1. Introducción y objetivos
En las modernas interacciones digitales emerge el conflicto normativo1 entre un estándar general y las modalidades, de índole subestándar, correspondientes a un “registro coloquial escrito” ( Felíu y Pato 2019) y, como tales, concepcionalmente orales (Koch y Oesterreicher ([1990] 2007). Estas “variedades en competencia” no se limitan a los dominios americanos (Garatea 2006, 2008; López Serena 2013; Di Tullio 2015; Carranza 2017), sino que se manifiestan, asimismo, -por más que se trate de un aspecto solo superficialmente conocido- en las variedades regionales del español europeo, de particular relevancia por lo que atañe a las alejadas del centro peninsular (Islas Canarias, Andalucía) y a las enraizadas en territorios bilingües o de “romanización tardía” (Galicia, País Vasco, territorios catalanohablantes)2. Esta competencia de sociolectos o dialectos “verticales” (estándar general frente a estándares regionales más o menos ejemplares) servirá de trasfondo para la propuesta de análisis abordada en el presente artículo acerca de las innovaciones modificadoras de la codificación sintáctica del experimentante del verbo gustar3 (1) en los dialectos del español del tercer milenio.
(1)
Si no les gustan la intervencion de la Corona obliguen a que la sierren ya que en primer lugar (NOW, México, NTR Zacatecas.com).
Quienes les gustan el café, deben ahorrar a el menos tres salarios íntegros para comprar una cafetera (NOW, Venezuela, Sumariu).
Sí, los necesiten o no, a muchos de ellos les gustan lucir lentes que sean, o que se vean, retro, con grandes aros (NOW, Perú, actualidadcanetana.blogspot.com).
También existen las que tienen el alma rubia y las que les gustan llamar la atención. Si tú aún no has aclarado tus cabellos pero… (NOW, Chile, parati.taconeras.net).
En las ciudades grandes de china a los chinos si que no les gustan que le suban el precio de la comida para eso tienen una dictadura comunista (NOW, Puerto Rico, el Vocero de Puerto Rico).
Estas transformaciones se materializan en dos rasgos superficiales: i) en la concordancia (plural) controlada por el experimentante dativo (1a-e) y ii) en la progresiva pérdida o erosión de la marca sintáctica de caso (1b, 1d). Estos rasgos se tomarán como índice del reanálisis del experimentante dativo como sujeto canónico de estas estructuras. Por lo que se refiere a su constitución sintáctica, el participante tema o estímulo de gustar, por su parte, puede aparecer en forma de sintagma nominal (1a-b), suboración de infinitivo (1c-d) o subordinada sustantiva (1e).
Las numerosas publicaciones aparecidas en estas dos primeras décadas del siglo XXI concentradas, desde distintas perspectivas, en torno a la configuración gramatical de los argumentos del verbo gustar (como, por citar las aparecidas a partir de 2000, Mendívil Giró 2002; Elvira 2006; Vázquez Rozas 2006; Vázquez Rozas y Rivas 2007; Brown 2016; Elizaincín y González 2016; Melis y Flores 2018; Bouzouita y Pato 2019) confirman el interés continuado que desde siempre ha suscitado la peculiar red temática de este predicado, pero son además síntoma indudable de las transformaciones por las que está atravesando. Las mencionadas monografías no han afrontado, sin embargo, el examen de los cambios que ahora nos ocupan.
El fenómeno no ha pasado inobservado, por el contrario, a los estudios psicolingüísticos sobre la adquisición del español en situaciones de contacto lingüístico (en particular, con el inglés; véase Silva-Corvalán 1994 y, recientemente, Montrul 2016; Pascual y Cabo y Gómez Soler 2017; Pascual y Cabo 2020). Estos estudios atribuyen la reestructuración sintáctica de los argumentos de gustar a los procesos de pérdida (o simplificación) lingüística prototípicos de la competencia idiomática de los inmigrantes de 1ª generación (o, en términos de Lipski 1993, bilingües transicionales), cuyo input provoca la adquisición incompleta e imperfecta en los hablantes más jóvenes de la segunda (hablantes de herencia o heritage speakers; se remite, para esta noción, al estado de la cuestión general presentado en Fairclough 2014).
