Sr. Editor,
La Oficina de las Naciones Unidas Contra la Droga y el Delito (UNODC) define al homicidio como "la muerte ilícita y voluntaria que una persona provoca en otra". Durante el 2017 el promedio mundial de homicidios fue de 6,1 por cada 100 mil habitantes 1. En Latinoamérica, específicamente en Colombia, la tasa estandarizada de mortalidad por homicidios en 2011 fue de 36,1 por 100 mil habitantes 2. Por su parte, en México, la tasa de homicidio durante el 2009 fue de 16,6 por 100 mil habitantes 3. En Perú, durante el 2018 los hechos delictivos dolosos registrados fueron 7,6 por 100 mil habitantes 4.
En la región Lambayeque se desconoce la frecuencia, la tipificación y las características socio-demográficas de los homicidios, lo cual deja una brecha que se requiere abordar para emprender estrategias de mejora. Por este motivo, el presente estudio tuvo como objetivo describir la frecuencia y características de los homicidios en la región Lambayeque, Perú, año 2017.
El estudio fue observacional, descriptivo, transversal y retrospectivo. Los datos fueron obtenidos de la página web de la sección del Registro Nacional de Denuncias de Delitos y Faltas de la región Lambayeque generada por el Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). La población de estudio estuvo conformada por 94 casos de homicidios registrados en la base de datos, de los cuales fueron excluidos 20 registros por duplicidad de datos. No fueron considerados homicidios cometidos en guerra y/o conflictos y eutanasia. El análisis se realizó mediante frecuencias absolutas y relativas en las variables categorías y por medidas de tendencia central y dispersión en las numéricas. El cálculo de la tasa de homicidio fue en referencia a la población general de la región Lambayeque (1 280 788 habitantes) según censo del INEI, 2017. Este estudio fue aprobado por el Comité de Ética en Investigación de la Universidad San Martín de Porres. Los datos personales de los participantes no fueron mencionados ni usados.
La tasa de homicidios fue 5,78 por cada 100 000 habitantes. La mediana de edad de las víctimas fue de 32 años (percentil 1 = 20, percentil 3 = 51). Con relación al delito específico, el homicidio doloso predominó con 74,3%, seguido del aborto y homicidio culposo con 17,6% y 8,1%, respectivamente. Según la modalidad del delito destaca el homicidio calificado-asesinato (54,5%) y el accidente de tránsito (33,3%) (Tabla 1).
El 47,3% fueron varones, las ocupaciones más afectadas fueron agricultor u obrero (6,8%), ama de casa 5,4) y conductor (5,4%). El 90,5% de las víctimas eran procedentes de la provincia de Chiclayo. Las causas de homicidio fueron: golpes traumáticos (20,3%), violencia familiar (12,2%), delincuencia (8,1%). Según el lugar de los hechos, el 29,7% ocurrió en la vivienda de la víctima y 21,6% en la vía pública. Los medios homicidas más utilizados fueron: arma de fuego (20,3%), agresión física (17,6%) y arma blanca (16,2%). En cuanto, a la relación homicida-víctima el 17,6% de los homicidios fueron cometidos por personas desconocidas a la víctima y el 50% no precisa nexo alguno (Tabla 2).
La frecuencia de homicidios observada en la región Lambayeque durante el 2017 estuvo dentro del promedio a nivel mundial, donde la tasa de homicidios fue de 5,8; pero fue inferior a lo reportado en Colombia (25 por cada 100 mil habitantes) 5. Dentro del Perú, en 2017 el departamento de Madre de Dios presentó la tasa más alta de homicidios con 35 víctimas por cada 100 mil habitantes 4.
Durante el 2017 en Lambayeque, la tasa anual de abortos fue de 3,19 por cada 100 mil mujeres en edad fértil (población de mujeres en edad fértil en Lambayeque: 409 064); sin embargo, esta estimación representa, únicamente, los casos registrados en fuentes policiales. Según, Bearak et al. entre 2015 y 2019 se suscitaron en promedio 73,3 millones de abortos cada año, correspondiendo a una tasa anual global de 39 abortos por cada 1000 mujeres de 15 a 49 años. En América Latina anualmente se producen, en promedio 32 abortos por cada 1000 mujeres 6.
El homicidio calificado-asesinato y homicidio simple fueron las modalidades más frecuentes. Según, Vargas 7, la cantidad de homicidios dolosos pueden ser explicados por las operaciones y disputas del crimen organizado, traduciéndose en una mayor participación de los jóvenes dentro de las estructuras criminales. Asimismo, observamos que la mediana de edad de las víctimas fue de 32 años, hallazgos concordantes con lo reportado por el boletín epidemiológico de Buenos Aires que describe mayor incidencia entre los 15 a 34 años 8. De igual modo, los varones fueron los más afectados por el homicidio, este evento es semejante a lo publicado por Tavares et al. 9) en Brasil, donde el 91,9% de las víctimas fueron varones.
Por otro lado, los golpes traumáticos y la violencia familiar fueron las causas más frecuentes de muerte violenta en la población de estudio, estos hallazgos concuerdan con el alto porcentaje de violencia familiar, pues, se estima que en Perú el 65,4% de las mujeres alguna vez fueron víctimas de violencia doméstica 4. Asimismo, la mayoría de los homicidios ocurrieron en la vivienda de la víctima, evento discordante con un estudio en Brasil, donde la mayoría de los homicidios ocurren en la vía pública 9. En este estudio el medio homicida más utilizado fue el arma de fuego, lo que podría indicar la relación con actos de delincuencia común. Al respecto, un estudio en México también reportó que el 63% de varones asesinados fueron por arma de fuego y el 15% por arma blanca y punzo-cortantes 10.
Las principales limitaciones del estudio están relacionadas con el registro incompleto e impreciso de la base de datos, la confiabilidad y calidad de los datos contenidos en la base, y la pequeña población de estudio. A pesar de las limitaciones, podemos concluir que existe una frecuencia media de homicidios en la región Lambayeque, con predominio del tipo doloso. Según, la modalidad del delito el homicidio calificado-asesinato fue el más frecuente. La mayor frecuencia de homicidios se observó en varones y en la provincia de Chiclayo. La causa más común de muerte fueron golpes traumáticos, la mayoría ocurrió en la vivienda de la víctima y el medio homicida más empleado fue el arma de fuego.