INTRODUCCIÓN
Se estima que la población bovina en Colombia está distribuida en 655 661 predios y está constituida por 28 245 262 animales, de los cuales 10.4% se ubica en el departamento de Antioquia (ICA, 2020). La producción de leche fue de 2518 millones de litros a nivel nacional en 2019, de los cuales Antioquia produce el 37% (Fedegan, 2020). Para la mejora de la producción de leche, además de los programas de mejoramiento genético y empleo de biotecnologías reproductivas, se dispone de programas de prevención, control y erradicación de problemas de impacto económico al interior de las producciones, dentro de los cuales se encuentra la mastitis (Mein et al., 2001; Wellenberg et al., 2002; O'Flaherty et al., 2005; Florentin, 2007; Bedolla y Ponce de León, 2008).
Dentro de los múltiples factores que favorecen la presentación de mastitis se encuentra la conformación anatómica de la ubre, particularmente con aquellos agentes que tienen como vía de entrada el pezón (Neijenhuis et al., 2000; Báez, 2002). Las barreras físicas primarias de protección del pezón están constituidas por el esfínter y el canal del pezón, por lo que es fundamental para la integridad de la glándula mamaria que tales estructuras se encuentren en perfectas condiciones físicas e higiénicas para prevenir las infecciones intramamarias (Pinho Manzi et al., 2012; Neijenhuis et al., 2001; Mein et al., 2001).
Diversos estudios han evaluado la forma y condición del pezón, la integridad del esfínter, presencia de hiperqueratosis y su asociación con la presencia de mastitis (Riera-Nieves et al., 2005; Pinho Manzi et al., 2012; Sterrett et al., 2013); sin embargo, no se dispone de estudios en Colombia que asocien las características del pezón con la presencia de patologías mamarias, por lo que en este estudio reporta la frecuencia de mastitis subclínica y su asociación con las diversas formas del extremo y el esfínter del pezón en vacas Holstein dedicadas a la producción especializada de leche en el norte de Antioquia.
MATERIALES Y MÉTODOS
Aspectos Éticos
Durante el estudio se garantizó que los animales no fueran sometidos a dolor y/o estrés innecesario, por lo que fueron inmovilizados teniendo en cuenta las normas técnicas en el manejo y sujeción de animales, enmarcado en el cumplimiento de la Declaración Universal de los Derechos de los Animales, referente a los principios éticos internacionales para la investigación biomédica con animales del CIOMS (Council for International Organizations of Medical Sciences) establecida por la UNESCO (Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) y la OMS (Organización Mundial de la Salud) de 1949 y de la Ley 84 de Octubre 27 de 1989 (Estatuto Colombiano de ProtecciónAnimal) (Mrad de Osorio, 2006)
Descripción de la Muestra
El estudio fue descriptivo. El muestreo se realizó entre el 26 de junio y el 18 de agosto de 2018. El tamaño de la muestra se escogió a conveniencia de vacas de raza Holstein del altiplano norte de Antioquia que se encontraban en lactancia, sin discriminar por edad o número de partos.
Todos los animales fueron sometidos a un examen físico general, siendo excluidos aquellos que presentaran manifestaciones de enfermedad clínica sistémica, vacas con menos de 30 días posparto o con más de 300 días en leche, así como aquellas que hubieran tenido tratamientos médicos ocho días previos a la toma de la muestra.
Método de Muestreo
Se muestrearon tres unidades productivas de los municipios de Yarumal y Santa Rosa de Osos. La muestra estuvo constituida por 924 cuartos (231 animales). Las evaluaciones se realizaron durante el ordeño de la tarde, donde se hizo la clasificación morfológica del extremo del pezón según las categorías descritas por Riera et al. (2005, 2006) y la conformación del esfínter del pezón según lo descrito por Neijenhuis et al. (2000), y se prosiguió con la prueba de CMT ejecutada por una persona entrenada y según el protocolo y evaluación descrita por Ramírez et al. (2011).
Análisis Estadístico
La información fue recopilada en una base de datos realizada en Microsoft Excel y analizada utilizando el paquete estadístico Infostat (2015). Se realizó estadística descriptiva de los pezones, obteniendo frecuencias relativas y absolutas para cada variable de estudio (forma del pezón, esfínter del pezón y resultado de CMT). Asimismo, se determinó la asociación entre las variables utilizando la prueba de Chi cuadrado de Pearson (p<0.05).
RESULTADOS
El 19.9% (46/231) de la muestra fue obtenida del municipio de Yarumal y el 80.1% (185/231) restante del municipio de Santa Rosa de Osos. Las vacas tenían edades entre 2 y 12 años, y presentaban entre 1 y 9 partos. Se encontró 23% (204/924) de los cuartos, y 26.8% (62/231) de los animales con mastitis subclínica, además de 1.83% (17/924) de los cuartos no funcionales. Estos datos difieren de los reportes de Trujillo et al. (2010) y Ramírez et al. (2011) en el municipio de San Pedro de los Milagros (norte de Antioquia, Colombia).