El presente trabajo es de naturaleza exploratoria y se plantea, desde un punto de vista prevalentemente descriptivo, como objetivo principal la presentación y una primera caracterización de la codificación nominativa emergente del experimentante del predicado gustar. A partir de las muestras recabadas del Corpus del español (Davies 2015-2019) y, según la metodología expuesta en (§3), nos ocuparemos primeramente de la descripción gramatical del fenómeno (§4.1). En una segunda instancia, atenderemos al reparto geográfico de la nueva construcción en las variedades hispánicas actuales (§4.2) con el objetivo de orientar futuras investigaciones hacia el foco de difusión de las innovaciones y como fase metodológica previa que nos permita conjeturar las causas, vías de actualización y grado de extensión del reanálisis incipiente. Estudios posteriores deberán ampliar, por lo que se refiere a los datos, la base empírica y fenoménica y, en cuanto a los presupuestos teóricos, afinar las hipótesis, de modo que la sección final (§5) es más de carácter prospectivo que conclusivo.
La hipótesis que formulamos (§2), del todo provisional en esta fase de la investigación, concordará con los estudios adquisicionales en atribuir a una situación de contacto el factor desencadenante de las innovaciones, pero se disociará de esta línea investigativa al caracterizar como interdialectal la coexistencia de variantes lingüísticas de valoración social y concepcional diferente: la normativa (a ellos les gusta la movida) establecida sobre relaciones sintácticas configuracionales y la subestándar (ellos les gustan la movida) articulada de acuerdo con un “orden pragmático” (Briz 1998) tendente, al menos en ciertas áreas dialectales, a su “sintactización”.
2. Breve estado de la cuestión e hipótesis
Los enunciados de (1) reflejan una ordenación pragmática de las unidades discursivas que da preferencia al desarrollo informativo tópico-comentario sobre la configuración sintáctica de los constituyentes. Este “orden pragmático”, frente a una mayor integración sintáctica de los discursos de la “distancia comunicativa”, responde a tendencias universales de la lengua hablada (Koch y Oesterreicher [1990] 2007). De acuerdo con esta ordenación, el experimentante dativo operaría como pivote pragmático4 sobre el que se organiza el desarrollo de la información y la continuidad referencial en el discurso. Las características sintácticas de las innovaciones que estudiamos y la presencia, compacta y significativa, en algunos dialectos del español -por no hablar de la adquisición de la estructura innovadora por parte de las nuevas generaciones, tal y como testimonia su presencia no circunscrita a los heritage speakers- nos obligan a enfocar el fenómeno, no como el contraste entre un “orden pragmático” estereotípico del registro coloquial y un “orden sintáctico” propio de la variedad normativa, que ocupan espacios autónomos en el diasistema de una lengua, sino como un avance en la sintactización5 de las propiedades semánticas y referenciales del argumento experimentante del verbo gustar. Estas propiedades desencadenan, en un plano de organización lingüística caracterizado por factores informativos y paralelo al más integrado de carácter normativo, una nueva codificación sintáctica del experimentante más acorde con su comportamiento discursivo.
Los estudios previos acerca de la asignación de caso a los constituyentes del predicado gustar destacan, en efecto, la disociación entre las propiedades comportamentales (y semánticas) del argumento experimentante dativo (behavior properties) y las de codificación (coding properties) según la categorización establecida por Keenan (1976) para el conjunto de propiedades caracterizadoras de la función sintáctica sujeto (Mendívil Giró 2002: 2005-2006 y, por todos, Vázquez Rozas 2006). El comportamiento semántico y pragmático del experimentante dativo como sujeto se observa, como es de sobra conocido, en sus rasgos de animación (Melis y Flores 2013), sus efectos de raising (Bosque y Gutiérrez-Rexach 2009: 413-414), la nominalización de sus argumentos (Fernández Soriano 1999: 125) y su naturaleza temática (con la consiguiente preferencia por la anteposición, Elvira 2014 y los datos ofrecidos en Vázquez Rozas 2006: 97). Esta disociación ha llevado a considerar a los experimentantes dativos como sujetos caprichosos (Masullo 1992, Fernández Soriano 1999) o, en línea con Belletti y Rizzi (1987), idiosincrásicos (Bosque y Gutiérrez Rexach 2009: 413-414). En definitiva, el participante afectado por el predicado gustar se comporta como un sujeto, pero se codifica como un dativo.
