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Lexis

versión impresa ISSN 0254-9239

Lexis vol.41 no.2 Lima jul./dic. 2017

http://dx.doi.org/10.18800/lexis.201702.010 

RESEÑAS

 

Zavala, Virginia y Michele Back (eds.). Racismo y lenguaje. Lima: Fondo Editorial de la Pontificia Universidad Católica del Perú, 2017. 409 pp.

 

Luis Andrade Ciudad

Pontificia Universidad Católica del Perú

 


Este libro reúne diez trabajos, la mayor parte de ellos originales, planteados desde la lingüística sociocultural, la antropología y los estudios culturales, que tienen en común el objetivo de profundizar en las relaciones entre lenguaje y racismo. Antecede al conjunto una introducción en la que, además de exponer los criterios de organización del texto, las editoras presentan un útil recorrido histórico y teórico sobre la noción de raza, las discusiones sobre el racismo en el Perú, la teorización reciente sobre las relaciones entre racismo y lenguaje, y sobre la comprensión de los espacios virtuales como ámbito de producción de discursos racializados. La raza se entiende, en esta introducción, como un concepto que constituye "uno de los legados más poderosos de la modernidad" (31), concepto que resulta imposible definir a priori, porque es "una serie de efectos ideológicos con un contenido variado, fluido y flexible", antes que "una propiedad intrínseca de ciertas formas de discurso o de ciertas maneras de hablar sobre otros" (32). El libro apuesta por una caracterización situada del racismo, estrechamente vinculada a las producciones discursivas que le dan sentido ideológico. Las editoras defienden, así, la utilidad de "un enfoque construccionista que apunta a la raza y al racismo como prácticas sociales en las que el lenguaje cumple un rol central" (32). En mayor o menor medida, los diez capítulos siguen líneas teórico-metodológicas similares a las anteriormente esbozadas.

En el primer capítulo, Leonor Lamas analiza las formas en que las retóricas raciales se articulan con las ideologías emprendedoras del capitalismo actual, observando en detalle dos campañas publicitarias de una universidad privada peruana, la Universidad César Vallejo, y recogiendo información etnográfica de esta misma institución, donde la autora fue alumna por un tiempo. El artículo se titula "‘Somos una raza distinta que puede lograrlo todo’: emprendimiento, educación y nuevas concepciones raciales en el Perú neoliberal". Lamas concluye que la "raza distinta" a la que alude el eslogan recogido en el título está formada por atributos que establecen diferencias irreconciliables entre determinados grupos sociales y argumenta que, en esa medida, "se trata de prácticas racializadoras" (72). Una condición para el desarrollo de las capacidades "emprendedoras", desde el punto de vista de estas campañas, es dejar atrás "las costumbres, hábitos o formas de ver la vida asociadas a la vida rural e indígena" (73). Por ello, Lamas establece vínculos entre el discurso de la "decencia", propio del XIX e inicios del XX, y el nuevo "emprendedurismo".

El segundo trabajo pertenece a Margarita Huayhua y se titula "Interacción social y racismo en el transporte público peruano". Huayhua parte de una minuciosa observación etnográfica de las interacciones producidas en un medio de transporte público cuzqueño, aprovechando instrumentos de la sociología interaccional desarrollada por Erving Goffman (1970). Observa en esta combi, que va de la ciudad del Cuzco a Uqhupata, un pueblo de las afueras, una "minisociedad" de "campesinos", "comuneros", "docentes" y "profesionales" que comparten el mismo espacio durante más de doscientos días al año. En sus interacciones, precisa Huayhua, "estos sujetos construyen fronteras sutiles y cambiantes a través de la humillación de los interlocutores". La observación incluye análisis de los diálogos en quechua y castellano entre los pasajeros, y abarca también procesos semióticos corporales como la mirada y la manera "empequeñecida" de sentarse de los campesinos. La autora concluye que si bien "la categoría general de ‘raza’ permea las interacciones diarias que se dan en la minisociedad de la combi, […] no lo hace a través de los tipos raciales o categorías locales con que históricamente se buscaba entender la raza y la etnicidad en los Andes" (109), como "indio", "cholo" y "mestizo".