En la clasificación de los cuartos positivos a CMT se encontró que 7.3% (66/907) prestaron trazas, 7.9% (72/907) una cruz, 6.7% (61/907) dos cruces y 0.7% (6/907) tres cruces. Estos datos son similares a los reportados por Ramírez et al. (2011) para cuartos positivos con una cruz y dos cruces, aunque inferiores para cuartos con mastitis subclínica. Por otro lado, Trujillo et al. (2010) en el norte de Antioquia reportaron frecuencias mayores para los cuartos positivos a una cruz.
Al evaluar la forma del extremo del pezón se encontró que 74% (668/907) presentaban una forma redonda, 10% (93/907) en forma de disco y 9% (79/907) plano (Cuadro 1; Figura 1). En un estudio similar en vacas Carora, Riera et al. (2005) encontraron una frecuencia de 51.3 y 29.3% para extremos redondos y en embudo, respectivamente. Esto puede deberse a los factores particulares que presenta la raza o al sistema de ordeño implementado.
Extremo del pezón | Frecuencia relativa (%) | Esfínter del pezón | Frecuencia relativa (%) |
---|---|---|---|
Redondo | 74 | Sin anillo | 3 |
Disco | 10 | Anillo liso | 63 |
Plano | 9 | Anillo elevado | 30 |
Embudo | 6 | Elevado hiperqueratinizado | 5 |
Prolapso | 1 | Muy hiperqueratinizado | 0 |
Perdido | 2 | Perdido | 2 |
Al evaluar la distribución de las distintas formas del extremo del pezón según el número de partos, se encontró que la forma redonda fue la que presentó una mayor frecuencia, independientemente del número de partos. No obstante, y aparte de la forma redonda, el extremo del pezón en forma de disco fue más frecuente en vacas de quinto parto, el plano en vacas de cuarto parto, en embudo en vacas de sexto parto, y extremos prolapsados en vacas de octavo parto (Cuadro 2). Se encontró la mayor frecuencia del anillo liso entre el primer al octavo partos, siendo frecuente el esfínter sin anillo para animales de segundo parto y a partir del cuarto parto se presenta una mayor frecuencia de anillo elevado, mientras que el anillo elevado hiperqueratinizado presentó una mayor frecuencia en animales de sexto parto.
Número de parto | Redondo | Disco | Plano | Embudo | Prolapso | Total (n) |
---|---|---|---|---|---|---|
1 | 76.6 | 8 | 11.7 | 3.2 | 0.5 | 188 |
2 | 77.4 | 13 | 3.3 | 5.6 | 0.6 | 177 |
3 | 82.7 | 6 | 9 | 2.2 | 0 | 133 |
4 | 63.1 | 11.5 | 14.7 | 9.8 | 0.8 | 122 |
5 | 74.7 | 16.1 | 3.4 | 3.4 | 2.3 | 87 |
6 | 58.1 | 8.1 | 13.5 | 18.9 | 1.3 | 74 |
7 | 60.7 | 15.5 | 9.5 | 11.9 | 2.4 | 84 |
8 | 97.4 | 0 | 0 | 0 | 2.6 | 38 |
9 | 100 | 0 | 0 | 0 | 0 | 4 |
Total (n) | 668 | 93 | 79 | 58 | 9 | 907 |
Al evaluar la distribución de las distintas formas del extremo del pezón según el número de partos, se encontró que la forma redonda fue el que presentó una mayor frecuencia, independientemente del número de partos. No obstante, el extremo del pezón en forma de disco fue más frecuente en animales de quinto parto, el plano fue más frecuente en animales de cuarto parto, el pezón en embudo lo fue en animales de sexto parto, mientras que los animales de octavo parto fueron los que tuvieron una frecuencia mayor de pezones con extremo prolapsados (Cuadro 2).
Al evaluar la asociación (%) de la forma del extremo del pezón y el resultado de la prueba de CMT se encontró una mayor frecuencia de CMT positivo con el pezón redondo (14.6 %) seguido por el pezón en plano y pezón disco (2.86 y 2.75%, respectivamente), considerando el grado de trazas como CMT positivo. La prueba de Chi cuadrado demostró encontró asociación significativa (p<0.0001) entre el resultado del CMT y la morfología del pezón (Cuadro 3).