Este conflicto entre las propiedades de comportamiento del experimentante y su codificación sintáctica motiva la hipótesis postulada por Mendívil Giró (2002: 2010) de incluir, basándose en la jerarquía de asignación de papeles temáticos de Dowty (1991), el español entre las lenguas con un patrón de ergatividad parcial. En la escala de asignación de marcas gramaticales, los roles de estímulo y experimentante se encuentran en una posición intermedia entre los polos de máxima (agente) y mínima (paciente) agentividad (por ejemplo, van Valin y LaPolla 1997: 126-128), de modo que la asignación de un papel temático como (más) agente (inglés John likes carrots) o como (más) paciente (esp. A Juan le gustan las zanahorias) queda de alguna manera indeterminada.
En las páginas que siguen, defenderemos que, dadas las circunstancias propicias, el experimentante del verbo gustar adquiere la marcación canónica del sujeto, por lo que su codificación sintáctica se equipara a su comportamiento semántico-referencial. La concordancia plural del verbo gustar, inducida por el sintagma experimentante y la desmotivación de la marca funcional a del dativo, señalan el arranque de esta transformación en (algunas variedades subestándares del) español contemporáneo. Estas modificaciones en la marcación superficial del experimentante del verbo gustar reafirmarían el patrón (sintáctico) nominativo-acusativo del español (frente a lo postulado en Mendívil Giró 2002). Si esta transformación hacia una marcación sintáctica más acorde con su comportamiento terminara consolidándose, el español se ajustaría a la deriva (drift) histórica recorrida hace quinientos años por el verbo lician (moderno like) en la transición del inglés medio al moderno (Melis 1998; Elvira 2011; Melis y Flores 2013, 2018).
Las circunstancias externas en que se desenvuelven las variedades hispánicas contemporáneas y que afloran en el “registro escrito coloquial” de las interacciones digitales (carencia o lejanía de modelos normativos, carácter oralizante) propician la reestructuración sintáctica de la red temática de gustar, de mal encaje tipológico en la lengua española. Esta armonización de las características comportamentales del dativo y su codificación sintáctica se lleva a cabo mediante el mecanismo de reanálisis (Mendívil Giró 2015) de un tópico en sujeto sintáctico. La reinterpretación de las estructuras profundas de las relaciones gramaticales se lleva a cabo en el oyente. El modelo cognitivo de gramaticalización por contacto propuesto por Matras (2011) concuerda con esta propiedad del reanálisis, en cuanto la reestructuración se produce durante el procesamiento por parte del oyente de los patrones lingüísticos de la otra lengua y se expandiría por transmisión generacional (no exclusiva, insistimos, del ámbito de la lengua de herencia). En nuestra propuesta se trataría de extender el contacto a dos variedades (sociodiscursivas) de una misma lengua (coloquial vs. normativa). Este contacto provocaría una estructura innovadora con las funciones comunicativas adecuadas al contexto de uso.
3. Corpus y metodología
El análisis realizado en el presente trabajo se basa en 547 ocurrencias del esquema <(Dativo) + {les ~ nos} + gustan + {Infinitivo ~ Oración ~ Sintagma Nominal (singular)}> extraídas de las versiones sincrónicas Web/Dialects y News on the Web (NOW) del Corpus del español (véase Davies 2015-2019). Las búsquedas se limitan a la forma flexiva de gustar en 3ª persona plural del presente de indicativo con un sujeto inductor de concordancia singular (sintagma nominal singular, infinitivo, oración subordinada). Se toma la concordancia plural como principal índice objetivo del proceso de reanálisis6. Los datos recopilados en el presente trabajo confirman internet como fuente para la obtención de fenómenos subestándar (De Benito y Estrada 2018), si bien el esquema se registra también en otros corpus de carácter oral7.
En las búsquedas hemos incluido el clítico nos. Este clítico retoma un sintagma precedente con referencia a un conjunto de individuos entre los que se incluye el hablante: creo que a los españoles nos gustan que las cosas hagan acto de presencia (España); a todos nos gustan que nos lleven el desayuno a la cama (Colombia). Aparece la forma gustan con el pronombre nosotros: A nosotros no nos gustan que nos marquen lo que tenemos que preguntar (Argentina). En estos casos, no documentamos la flexión gustamos cuando el verbo significa ‘agradar’8.