Natalie Koc-Menard está a cargo del tercer capítulo: "Procesos de racialización después de la violencia política: el discurso de marginalidad en la comunidad de Chapi, Ayacucho", en el que aborda la polisemia del término marginal, tal como se usa en la frase comunidad marginal. El argumento, basado en el trabajo de campo y en la experiencia de la propia autora durante la elaboración del Informe final de la Comisión de la Verdad y Reconciliación (CVR), consiste en que los residentes de Chapi han resignificado la palabra marginal como un legado de los discursos de la CVR y del pos-conflicto armado interno, de tal manera que marginal y comunidad marginal se han terminado asociando, entre los chapinos, a una "subordinación parcial aceptada que tiene como finalidad ser escuchados y atendidos por el Estado" (115). Koc-Menard apunta que esta etiqueta, frecuentemente aplicada a la población rural quechua, se vincula con ideologías raciales y subordinadoras existentes en el imaginario nacional.

El cuarto trabajo, "Ideologías lingüísticas y racialización: un estudio con alumnos de secundaria en colegios limeños", de Ylse Mesía, es un ilustrativo análisis de las ideologías lingüísticas de dos grupos de estudiantes del distrito de San Miguel, el primer grupo de colegio privado y de clase media, y el segundo, de colegio público y de clase media baja o baja. Mesía se interesa por determinar las diferentes concepciones que tienen estos estudiantes acerca de lo que significa "hablar bien" y por la forma como se posicionan ante este ideal lingüístico. Sobre la base del discurso de los propios estudiantes, recogido mediante grupos focales, el análisis descubre que ambos grupos comparten solo algunas ideologías lingüísticas: la ideología de la "lengua culta" (o del "estándar", en otra terminología) y la de la "buena educación". Sin embargo, mientras que los alumnos del colegio público entienden el ideal de la "lengua culta" como conocer el significado de las palabras y usar un vocabulario alturado, los del colegio privado manifiestan una "visión tecnicista del lenguaje", asociada a "reglas gramaticales" y prescriptivas. Para el primer grupo, se llega a "hablar bien" mediante la instrucción formal en general, mientras que, para el segundo, "hablar bien" se adquiere "desde la cuna" y en un "buen colegio". Hay en los jóvenes del colegio estatal la creencia de que la instrucción adecuada desembocará en una "igualdad de oportunidades" a pesar de los orígenes socioeconómicos diferentes que los sujetos puedan tener, mientras que los alumnos del colegio privado manifiestan un "fatalismo étnico-cultural" en virtud del cual a los miembros de grupos desfavorecidos les será imposible ascender en la escala social. De este modo, "[a] la discusión en torno a ‘hablar bien’ y ‘hablar mal’ subyace un discurso racial que fija a los individuos en una condición inmutable, y, de esta manera, se constituye en un discurso rígido cuyo propósito es limitar severamente las posibilidades de ciertos sujetos" (178-179), concluye la autora.

Si el trabajo de Mesía permite observar la racialización del lenguaje, el capítulo quinto, a cargo de Víctor Vich y Virginia Zavala, constituye una buena ilustración, en línea con estudios anteriores (De la Cadena 2004, por ejemplo), de la medida en que la educación se encuentra también racializada en el Perú. A partir de entrevistas en profundidad con exitosos empresarios jóvenes de clase alta, Vich y Zavala estudian las maneras en las que estos sujetos entienden las razones de la desigualdad. Identifican un argumento educativo, "a partir del cual la cultura del enunciante se posiciona tutelarmente como aquella única que debe irradiarse en el espacio social"; un argumento racial, que "jerarquiza a la población y que se camufla bajo consideraciones supuestamente educativas" (185); y un argumento económico, que asume como inevitable la acumulación de capital por parte de un sector y el despojo de otros. Lejos de ser puros recursos retóricos, afirman los autores, "estos argumentos […] deben ser entendidos como dispositivos que pasan siempre a institucionalizarse como prácticas sociales" y que "ejercen un poder basado en imaginar la superioridad frente al otro", con el fin de resguardar privilegios sociales (225). Este capítulo fue publicado previamente en Ledesma Narváez, ed. (2015).

