazonas | - | - | - | - | - | 0 | Nc |
Madre de Dios | - | - | - | - | - | 0 | Nc |
Tumbes | - | - | - | - | 2 | 2 | Nc |
Ucayali | - | - | - | - | 1 | 1 | Nc |
Total | 584 | 560 | 502 | 455 | 530 | 2631 | 526 |
1 La media se calculó para los departamentos cuyas municipalidades provinciales o distritales reportaron tenencia de perros al menos cuatro años. El resultado corresponde al cociente del total de perros entre los años que se ofreció información (entre 4 o 5 según corresponda)
Nc = no calculado por no contar con información de al menos cuatro años
El Cuadro 5 muestra la distribución de perros por año y la media de perros por año en Lima Metropolitana (para casos que hayan registrado información de al menos 4 años). El mayor número de perros utilizados correspondieron a los distritos de Lima, Santiago de Surco, San Borja, Chorrillos y La Molina.
Distrito | 2016 | 2017 | 2018 | 2019 | 2020 | Total | Media anual1 |
---|---|---|---|---|---|---|---|
Lima | 36 | 36 | 50 | 44 | 41 | 207 | 41 |
Santiago de Surco | 30 | 31 | 36 | 35 | 18 | 150 | 30 |
San Borja | 23 | 22 | 23 | 22 | 18 | 108 | 22 |
Chorrillos | 26 | 23 | 23 | 5 | 12 | 89 | 18 |
La Molina | 15 | 17 | 17 | 17 | 19 | 85 | 17 |
Ventanilla | 18 | 17 | 17 | 11 | 11 | 74 | 15 |
Jesús María | 11 | 14 | 15 | 16 | 16 | 72 | 14 |
San Isidro | 12 | 14 | 10 | 10 | 18 | 64 | 13 |
Los Olivos | 10 | 15 | - | 7 | 13 | 45 | 11 |
Miraflores | 13 | 13 | 13 | 10 | 6 | 55 | 11 |
Magdalena del Mar | 13 | 10 | 10 | 10 | 10 | 53 | 11 |
La Victoria | 14 | 9 | 9 | 10 | 10 | 52 | 10 |
Pueblo Libre | 10 | 10 | 11 | 9 | 12 | 52 | 10 |
Barranco | 11 | 9 | 11 | 11 | 9 | 51 | 10 |
San Miguel | 5 | 10 | 12 | 12 | 12 | 51 | 10 |
San Juan de Miraflores | 10 | 11 | 10 | 10 | 8 | 49 | 10 |
San Martin de Porres | 10 | 9 | 9 | 14 | 5 | 47 | 9 |
Breña | 8 | 8 | - | 8 | 10 | 34 | 9 |
San Juan de Lurigancho | 10 | 10 | 9 | 7 | 3 | 39 | 8 |
Carabayllo | 5 | 5 | 9 | 9 | 8 | 36 | 7 |
Carmen de la Legua Reynoso | 10 | 7 | 4 | 5 | 4 | 30 | 6 |
Independencia | 8 | 8 | 6 | 4 | 4 | 30 | 6 |
Puente Piedra | 4 | 5 | 5 | 5 | 5 | 24 | 5 |
Surquillo | 4 | 4 | 4 | 4 | 4 | 20 | 4 |
1 La media se calculó para los distritos que reportaron tenencia de perros al menos cuatro años (solo estos fueron considerados en el cuadro). El resultado corresponde al cociente del total de perros entre los años que se ofreció información (entre 4 o 5 según corresponda)
DISCUSIÓN
La inseguridad ciudadana es un problema persistente, que afecta la salud mental, el comportamiento y la toma de decisiones en las personas. La institución encargada de enfrentar este problema es el Ministerio del Interior a través de la Policía Nacional del Perú (Carrión, 2005; Alejandro y Monago, 2008; Tarazona y Ríos, 2021).
A nivel local, una estrategia para enfrentar el problema de inseguridad ciudadana ha sido la creación del Servicio de Serenazgo, cuyo fin es «Planificar y ejecutar operaciones de patrullaje general y selectivo, en apoyo de la Policía Nacional del Perú, así como prestar auxilio y protección a la ciudadanía para el resguardo de su vida e integridad física». El serenazgo fue creado bajo la Ley Orgánica de Municipalidades (Ley 23853) y cada cuerpo de serenazgo depende de la respectiva municipalidad, por lo que su regulación está reconocida, en principio, en una ordenanza de dicha municipalidad (Congreso de la República, 1984). El patrullaje integrado del serenazgo con la Policía Nacional del Perú se creó para fortalecer el patrullaje en los distritos y provincias para la mejora de la seguridad ciudadana, siendo ambas unidades encargadas de la coordinación del cumplimiento de las normas y comunicación integral.
Un elemento de seguridad que ha sido incluido en el servicio de algunos serenazgos es la brigada canina, con el fin de compensar la insuficiencia de personal policial para resguardar las calles. En ese sentido, la Gerencia de Seguridad Ciudadana y Gestión de Riesgo de Desastres de algunas municipalidades distritales y provinciales, han venido redoblando el patrullaje con la ayuda de la Brigada Canina del Serenazgo, acompañando y reforzando las acciones de los serenos en las calles del Perú (Miranda, 2018).). Estos animales, antes de salir al servicio, deben de pasar por un periodo de entrenamiento a fin de que participen eficientemente en acciones de prevención y disuasión de la delincuencia en beneficio de la población (Duranton y Gaunet, 2016).