El número de ocurrencias constituye una base empírica consistente -cuando menos-para atraer la atención hacia el reanálisis del experimentante dativo como sujeto canónico de gustar y esbozar una primera distribución dialectal. El Corpus del Español permite, con las consabidas precauciones, adscribir, por medio de herramientas automáticas (https://www.corpusdelespanol.org/web-dial), las muestras a un determinado país a través del dominio de las páginas web de donde se extraen. Esta adscripción no es precisa, pero puede bastar para orientarnos hacia los territorios de mayor predominio de la construcción subestándar. Hemos agrupado los países en ocho macroáreas dialectales (RAE 2017: 7-8). El volumen total de palabras de cada una de ellas se obtiene sumando los totales parciales de los países que las componen, según la información disponible en la descripción del subcorpus WEB/Dialects. En la Tabla 1 se exponen la división dialectal y el número de palabras de cada macrorregión9. La Tabla 2 muestra el reparto de las frecuencias absolutas y normalizadas, tomando como punto de referencia el volumen textual del subcorpus dialectal. Estos datos evidencian que se trata de un fenómeno extendido por todas las diatopías del español, tanto europeas como americanas.
El fenómeno de la no marcación canónica del experimentante de los verbos de afección se manifiesta con solidez en el predicado prototípico gustar (1), pero se halla igualmente con otros de la misma subclase como encantar (2), agradar (3) y doler (4)10.
(2)
Debemos hablar con personas que tienen éxito en un Negocio Multinivel, a ellos les encantan compartir su historia (Web/Dialects, Colombia, marthacaballero.com).
Y muchos cubanos mas les encantan vivir como las Babosas arrastrándo se por el Piso (Web/Dialects, EE.UU, jovencuba.com).
Que pena decir lo pero a ustedes les encantan que les mientan... les encanta que les digan lo que quieren que (Web/Dialects, México, tiaxime.com).
No será la chica indefensa sino la chica mala y vengativa. A ellas les encantan este juego de roles (Web/Dialects, México, seduccionypersuasion.com)
(3)
Publican el comentario o siguen sin ser transparentes y solo ponen las opiniones que les agradan leer haciendo creer que solo hay una opinion (Web/Dialects, Nicaragua, confidencial.com.ni).
Las niñas no les agradan los deportes y sobre todo el fútbol (Web/Dialects, España, revistacomunicar.com).
(4)
“Les duelen los CLAP, les duelen que el pueblo tenga su alimentación”, subrayó (NOW, Venezuela, informe21.com).
Todos sabemos fue obra de el imperio y de aquellos que les duelen una Cuba libre, pero ellos, fueron hechos de acero como los antiguos héroes (NOW, Cuba, CubaDebate).
Como índices materiales del reanálisis, junto con la concordancia plural, consideramos la (no) marcación casual del experimentante por medio de la preposición prototípica de dativo [± a]. Analizamos como casos de marcación canónica del dativo experimentante la presencia de a para introducir el sintagma nominal (5a-b), la ausencia de complemento léxico (5c), los sintagmas introducidos por para (5d)11 o la anteposición de complementos locativos (5e). La no marcación se ejemplifica en (5f-h).
(5)
A los niños tímidos no les gustan ir a fiestas infantiles, tienen dificultad para hacer amiguitos, no exponen en clase (Web/Dialects, México, cosasdelainfancia.com).
Le proporciones una buena cantidad de luz, debido a que a estos animalitos les gustan la luz (Web/Dialects, Cuba, acuariovida.mexico-foro.com).
Muchas veces, no pueden trabajar cuando sean grandes. No les gustan levantarse b. Pueden hacer dos cosas, jugar? (Web/Dialects, México, creced.com).
No te preocupes por las escalas, porque por lo que leí en mi agencia les gustan hacernos sufrir con esos transbordos para ahorrarse un dinerete (Web/Dialects, EE.UU, aupairmmora.blogspot.com).
Para los que les gustan algún producto especial... mmm se me ocurren tantas ideas en mi caso (CE: Web/Dialects, España, homepersonalshopper.com).
Las niñas les gustan imitar a sus mamás maquillándose desde muy pequeñas, jugando con sus amigas… (Web/Dialects, México, mundo52.com).
También pasa lo mismo con las lesbianas: Hay quienes les gustan ser machas, pero no le gusta otra macha (Web/Dialects, EE.UU, ateismoparacristianos.blogspot.com)
Te recomiendo que lo leas. Las personas que no les gustan leer usualmente tienen problemas de entendimiento (Web/Dialects, México, lasprofecias.com).