Florence Babb, en el capítulo sexto, hace un recorrido, a partir de su propia experiencia académica, sobre las intrincadas relaciones entre género, raza y clase, vínculos que se expresan mediante la metáfora de la trenza. En "Desigualdades entrelazadas: repensando la raza, el género y las identidades indígenas en el Perú andino", recorre varias décadas de pensamiento feminista respecto de estos nexos, en diálogo y debate con el enfoque de la "colonialidad del poder" (Quijano 2014), a partir de la evocación de una larga experiencia de campo en Vicos (Carhuaz, Áncash). El carácter más bien ensayístico de este capítulo se aleja del esfuerzo puesto por el conjunto de trabajos en presentar y analizar evidencia empírica directa, en diálogo con la reflexión teórica relevante.

Esta orientación empírica se retoma en el capítulo séptimo, de Roberto Brañez Medina, titulado "‘Amixer detected!’. Identidades y racismo en el ciberespacio peruano", en el que se analiza el portal Hi5amixer.com, dedicado al escarnio de jóvenes, hombres y mujeres, calificados de amixers (palabra derivada de amix, a su vez contracción estilizada de amigo, amiga). A partir de un corpus de cincuenta fotografías acompañadas de sus respectivos comentarios (útil unidad de análisis que el autor bautiza como foticom), Brañez Medina encuentra que la escritura y, en particular, las innovaciones ortotipográficas realizadas por los jóvenes en el marco de la comunicación mediada por computadora se convierten en "una herramienta para racializar a las personas" (271). De este modo, el amixer termina siendo definido como un sujeto "cholo", pobre, feo, ocioso y proveniente de los Andes, a partir de este conjunto de innovaciones ortográficas que el autor define, tal vez algo exageradamente, como un "español amixer". Brañez Medina identifica, además, que el dominio de las normas ortográficas no solo permite a los usuarios de esta página diferenciarse de los amixers repudiados, sino también establecer distinciones y jerarquías en el interior del "nosotros" no amixer.

El espacio virtual también constituye el ámbito de interés del capítulo octavo, a cargo de Michele Back, coeditora del volumen. "Raza y esencialismo lingüístico en el Twitter peruano" analiza las reacciones a dos performances comunicativas realizadas en quechua por la dirigenta política Keiko Fujimori, primero, y por el futbolista Claudio Pizarro, después. Aunque ambos eventos estuvieron muy separados en el tiempo y se dieron en contextos marcadamente distintos —el debate de la campaña presidencial del 29 de mayo del 2011 y el éxito del equipo peruano de fútbol en Chile entre el 16 de junio y el 3 de julio del 2015, en el marco de la Copa América—, la autora considera relevante comparar las reacciones suscitadas por ambas performances en el Twitter debido a sus fuertes contrastes. Mientras que el uso del quechua por parte de Pizarro fue destacado como positivo y potente, el intento discursivo de Fujimori fue representado mayoritariamente como incongruente, risible y digno de sospecha. A partir de esta discrepancia, y tomando en cuenta las diferencias temporales y contextuales antes mencionadas, la autora identifica "un racismo profundo hacia los asiáticos" (332) a partir del cual "el otro es a la vez diferente y [está] restringido a operar dentro de ciertos parámetros lingüísticos según su historia étnica" (334). Este análisis está precedido por un útil marco teórico sobre las relaciones entre comunicación por Twitter, lengua y raza.

En el capítulo noveno, Isabel Wong presenta el análisis de una fanpage de Facebook con objetivos supuestamente democráticos, "Vergüenza Democrática". "Prácticas racistas en la ‘democracia’ virtual: construyendo al ‘ppkausa’ en Facebook" estudia la representación de los seguidores de Pedro Pablo Kuczynski, actual presidente peruano, cuando fue candidato en el 2011, año en el que ganó las elecciones Ollanta Humala. La mencionada fanpage surgió con el objetivo de criticar los "comentarios de odio" contra los seguidores de Humala publicados por supuestos "ppkausas" en sus muros personales de Facebook. A partir del análisis de 39 interacciones discursivas, Wong encuentra que los administradores de la página recontextualizaron los mensajes originales y construyeron al "ppkausa" como una persona blanca, abiertamente racista, joven, inexperta y económicamente privilegiada. La autora entiende primero esta dinámica como un conjunto de "prácticas racistas a la inversa" (339), fusionadas con dimensiones educativas, económicas y de clase. Sin embargo, en las conclusiones, a partir de la definición de racismo de Van Dijk (2005) como "un sistema social de dominación de un grupo sobre otros", sugiere que el rechazo al blanco podría verse más bien como una respuesta al racismo y no como una práctica racista propiamente dicha (367-368). Aunque haría falta discutir esta aparente contradicción con más detenimiento, la autora concluye que "[l]o central es darnos cuenta de que la interacción en las redes sociales constituye un espacio para construir nuevas subjetividades racializadas […], para rechazar al ‘blanco’ y establecer nuevas, pero también viejas divisiones sociales entre grupos" (368).

