INTRODUCCIÓN
Los sistemas de producción de carne dependen en gran medida de los resultados reproductivos y del crecimiento del animal. La baja eficiencia reproductiva es una de las limitantes para reactivar y expandir la producción (Pérez-Clariget et al., 2007), de allí que el control de la reproducción permite reducir los periodos de anestro y aumentar la productividad. Entre los factores que afectan el anestro posparto se encuentra la lactancia, el vínculo madre-ternero y el estado nutricional pre y posparto (Baruselli et al., 2004).
Se ha demostrado el efecto benéfico del destete temporario sobre la inducción de la ovulación en vacas en anestro posparto. Vasconcelos et al. (2009) realizaron un destete por 48 horas al finalizar el tratamiento hormonal en vacas Angus x Nelore en anestro posparto y mejoraron las tasas de preñez. En contraste, Pinheiro et al. (2009) no lograron aumentar la tasa de preñez con destete temporario combinado con tratamiento hormonal para inseminación artificial a tiempo fijo (IATF) en vacas Nelore.
En los últimos años se han logrado avances importantes en el desarrollo de tratamientos hormonales inductores de ovulación sincronizada que permiten realizar la IATF sin necesidad de detectar el celo, principal limitante para la IA (Alberio, 2003). Por otro lado, la IATF combinada con el uso de la tablilla nasal en terneros fue utilizada por Maraña Peña et al. (2005) durante dos años encontrando que la tasa de preñez resultante depende de la interacción de las condiciones climáticas y la condición corporal de la vaca. En cambio, Rosatti et al. (2016) demostraron que la tablilla nasal colocada en terneros durante 14 días en combinación con un tratamiento para inducción de celo con progesterona (P4) aumentó la tasa de preñez en comparación con vacas del grupo control (70.6 vs 26.7%, respectivamente), pero se afecta el peso al destete de los terneros.
Los reportes sobre esta metodología de bajo costo y fácil aplicación son escasos y los resultados son contradictorios y muy variables. Por ello, generar este tipo de información en los rodeos bovinos de la región árida de "los llanos riojanos" de Argentina resulta de interés para incrementar la eficiencia reproductiva de los animales. En consecuencia, el presente estudio tuvo como propósito evaluar el efecto de la restricción del amamantamiento con tablilla nasal sobre la productividad de terneros y vacas Angus y Criolla bajo IATF en la zona árida de Argentina.
MATERIALES Y MÉTODOS
Lugar de Estudio
Este trabajo se llevó a cabo en el Campo Anexo "Los Cerrillos" (Estación Experimental La Rioja), perteneciente al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) y en un predio de ganadería comercial denominado "Balde El Tala", ambos ubicados en la provincia de La Rioja, Argentina, durante los meses de enero a junio de 2017. En la zona, las precipitaciones varían desde 250 hasta 450 mm anuales, principalmente en verano (diciembre a marzo). Enero es el mes de mayor temperatura promedio (26 ºC) y julio el mes más frío (11 ºC) y la humedad relativa promedio anual es 58.7%. La receptividad promedio de la zona es de 1 Unidad Ganadera/20 ha.
Animales y Tratamientos
Experimento 1 (EEA INTA La Rioja). Se utilizaron 146 vacas multíparas lactantes, 72 vacas Angus (A) de 5 a 8 años de edad y de 2 a 4 partos y 74 vacas Criolla (C) de 5 a 10 años de edad y de 2 a 5 partos, con pesos (PV) de 399.7 ± 15.6 y 388.8 ± 14.6 kg, intervalo parto-tratamiento (IPT) de 80.2 ± 3.0 y 72.2 ± 3.0 días (media ± EE) y condición corporal (CC) de 3.1 ± 0.1 y 2.9 ± 0.1 (Houghton et al., 1990), respectivamente.
Experimento 2 (Predio comercial). Se utilizaron 109 vacas Angus multíparas lactantes de 5 a 9 años de edad y 2 a 4 partos, con un IPT de 59.4 ± 0.7 días, 385.3 ± 5.4 kg de PV y condición corporal de 3.2 ± 0.1.
Las vacas de ambos experimentos fueron expuestas a condiciones ambientales, nutricionales (pastura de Buffel Grass Cenchus cilliaris) y de manejo similar y fueron asignadas en forma aleatoria (considerando el PV y el IPT) a dos tratamientos: Control (C, amamantamiento ad libitum) y Amamantamiento Restringido (AR, tablilla nasal en los terneros durante 14 días) (Cuadro 1).