4. Análisis de los datos
4.1. Contextos sintácticos de la marcación no canónica del experimentante de gustar
Las transformaciones conducentes al reanálisis del experimentante como sujeto sintáctico superficial de las oraciones con gustar se manifiestan en las variedades subestándares del español del siglo XXI a través de dos componentes: i) la concordancia plural entre el dativo y el verbo (a ellos les gustan la movida)12 y ii) la desaparición del marcador de caso a (ellos les gustan la movida). El primero de ellos sería catalogable dentro de los fenómenos de “externalización de la pluralidad”, propios de la diastratía coloquial y ampliamente documentados en todas las variedades del español como, entre muchos otros, los siguientes: el empleo de se los por se lo (Eso pasó como se los digo a ustedes, Rivarola 1985, DeMello 1992), los plurales anómalos en las formas no finitas del verbo (abrigarsen, metiéndosen, Heap y Pato 2012), la pluralización de haber impersonal (En mi epoca habian unos veinticinco, treinta alumnos por aula, Claes 2016, Pato 2016), la concordancia semántica con sustantivos colectivos como gente (Al final, cuando terminaron el baile, aquella gente vinieron pa casa, Sedano y Bentivoglio 1996) o la concordancia inducida por un sustantivo plural en el cuantificador cadas (cadas cosas se leen, Pato 2019). La concordancia plural de gustar inducida por el experimentante es susceptible de analizarse como una manifestación más de estas pluralizaciones anómalas, como lo prueba su documentación en todas las variedades de español, por lo que cabría observarla como la fase inicial o estadio 0 del reanálisis.
La desaparición de la marca funcional del dativo (preposición a) produce, en cambio, una reestructuración más profunda. Esta pérdida de la marca de caso se ha asociado, en los estudios acerca del español como lengua de herencia, con la baja prominencia o relevancia estructural (salience)13 de la preposición a en nuestra lengua, lo que convierte al marcador en un elemento especialmente vulnerable y proclive al desgaste (attrition) en un contexto de adquisición incompleta (Montrul 2016). Este debilitamiento de a como índice funcional se uniría a la serie de cambios que afectan a la categoría dativo del español (Company Company 2006), pero debería correlacionarse con las construcciones de tema vinculante (Zubizarreta 1999) que, acordes con las propiedades referenciales del experimentante14 de estos predicados, dejarían sin marcas gramaticales el complemento verbal: (en cuanto a) las mujeres les gustan que las mimen; (en cuanto a) otras personas no les gustan sacarse fotografías. Esta articulación informativa tópico-comentario, estereotípica del discurso coloquial concebido oralmente y planificado sobre la marcha (Koch y Oesterreicher [1990] 2007) proporcionaría el punto de arranque del reanálisis de un tópico pragmático como sujeto sintáctico. Las propiedades pragmático-discursivas del experimentante y su preferencia por la anteposición, junto con la baja perceptibilidad de su introductor funcional (a), concurrirían en la remodelización del experimentante como sujeto canónico15.
En el corpus analizado gustar arroja un número de ocurrencias suficientes para establecer los entornos sintácticos impulsores, en los enunciados con concordancia plural, de la no marcación del dativo16. Los datos de la Tabla 3 resultan estadísticamente significativos (X 2 = 7,7435, p = .020822, p < .05) y se proyectan en la Figura 1 para poner de relieve la categoría gramatical del sujeto sintáctico de gustar favorecedora de la codificación no canónica del sintagma experimentante.
Aunque las diferencias proporcionales no autorizan a extraer conclusiones definitivas, los datos sí apuntan a las suboraciones de infinitivo y a los sintagmas nominales como las categorías gramaticales del sujeto de gustar promotoras, por encima de las oraciones subordinadas, de la no marcación del caso dativo. Estos resultados (provisionales) se corresponden con las propiedades de control del dativo en cuanto sujeto profundo de la subclase de verbos psicológicos representada por gustar, tal y como ha puesto de manifiesto el estado de la cuestión (véanse, entre otros, Mendívil Giró 2002: 2005; Vázquez Rozas 2006: 87; Bosque y Gutiérrez-Rexach 2009: 413; RAE/ASALE 2009: §35.5ñ): ): A Luci i le gustaba Ronny j antes de Ø i/*j conocer a Otto, a María i le gusta Ø i conducir de noche, a Lulú i le gusta Ø i nadar en el mar. Este comportamiento acerca el experimentante de gustar con caso dativo al de los verbos del tipo de amar y temer en nominativo17. Los entornos sintácticos en los que el experimentante controla la referencia del sujeto nulo del infinitivo pondrían en marcha la nueva codificación de este argumento como sujeto superficial de gustar. En esquema: [a ellos i [les gusta Ø i jugar]] > [[a ellos i les gustan] Ø i jugar] > [[ellos i les gustan] Ø i jugar].