En el capítulo décimo y final, Eunice Cortez analiza los discursos sobre raza y andinidad que se construyen en torno a la figura de la actriz y cantante Magaly Solier, natural de Huanta, Ayacucho, y protagonista de las películas Madeinusa y La teta asustada. La autora observa una contradicción entre "una mirada indigenista y localista" de la artista, difundida por los medios masivos de comunicación, mirada que determina opciones estáticas y esencialistas para una mujer andina, y la respuesta de Solier, quien "se opone a ser clasificada como autocontenida y desproblematizada" (379). De este modo, la actriz "construye y negocia identidades andinas que no siempre coinciden con los discursos hegemónicos e imágenes folclorizadas del Ande"; por ejemplo, destacando su origen rural antes que urbano, asumiendo con naturalidad las proyecciones globales de su trabajo y poniendo énfasis en la primacía del quechua entre sus recursos comunicativos, a pesar de que su biografía contradice esta afirmación. Todo ello determina, en la trayectoria de Solier, una ausencia de "cholificación" en el sentido de Quijano (1980). A pesar del interés de la temática, el trabajo es algo redundante en sus afirmaciones, que carecen de un soporte empírico suficiente. Para un trabajo basado en el análisis discursivo, se extrañan, por ejemplo, fragmentos amplios de declaraciones de la artista, tratándose de una persona tan compleja y expresiva.

Al margen de estos detalles, mirado en conjunto, Racismo y lenguaje es un compendio fascinante de aproximaciones diversas a las intersecciones entre prácticas discursivas y prácticas racializadoras en el Perú contemporáneo. Los distintos trabajos tienen dos rasgos en común: primero, el interés teórico por observar el racismo y el lenguaje como acciones sociales y, segundo, el énfasis metodológico en efectuar esta observación sobre la base de corpus de datos muy precisos y acotados (salvo las dos excepciones ya mencionadas).

De este modo, el libro consigue un muy buen balance entre teoría y evidencia empírica con el fin de abordar un problema crucial en el mundo contemporáneo, como es el del racismo. La lectura del volumen será provechosa para académicos y estudiantes avanzados que tengan interés en sociolingüística cualitativa, lingüística sociocultural, asuntos de raza y etnicidad, e interacciones en el espacio virtual.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

De la Cadena, Marisol 2004 Indígenas mestizos. Raza y cultura en el Cusco. Lima: Instituto de Estudios Peruanos.         [ Links ]

Goffman, Erving 1970 Ritual de la interacción. Buenos Aires: Tiempo Contemporáneo.         [ Links ]

Ledesma Narváez, Marianella, ed. 2015 Justicia, derecho y sociedad. Debates interdisciplinarios para el análisis de la justicia en el Perú. Lima: Centro de Estudios Constitucionales.         [ Links ]

Quijano, Aníbal 1980 Dominación y cultura: lo cholo y el conflicto cultural en el Perú. Lima: Mosca Azul.         [ Links ]

Quijano, Aníbal 2014 "Colonialidad del poder y clasificación social". En Cuestiones y horizontes. De la dependencia histórico-estructural a la colonialidad / descolonialidad del poder. Selección de Danilo Assis Clímaco. Buenos Aires: CLACSO, 285-327.         [ Links ]

Van Dijk, Teun 2005 Racism and discourse in Spain and Latin America. Ámsterdam: John Benjamins. https://doi.org/10.1075/dapsac.14.         [ Links ]

 

Recibido: 04/09/2017
Aceptado: 01/11/2017

 

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