1 mg de cipionato de estradiol IM (Cipiosyn, Zoetis, Argentina)
Control: amamantamiento ad libitum; Amamantamiento restringido: tablilla nasal en los terneros durante 14 días
Para la IATF, todas las vacas fueron tratadas con un dispositivo intravaginal impregnado con 0.5 g de progesterona (DIB, Zoetis, Argentina) durante 8 días. Al momento de colocar el dispositivo (Día 0) se aplicó una inyección IM de 2 mg de benzoato de estradiol (Gonadiol, Zoetis, Argentina). Al retiro del dispositivo (Día 8) se aplicaron 500 µg de cloprostenol sódico IM (PGF2α, Ciclase DL, Zoetis, Argentina) y (Figura 1). Las vacas fueron marcadas con una franja de pintura (Celo test, Biotay, Argentina) de 20 cm de largo x 5 cm de ancho en la zona sacro-coccígea. Todas las vacas fueron inseminadas por un mismo operador con semen congelado de toros Angus y Criollo de probada fertilidad a las 52-56 horas (Día 10) de retirado el dispositivo. Las vacas con franja de pintura despintada en más de un 50% fueron consideradas en celo.
En el Día 0, a los terneros de AR se les colocó una tablilla (Destetador Durflex, Argentina) en los ollares de la nariz durante 14 días. Los terneros del grupo Control amamantaron ad libitum durante todo el experimento. En los Días 0, 8 y 17 se evaluó la actividad ovárica mediante ultrasonido utilizando un ecógrafo HONDA HS 2100V con un transductor lineal transrectal (7.5 MHz). En el Día 0 se consideró como vaca cíclica a aquella que presentó un cuerpo lúteo (CL). En el Día 8 se registró el diámetro del folículo de mayor tamaño (DFMT), considerándolo como folículo preovulatorio. La ovulación se confirmó en el Día 17 mediante la presencia de un CL en el ovario donde se encontraba presente el FMT. El diagnóstico de gestación se realizó por ultrasonografía a los 35 días pos-IATF. Los terneros fueron pesados los Días 0 y 14 y al destete (6 meses de edad promedio).
Todos los procedimientos experimentales fueron realizados teniendo en cuenta las normas éticas y de bienestar animal y fueron aprobados por el Comité Institucional para el Cuidado y Uso de Animales de Experimentación (CICUAE) del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA).
Análisis Estadístico
En el Experimento 1 se utilizó un diseño completamente aleatorizado con arreglo factorial 2 x 2 (dos razas x dos tratamientos). En el Experimento 2 se utilizó un diseño experimental completamente aleatorizado, siendo los tratamientos considerados como efectos fijos. En ambos experimentos, las variables físicas se evaluaron mediante modelos lineales mixtos. La heterogeneidad de varianza se modeló en las variables donde fue necesario para seleccionar el modelo adecuado. Las variables binarias (preñada/vacía, con/sin celo, con/sin CL) fueron analizadas mediante modelos lineales generalizados mixtos. Se utilizó un modelo de regresión logística para relacionar las variables binarias con variables cuantitativas. Se trabajó con un nivel de significancia del 5% y se utilizó el software Infostat/P v. 2017 (Di Rienzo et al., 2017).
RESULTADOS
Experimento 1
No se observó interacción significativa entre el tratamiento y la raza sobre el PV, la CC, el IPT y el porcentaje de ciclicidad (presencia de CL) en el Día 0 (Cuadro 2), lo cual confirma la correcta asignación aleatoria de las unidades experimentales. No se observaron efectos significativos de la interacción entre el tratamiento y la raza, ni efecto de tratamiento ni raza sobre el DFMT, y porcentajes de vacas en celo, ovulación y preñez (Cuadro 3).
El PV y la GDPV de los terneros se muestran en el Cuadro 4. El PV de los terneros en el Día 0 fue similar entre tratamientos y entre razas. Al Día 14 y al destete, los terneros del grupo C fueron 8.0 kg (p=0.002) y 12.2 kg (p=0.001) más pesados respectivamente, que los terneros sometidos al AR. En cambio, no hubo diferencias significativas entre razas en el Día 14 (p=0.147) ni al destete (p=0.089). En forma similar, la ganancia de peso fue mayor en los terneros del tratamiento C con relación al tratamiento AR. En cambio, no hubo diferencias en GDPV entre razas en los periodos evaluados (Cuadro 4).