En la reconfiguración sintáctica del experimentante de gustar es factible que los verbos psicológicos con sujetos canónicos como amar o temer (Bosque y Gutiérrez-Rexach 2009: 412) actúen como modelo analógico subyacente. Las alternancias temáticas propias de (algunos de) los predicados de esta clase verbal (me admira tu valor ∼ admiro tu valor; RAE/ASALE 2009: §35.5ñ) no harían más que reforzar la construcción alternativa directa de gustar18. La existencia de estas construcciones alternantes posibles para otros verbos de afección psíquica promueve la codificación no canónica del experimentante de gustar o, al menos, contribuye a su expansión como rutina sintáctica.
4.2. Distribución geográfica de la marcación no canónica del experimentante de gustar
La batería de ejemplos de (6-13), ordenados de este a oeste y de norte a sur, hace patente la extensión geográfica de la nueva codificación sintáctica del experimentante del verbo gustar, por lo que refiere a su fisonomía no canónica y a los contextos sintácticos de aparición. En (6) se recogen algunos casos identificados en los dominios digitales de España y en (7) se ofrecen muestras del español en los EE.UU. Los ejemplos de (8) documentan la estructura en México y Centroamérica. En (9) y (10) se recogen casos localizados en el área caribeña, respectivamente, antillana y continental. La serie de (11) corresponde a las muestras representativas del área andina y (12) chilena. Los últimos ejemplos, en (13), registran la presencia de estas construcciones en los países del Río de la Plata. Estos fragmentos quieren reflejar la extensión y el carácter multiforme del fenómeno en cada una de las macroáreas.
(6)
… españoles k nda mas le dan a la juerga o no quieren o no les gustan trabajar en el campo, y cuantos latinos, africanos etcc han dao alegria a… (Web/Dialects, España, fuerteventuralimpia.blogspot.com).
… igual que en el mercado cuando vamos a comprar de forma independiente, nos gustan que nos mimen, señala Eladio Rueda (NOW, España, Sur Digital (Andalucía)).
Para aquellos que verdaderamente se preocupan por la gente, y a esos que les gustan la buena vida (a mi tambien, pero no es posible llevar el ritmo… (NOW, España, Diario de León).
(7)
Desde niño tuve un carácter muy curioso, de niño era de los que les gustan desarmar los juguetes para saber como funcionan, lo mismo me fue con la biblia (Web/Dialects, EE.UU, ateismoparacristianos.blogspot.com).
¿Porque a las nutrias les gustan dormir agarradas de la mano? (Web/Dialects, EE.UU, interoxio.com).
Pero es un doble discurso ya que mientras a los famosos no les gustan que los retraten en fachas (como a cualquier persona normal) provocan las fotografías (Web/Dialects, EE.UU, cronicasprofanas.blogspot.com).
(8)
… me publiquen mi humbled comentario torque al parecer a estos de diez no les gustan ser criticados (Web/Dialects, Honduras, comunidad.diez.hn)
Todos sabemos que a las chicas les gustan que las escuchen y sobretodo, que las entiendan, existen muchas (Web/Dialects, México, elmundodesexoyseduccion16.com).
Dejen de llorar, si no les gustan este nuevo medicamento cubano, no lo compren, haganle mas grande la cuenta bancar (NOW, El Salvador, Diario La Página El Salvador).
(9)
Sobre todo en época de verano. Momento en que los cubanos les gustan disfrutar de las vacaciones (NOW, Cuba, Radio Rebelde)
El modelo 308 es una elección perfecta para los amantes del sol y les gustan la brisa del aire en su pelo… (Web/Dialects, Cuba, blog.cubarentacarros.com).
sino que las mujeres nos prefieren de esta manera y que a todas les gustan que seamos así... (Web/Dialects, Colombia, axlp.wordpress.com).
En las ciudades grandes de china a los chinos si que no les gustan que le suban el precio de la comida para eso tienen una dictadura comunista (NOW, Puerto Rico, el Vocero de Puerto Rico).