En ese contexto, los resultados del RENAMU para el periodo del estudio pueden servir para evaluar los lugares y cantidad de animales que han sido utilizados en los últimos años. Se observa que, en general, existe una tendencia decreciente en el número de municipalidades provinciales que utilizan perros como elementos de seguridad; sin embargo, el número de perros en las municipalidades distritales se mantiene aparentemente constante. Se debe considerar que aquellas ciudades con mayor desarrollo socioeconómico resultan vulnerables a la delincuencia, ya que estos lugares tienen mayores beneficios para su actividad ilícita (Roca y Ramírez, 2022). Esto a su vez se conlleva a que estas municipalidades cuenten con más recursos para invertir en la formación de una brigada canina de serenazgo a fin de contribuir a enfrentar este problema de inseguridad.
Entre 2016 y 2017 se contó con la mayor cantidad de perros en los servicios de serenazgo en las municipalidades de la Provincia Constitucional del Callao y en el departamento de Lima, con una disminución en los años siguientes. La implementación de las brigadas de perros implica inversión para infraestructura, tales como caniles adecuados con área de descanso y patio de luz; además de una adecuada ración de alimento indicada por un médico veterinario de acuerdo con los requerimientos nutricionales del perro. Además, el personal responsable del manejo de los perros debe ser capacitado constantemente. Sin una adecuada infraestructura e instrumentos de apoyo para serenazgos es posible que no se realice un buen trabajo (Montesdeoca, 2019).
La inversión municipal también implica la compra de perros. Las razas como Rottweiler, Dóberman, Golden Retriever y Pastor Alemán presentan características como nivel de alerta, velocidad de respuesta, perseverancia, impulso de cazar, manejo de conflictos y memoria olfativa que los convierte en animales adecuados para integrar las brigadas caninas; sin embargo, estos tienen un valor elevado si son adquiridos en criaderos reconocidos. Por otro lado, se requiere invertir en la capacitación del personal que se encargará del entrenamiento, además de hacer la selección de los perros que cumplan con los requerimientos de la brigada canina (Prada-Tiedemann et al., 2019).
Los municipios de Lima Centro, específicamente los distritos de Lima, Santiago de Surco, San Borja, Chorrillos y La Molina, fueron los municipios distritales con mayor número de animales en las brigadas caninas como elemento de seguridad de los servicios de serenazgo. Este resultado puede estar relacionado a que son los distritos que reciben mayor recaudación por impuestos y arbitrios, sumado a la centralización que existe en el gasto de recursos e impuestos en las grandes metrópolis (Lastra, 2017; INEI, 2020).
Los perros de la brigada canina deben ser mantenidos en condiciones de bienestar animal, lo que comprende un adecuado programa de prevención de enfermedades y que se les administren tratamientos veterinarios apropiados cuando corresponda, y que se les manipule y sacrifique de manera compasiva (OMS, 2019). En general, un perro de la brigada canina puede trabajar durante un periodo de 8 a 10 años y se busca que al jubilarse se queden con sus entrenadores. Sin embargo, no siempre es el caso por lo que el perro se pondría en adopción con algún sereno de la municipalidad correspondiente (Méndez, 2018).
Las principales razones para la jubilación de un perro de la brigada canina se encuentran en la incapacidad para hacer frente a las demandas físicas del trabajo. Esto se podría relacionar a problemas de columna vertebral, principalmente en la articulación coxo-femoral (displasia de cadera), la cual es predisponente en razas de perros que son seleccionados para el servicio de serenazgo. Asimismo, otra de las razones de jubilación puede ser problemas de conducta como agresión problemática. La jubilación por heridas ocurridas durante el trabajo (heridos por balas, accidentes automovilísticos, etc.), aunque son infrecuentes, son posibles razones para un retiro temprano (Williams et al., 2009; Schilling, 2011; Worth et al., 2013; Bruchim et al., 2019).
En cuanto al desarrollo profesional, las brigadas caninas de serenazgo ofrecen a los médicos veterinarios la oportunidad de desarrollar competencias especializadas en las áreas clínicas que permitan atender las demandas de servicios de salud de esta población animal. A su vez, las instituciones académicas pueden considerar elaborar una currícula con temas especializados de importancia para esta población animal como riesgos ambientales y el tratamiento adecuado de las lesiones ambientales, así como aplicar técnicas innovadoras en soporte vital básico (Bruchim et al, 2019). Asimismo, la existencia de estos animales puede generar espacios para la práctica clínica de los estudiantes y espacios laborales a los egresados quienes pueden desarrollarse profesionalmente como asesores en aspectos de salud animal en las municipalidades.
CONCLUSIONES
La mayor proporción de municipios, cuyos serenazgos utilizaron perros, fueron los provinciales.
El mayor número de perros utilizados a nivel provincial y distrital en el servicio de serenazgo fue en los años 2016 y 2017.
El mayor número de perros registrados para uso de serenazgo fue en el departamento de Lima, seguido del Callao, Piura, la Libertad y Cusco.
Los distritos de Lima Metropolitana con el mayor número de perros al servicio de serenazgo fueron Lima, Santiago de Surco, San Borja, Chorrillos y La Molina.