Experimento 2
Los valores de DFMT, porcentaje de celo, ovulación y preñez a la IATF entre vacas AR y C no fueron significativamente diferentes (Cuadro 5). La Figura 2 muestra el resultado de la regresión logística utilizando los tratamientos como variable de clasificación, el DFMT como variable regresora y la tasa de ovulación (%) como variable dependiente. No hubo diferencias significativas entre los tratamientos en el porcentaje de ovulación con relación al DFMT, pero por cada incremento (1.0 mm) en el diámetro folicular las vacas tienen mayor probabilidad de ovular (p<0.006). A partir de 10.0 mm de diámetro folicular, la probabilidad de ovulación se mantuvo constante.
Los terneros del tratamiento C en el Día 14 fueron 7.3 kg más pesados que los terneros del tratamiento AR (p=0.003), diferencia que se mantuvo hasta el destete, donde los terneros del tratamiento C fueron 8.6 kg más pesados (p=0.015). En el caso de la GDPV se observaron diferencias significativas a favor del tratamiento C entre los días 0 y 14 (p=0.001), más no hubo diferencias significativas entre el día 14 y el destete (Cuadro 6).
DISCUSIÓN
El amamantamiento y el balance energético negativo son los dos factores más importantes que extienden la duración del anestro posparto debido a su efecto negativo sobre la frecuencia de los pulsos de LH y el desarrollo folicular (Wiltbank et al., 2002). El destete temporario es una intervención de bajo costo, que en combinación con el protocolo hormonal propuesto, ha permitido mejorar la fertilidad en vacas índicas posparto (Sa Filho et al., 2009). En el presente trabajo (Exp. 1 y 2), la restricción del amamantamiento, mediante el uso de la tablilla nasal en los terneros en combinación con un tratamiento con P4 intravaginal, para IATF no aumentó la tasa de preñez en vacas multíparas Angus y Criollas. Es probable que la ausencia del amamantamiento no haya sido estímulo suficiente para contrarrestar el efecto inhibitorio de los péptidos endógenos liberados por la percepción materna del ternero durante el periodo de retiro (Rund et al., 1989; Yavas y Walton, 2000).
Rosatti et al. (2016) obtuvieron 20% más de preñez en vacas con AR con relación al grupo control, aunque el resultado no fue estadísticamente significativo (AR = 60.6% (20/33) vs C = 41.9% (13/31), probablemente por el bajo número de vacas utilizadas. Por otro lado, Maraña Peña et al. (2005) demostraron que el uso de la tablilla nasal en los terneros solo mejoró la tasa de preñez cuando las vacas se encontraban en un balance energético positivo y una CC >2.5 en una escala de 1-5. Otros estudios demuestran que una baja CC al comienzo de un protocolo para IATF está asociado con una baja respuesta reproductiva (Bó et al., 2007; Meneghetti et al., 2009). No obstante, en el presente trabajo, las vacas presentaban una CC mayor de 2.5 en la escala de 1 a 5; lo cual quedó en concordancia con el estudio de Vittone et al. (2011) quienes reportaron que vacas multíparas con cría al pie y con una CC de 5.5 en una escala de 1 a 9, el destete definitivo durante un tratamiento hormonal para IATF no mejoró los índices reproductivos.
Otro factor que condiciona la respuesta reproductiva a los tratamientos de inducción y sincronización del celo y la ovulación es el intervalo parto-tratamiento. A mayor intervalo posparto, el hipotálamo se vuelve menos sensible al efecto inhibidor del estradiol, lo cual conduce a un incremento en la frecuencia de liberación de GnRH y LH, estimulando el desarrollo folicular y la ovulación (García-Winder et al., 1984; Yavas y Walton, 2000). El IPT en el Exp. 1 fue de 76.2±3.0 días y en el Exp. 2 de 59.4±0.7 días, intervalos superiores al periodo requerido para la reactivación de la actividad ovárica (Wright y Malmo, 1992), de allí que el 50% de las hembras de ambas razas se encontraban ciclando al inicio del Exp. 1, consiguiéndose un porcentaje de celo y ovulación mayor al 85%, independientemente de la restricción del amamantamiento. Pinheiro et al. (2009) sugirieron que los tratamientos hormonales para IATF deberían iniciarse, por lo menos, a partir de los 40 días posparto en vacas con buena CC, en tanto que Baruselli et al. (2013) indicaron que si se realiza antes de los 60 días en vacas Bos indicus se requiere la administración de eCG al finalizar el tratamiento para aumentar las tasas de concepción, independientemente de su CC.
