Señor Editor:
He leído con gran interés la reciente publicación de Orihuela Casimiro et al.; en la cual se comenta sobre la importancia de monitorizar la función renal durante el tratamiento de hepatitis C (VHC) con antivirales de acción directa en pacientes coinfectados con VIH/VHC 1). Una de las razones expuestas en el artículo es que la tasa de filtración glomerular podría verse afectada por la interacción medicamentosa entre ciertos antivirales como Sofosbuvir y Velpatasvir con drogas antirretrovirales, principalmente Tenofovir (TDF), lo cual aumentaría el riesgo de toxicidad renal; sin embargo, existe evidencia científica reciente que nos indica que la monitorización renal no sería necesaria en todos los pacientes mono infectados con VHC, y tampoco en gran parte de pacientes coinfectados con VIH/VHC.
Al respecto, Davis et al. realizaron un ensayo clínico en el que evaluaron a pacientes con VHC tratados con un esquema antiviral basado en Sofosbuvir, siendo aleatorizados en dos brazos: un primer brazo con monitorización estándar y un segundo brazo con monitorización mínima. Para este estudio, la monitorización estándar consistía en exámenes de laboratorio y visitas clínicas presenciales en las semanas 4 y 12 del tratamiento, y luego en 12 semanas de terminado el tratamiento. La monitorización mínima incluía solo llamadas telefónicas en las semanas 4 y 12 del tratamiento y una visita presencial con exámenes de laboratorio a las 12 semanas post tratamiento. Los investigadores evaluaron tres desenlaces primarios: la proporción de participantes que lograron supresión virológica sostenida, el tiempo invertido en la atención médica y la satisfacción de los pacientes. No se detectaron diferencias significativas entre los dos brazos para estos desenlaces. Tampoco se hallaron diferencias en eventos adversos (desenlace secundario). Según los autores, estos hallazgos sugieren que la monitorización laboratorial y las visitas presenciales no serían necesarias durante el tratamiento de pacientes con VHC 2).
Otro estudio importante que evaluó la monitorización mínima en el tratamiento de VHC fue realizado por Solomon et al.; quienes realizaron un ensayo clínico fase 4 de brazo único en 38 centros ubicados en Brasil, Sudáfrica, Tailandia, Uganda y EE.UU. (ensayo MINMON). Los pacientes incluidos fueron adultos con infección por VHC, sin historia de tratamiento previo. Cabe destacar que en este estudio se incluyó pacientes con cirrosis compensada y pacientes con coinfección VIH/VHC. De hecho, el 42% de participantes tenía coinfección VIH/VHC y el 99% recibía tratamiento antirretroviral. Para este estudio, la monitorización mínima incluía solo dos evaluaciones remotas (por teléfono o redes sociales), en las semanas 4 y 22. Posteriormente, se llevaba a cabo una visita presencial con exámenes de laboratorio en la semana 24. Se evaluaron dos desenlaces primarios: eficacia (supresión virológica sostenida) y seguridad (eventos adversos). Los resultados mostraron un porcentaje de supresión virológica sostenida de 95% (IC 95% 92.4-96.7) y una tasa de eventos adversos de 4%, sin producirse suspensión del tratamiento o desenlaces fatales. Todo ello fue muy similar a lo demostrado en estudios del mundo real que utilizaron monitorización estándar, sugiriendo que esta estrategia podría ser aplicada de forma eficaz tanto en pacientes mono infectados con VHC o coinfectados con VIH/VHC 3).
La monitorización mínima es considerada actualmente en la guía del AASLD/IDSA, como una opción válida en pacientes con VHC sin antecedente de tratamiento previo de VHC, que no hayan desarrollado cirrosis o tengan cirrosis compensada 4). Considero que se ha avanzado mucho en el tratamiento de VHC en el Perú, con experiencias muy satisfactorias documentadas en su prestigiosa revista 5), y espero que estos aportes sean de utilidad en la práctica clínica, para poder ofrecer a los pacientes con VHC un tratamiento con seguimiento clínico y laboratorial simplificado que permita masificar la terapia y contribuir con la erradicación de esta enfermedad en el mediano plazo.
Palabras clave: Hepatitis C; Terapéutica; Monitoreo Fisiológico, Pruebas de Función Renal; Nefropatía Asociada a SIDA.
Keywords: Hepatitis C; Therapeutics; Monitoring, Physiologic; Kidney Function Tests; AIDS-Associated Nephropathy.