(10)
¿Por qué a estos tipos les gustan que las tipas se vuelvan tan monitas?, ¿ será una forma inconsciente de… (Web/Dialects, Venezuela, elenaenvacaciones.com).
A pesar de que algunos usuarios no les gustan el comportamiento de este personaje, el video tiene más de tres millones de reproducciones (NOW, Venezuela, 2001.com.ve).
O.... a los ALUMNOS simplemente no les gustan leer, ps claro si no leian antes libros tan simples como matilda pero van… (Web/Dialects, Colombia, mundomagico.obolog.com).
Me han dicho q se botan piedras y se tiran botellas si no les gustan la movida, en Madrid no suele pasar eso, pero tampoco les veo mucha (Web/Dialects, Colombia, zona57.com).
(11)
Ya parecemos a los guasmeños de barceasesinas (barcenacho) que tambien solo les gustan traer jugadores de emelec.... (Web/Dialects, Ecuador, liguistas.com).
Entre algunos que no les gustan que les llamen señor y otros que les encantan que les digan licenciado (NOW, Bolivia, eju.tv).
Los amantes de los autos clásicos y los que les gustan la moda les debe interesar este reloj de bolsillo (NOW, Perú, El Comercio).
(12)
… la buena conversación... tenemos casa y auto en Renca, pero nos gustan andar viajando, finalizó Janis (NOW, Chile, La Discusión).
Hay plantas que no les gustan que sus hojas se mojen, por ejemplo los tomates. En general recomiendo… (Web/Dialects, Chile, enmicocinahoy.cl).
Sin perjuicio de que nosotros vamos a conversar con todos aquellos a quienes no les gustan el actual modelo neoliberal y sienten que debe haber un cambio en nuestro país (NOW, Chile, Diario y Radio Uchile).
(13)
Para todas aquellas mujeres que les gustan lucir distintos tipos de bisutería, el emprendimiento Cynderella (NOW, Paraguay, 5dias.com.py)
Reitero: hay que borrar a los que no les gustan que los comenten (Web/Dialects, Uruguay, saliracomer.com).
Si los gobiernos han sido elegidos por nosotros, y si no nos gustan este gobierno, entonces por qué lo elegimos (NOW, Argentina, iprofesional.com).
La Tabla 4 evidencia la expansión de la concordancia plural de gustar controlada por el experimentante en todas las variedades regionales (diastráticamente subestándar) del español contemporáneo y, asimismo, destaca que la marcación canónica por medio de a representa en todas ellas la opción mayoritaria, de suerte que la concordancia plural, generalizada geográficamente (estadio 0), colocaría las bases para el estadio sucesivo vinculado a la ausencia de marcado sintáctico del dativo. La no marcación, si bien atestiguada en todas las regiones del español, es menos frecuente y su presencia puede tomarse como índice para diagnosticar el mayor avance del reanálisis. La confrontación de los datos presentados ahora con los expuestos en la Tabla 2 demuestra que la pluralización de gustar constituye solamente la parte superficial y más evidente de una transformación más profunda en la reconfiguración sintáctica de la red temática de este predicado y obliga a buscar otros síntomas (por ej. la ausencia de a) a la hora de indagar en el cambio19.
La Figura 2, elaborado a partir de los datos de la tabla anterior, confronta la proporción de ocurrencias de no marcado del dativo en el entorno sintáctico gustar + <infinitivo> frente la no marcación global. La remoción del dativo en las construcciones con infinitivo indicaría una fase más adelantada en la reestructuración gramatical del verbo gustar. El gráfico muestra el avance de la no marcación en las variedades chilenas, caribeñas (en particular, continentales) y centroamericanas, mientras que el dialecto europeo y la modalidad del español hablado en Estados Unidos, si bien arrojan porcentajes de no marcación en el entorno sintáctico de referencia superiores a los totales, exhiben en menor grado la pérdida de la marca casual. Las variedades andinas y australes delinean un escenario opuesto, pues los porcentajes totales de no marcación casual superan a los de la secuencia gustar + <infinitivo>, lo que indicaría bien una no significatividad de los datos o bien la influencia de otro tipo de factores sintácticos en estos dialectos. En cualquier caso, el fenómeno examinado parece estar menos extendido en España, Estados Unidos y, de modo especial, en los países del Río de la Plata.