En el presente trabajo, independientemente de la raza, la restricción del amamantamiento no incrementó el DFMT en el Día 8. El diámetro alcanzado fue mayor a 10.0 mm, límite por encima del cual el folículo dominante adquiere la capacidad ovulatoria (Sartori et al., 2001). Rosatti et al. (2016) observaron que el uso de la tablilla nasal aumentó el diámetro del folículo preovulatorio en vacas Braford multíparas, en tanto que Vittone et al. (2011) reportaron que el destete definitivo al comienzo del tratamiento hormonal aumentó el diámetro del folículo preovulatorio y que en vacas con cría al pie no superaba los 9.0 mm de diámetro. Por otro lado, la restricción del amamantamiento una vez por día durante 60 minutos en vacas con buena CC y tratadas con P4 no mejoró el diámetro del folículo (Mackey et al., 2000).
En los dos experimentos realizados, el porcentaje de celo observado después del tratamiento hormonal no aumentó en vacas con AR (89 y 54% en Exp. 1 y 2, respectivamente) y sin diferencias entre tratamientos, aunque con una ligera mejora en vacas del tratamiento AR. Estos resultados coinciden con lo reportado por Rosatti et al. (2016), quienes encontraron que las vacas con AR presentaron un 21% más de celo que las vacas del grupo control.
La tasa de ovulación no difirió entre tratamientos ni entre razas y fue superior al 90%, lo cual indicaría que, en las condiciones del presente trabajo, el amamantamiento no fue una limitante para producir la ovulación. Vittone et al. (2011) reportaron que en vacas de alta CC (5.5 en escala de 1 a 9), el destete definitivo no logró mejorar las tasas de ovulación; sin embargo, cuando la CC fue baja y no se realizó el destete, el porcentaje de ovulación fue inferior al 35%. Los resultados del presente trabajo fueron superiores a los reportados previamente por este equipo en vacas Angus en anestro con cría al pie (57%) y cíclicas (74%) con cría al pie (Manes et al., 2012). En el Exp. 1, la CC, el IPT y el porcentaje de vacas cíclicas (50%) permitieron alcanzar altas tasas de celo y ovulación, independientemente del tipo de amamantamiento. En el mismo sentido, la tasa de preñez no presentó diferencias entre los tratamientos.
Por el contrario, en vacas con baja CC, el destete definitivo ejerció un efecto positivo sobre la tasa de preñez (Vittone et al., 2011).
En este trabajo, los terneros con tablilla nasal durante 14 días tuvieron menores GDPV que los terneros que amamantaron ad libitum, resultados que coinciden con otros reportes (Stahringer, 2003; Quintans et al., 2009). Independientemente de la raza, la GDPV en los terneros del Exp. 1 se vio negativamente afectada, no solo durante el periodo en que se mantuvieron con la tablilla nasal, sino que este efecto se observó hasta el destete. Contrariamente, en el Exp. 2, el efecto negativo solo se presentó mientras tuvieron la tablilla nasal. Según Stahringer (2003), la disminución de peso se debe a la menor producción láctea (50%) de las vacas durante las primeras semanas después del retiro de la tablilla nasal, tendiendo tiempo después, según Lamb et al. (1999) a normalizar la producción de leche, efectos que pueden haber ocurrido en el presente estudio, aunque esta variable no fue evaluada. En coincidencia con los resultados de este estudio, De Nava (1994) reportó que el peso al destete en terneros con tablilla nasal fue significativamente menor en comparación con terneros con amamantamiento ad libitum (146.7 y 162.4 kg, respectivamente).
CONCLUSIONES
El tratamiento hormonal con dispositivos impregnados con progesterona para inseminación artificial a tiempo fijo en vacas, combinado con la restricción del amamantamiento mediante el uso de tablilla nasal en terneros durante 14 días, no mejora los porcentajes de preñez y afecta negativamente el peso de los terneros