CMT | Redondo | Disco | Plano | Embudo | Prolapso | Total n (%) |
---|---|---|---|---|---|---|
Negativo | 59.1 | 7.5 | 5.8 | 4.6 | 0.3 | 702 (77.4) |
T | 5.00 | 0.77 | 0.99 | 0.55 | 0 | 66 (7.28) |
+ | 5.29 | 0.88 | 0.99 | 0.44 | 0.33 | 72 (7.9) |
++ | 3.97 | 1.1 | 0.88 | 0.55 | 0.22 | 61 (6.7) |
+++ | 0.33 | 0 | 0 | 0.22 | 0.11 | 6 (0.66) |
Total n (%) | 668 (73.65) | 93 (10.25) | 79 (8.71) | 58 (6.39) | 9 (0.99) | 907 (100) |
Se encontró una mayor frecuencia de esfínteres de pezón con anillo liso 63% (567/907), seguido de un esfínter elevado 30% (272/907) y esfínter elevado hiperqueratinizado 5% (44/907). La mayor frecuencia de anillo liso se observó en vacas hasta el octavo parto. En el caso de vacas con esfínter sin anillo se observó una mayor frecuencia en animales de segundo parto, en vacas con anillo elevado hiperqueratinizado en vacas de sexto parto, en tanto que con anillo elevado se presentó una mayor frecuencia partir del cuarto parto (Figura 1; Cuadro 4).
Partos | Sin anillo | Anillo liso | Anillo elevado | Elevado hiperqueratinizado | Total (n) |
---|---|---|---|---|---|
1 | 0.5 | 64.9 | 29.8 | 4.7 | 188 |
2 | 7.3 | 58.7 | 28.2 | 5.6 | 177 |
3 | 0 | 96.2 | 28.6 | 2.2 | 133 |
4 | 1.6 | 59.8 | 35.2 | 3.2 | 122 |
5 | 6.9 | 60.9 | 26.4 | 5.7 | 87 |
6 | 1.3 | 64.9 | 21.6 | 12.2 | 74 |
7 | 1.2 | 64.3 | 30.9 | 3.6 | 84 |
8 | 0 | 52.6 | 44.7 | 2.6 | 38 |
9 | 0 | 25 | 75 | 0 | 4 |
Total (n) | 24 | 567 | 272 | 44 | 907 |
Estos resultados difieren con los hallazgos de Mein et al. (2001), quienes encuentran una alta frecuencia de esfínter elevado hiperqueratinizado en animales de 1 y 2 años, en tanto que Neijenhuis et al. (2000) encontraron 24% de la población con hiperqueratosis. Estas diferencias podrían deberse a condiciones particulares del proceso de ordeño, particularmente aquellas relacionadas con la máquina de ordeño, ya que una mala calibración de la máquina puede generar múltiples lesiones en los pezones, siendo la hiperqueratosis la alteración más común (Mein et al., 2001; Pinho Manzi et al., 2012).
Al evaluar la asociación de la morfología del esfínter y el resultado de la prueba de CMT en términos porcentuales se encontró una mayor frecuencia de CMT positivo en el esfínter de anillo elevado (9.38%) seguido por esfínter anillo liso e hiperqueratinizado (9.31 y 3.78%, respectivamente), considerando el grado de trazas como CMT positivo. La prueba de Chi cuadrado encontró asociación significativa (p<0.0001) entre el resultado del CMT y la morfología del pezón (Cuadro 5). Estos resultados difieren igualmente de los hallazgos de Mein et al. (2001, 2008) quienes reportan una mayor presentación de mastitis subclínica en vacas con anillos hiperqueratinizados e anillos elevados hiperqueratinizados. Por otro lado, Guarin et al. (2017) solo encontraron una asociación significativa de los cuartos mamarios anteriores con la mastitis, así como esfínteres con hiperqueratosis con mastitis subclínica.
CMT | Sin anillo | Anillo liso | Anillo elevado | Elevado hiperqueratinizado | Total |
---|---|---|---|---|---|
Negativo | 2.43 | 53.25 | 20.62 | 1.10 | 702 (77.40) |
T | 0 | 2.98 | 3.53 | 0.77 | 66 (7.28) |
+ | 0.11 | 3.42 | 3.31 | 1.10 | 72 (8.00) |
++ | 0.11 | 2.80 | 2.10 | 1.80 | 61 (6.70) |
+++ | 0 | 0.11 | 0.44 | 0.11 | 6 (0.66) |
Total | 24 (2.65) | 567 (62.50) | 272 (30.0) | 44 (4.80) | 907 (100) |
CONCLUSIONES
Se encontró una frecuencia de 23% de los cuartos y 26.8% de las vacas positivas a la prueba de CMT.
La mayor frecuencia de la forma del pezón fue el redondo y con esfínter de anillo liso.
La mayor frecuencia de un CMT positivo se encontró con extremos de pezón redondo y con esfínter de anillo liso.
Los cambios asociados a la hiperqueratosis del esfínter y el prolapso de este parecen estar asociado a animales con mayor edad y al mayor número de partos.