Por más que el análisis apenas comentado deba considerarse con precaución20, la cuantificación de los resultados hace posible dos consideraciones. La primera, de índole afirmativa, apunta hacia el foco originario de creación y difusión de la estructura innovadora. Este foco debe situarse -dejando ahora de lado la probable distorsión provocada por los escasos datos de Chile- en las variedades centroamericanas y caribeñas (de manera particular, las continentales). Esta conclusión viene certificada por el mayor número de casos y por su significatividad. La circunscripción del foco originario en México y los países centroamericanos resulta coherente, no solo con el carácter innovador tradicionalmente atribuido a estas variedades, sino además con el avance de procesos transitivizadores en esta región (Sanz y Melis 2019). Sin embargo, no puede descartarse la importancia de los dialectos antillanos -igualmente innovadores- en el desarrollo de este fenómeno, como prueba su cercanía con el Caribe continental. Ambas variedades, la mexicana y la caribeña (antillana), tienen una influencia determinante en la fisonomía del español de los Estados Unidos, por el mayor contingente poblacional de hablantes de estas modalidades y por su peso sociocultural en el país norteamericano. Así las cosas, puede no ser casual que dos de los primeros estudios, de corte adquisicional, en llamar la atención sobre este fenómeno tengan como informantes hablantes mexicanos y cubanos (Montrul 2016 y Pascual y Cabo 2018).
La segunda consideración, esta vez de carácter negativo, deducible de los datos observados se refiere a la necesidad de desviar el origen del reanálisis y sus causas primeras, sin negar su intervención potencial como acelerador del proceso, del escenario de adquisición del español como lengua de herencia en Estados Unidos. Las dificultades en la adquisición de la compleja red temática de gustar no se detienen en la fase de interlengua de los heritage speakers o de los -“in essence native speakers of Spanish”- bilingües transicionales (Lipski 1993, 2008) 21. Estas dificultades se ven intensificadas en los contextos de contacto lingüístico (no necesariamente restringido al inglés)22, de bilingüismo asimétrico23 y, en particular, de carencia de modelos normativos24 favorecedores de una sintaxis integrada. Estos condicionamientos, exacerbados en los procesos de adquisición incompleta del español, no están limitados a los Estados Unidos y pueden hacerse extensivos a otros escenarios sociodialectales del mundo hispánico.
5. Final
En las páginas anteriores, hemos planteado más interrogantes de los que hemos podido responder de manera definitiva. Sin embargo, la consideración de enunciados reales del verbo gustar con estructura no canónica del experimentante nos ha permitido (re)definir las vías de actualización del reanálisis respecto a las conclusiones de los estudios psicolingüísticos sobre la adquisición del español en contextos de lengua de herencia. Estos trabajos, cuyo mérito consiste en haber llamado la atención sobre estas transformaciones, rascan solo la superficie del mecanismo de reanálisis de la red temática de gustar. Los componentes de este reanálisis (concordancia, ausencia de marca funcional) están extendidos por todos los dialectos del español contemporáneo y no se limitan a la adquisición incompleta de la lengua por parte de los heritage speakers, por lo que cabe postular, como factores desencadenantes del cambio, la complejidad estructural de gustar y las propiedades semántico-referenciales de su experimentante, que afloran en las interacciones coloquiales escritas de internet favorecedoras de una ordenación pragmática del discurso. Los datos apuntan a los contextos sintácticos en los que el experimentante ejerce su capacidad de control, en especial las suboraciones de infinitivo, como punto inicial del reanálisis. Desde un punto de vista geográfico, la preponderancia y significatividad de los datos en zonas como México y Centroamérica y en las regiones caribeñas (en particular, continentales) señalan estas como foco geográfico de las innovaciones.
Se requieren futuros trabajos para confirmar la validez de la hipótesis esbozada aquí, la comprobación o rechazo de las vías de actualización de reanálisis propuestas y la fijación definitiva del foco geográfico de difusión. Para ello, será necesario extender las búsquedas en otros corpus de lengua oral o coloquial escrita (por ej., Twitter) y ampliar el abanico fenoménico a otros verbos de la misma subclase (nuestra exploración superficial limitada a agradar, encantar o doler deja esperar que la búsqueda dé buenos frutos). Por el momento, consideramos cumplidos los objetivos principales de los propuestos inicialmente: una primera caracterización de la configuración sintáctica no canónica de la estructura argumental de gustar y una llamada de atención acerca de su extensión geográfica en las variedades del español del siglo XXI.