INTRODUCCIÓN
En los sistemas de producción porcina, los altos costos de las materias primas ricas en contenidos proteicos y energéticos utilizadas en la elaboración de los alimentos balanceados hacen poco rentable la producción para los pequeños y medianos productores (Ramírez, 2017). Con la finalidad de minimizar los costos de producción en la alimentación de los cerdos, los alimentos alternativos de origen vegetal resultan ser una opción más rentable de alimentación para cerdos, tal es el caso del cultivo desacha inchi (Plukenetia volubilis L), también conocido como maní del monte o maní del inca.
Sacha inchi (Plukenetia volubilis L) es una planta originaria de la Amazonia peruana, conocida por los nativos desde hace miles de años (Flores, 2010). Actualmente, este cultivo se está difundiendo en la Amazonia ecuatoriana, asumiendo un papel importante de producción para la exportación con usos en la producción de cosméticos, nutracéuticos y medicina (Agroindustria Ecuador G2, 2020). Sin embargo, no toda la semilla se utiliza para la exportación, ya que no cumplen con los estándares establecidos para su comercialización, de allí que el rechazo de semilla podría constituirse como una alternativa para la alimentación animal.
La semilla del sacha inchi comparado con fuentes oleaginosas como soya, maní, algodón y girasol, posee componentes importantes como antioxidantes, vitamina A y alfatocoferol-vitamina E (Romero et al., 2019). Más del 60 % de la almendra desgrasada es proteína de alta calidad (99% digestible), rica en aminoácidos esenciales y no esenciales (Zuloeta, 2014), además de un alto contenido de ácidos grasos insaturados (ácido linolénico, linoleico y oleico, conocidos como omega 3, 6 y 9). Según el estudio de Chirinos et al. (2013) de la semilla de 16 variedades de sacha inchi, este insumo puede ser considerado como una importante fuente dietaría de promotores fitoquímicos saludables. Por otra parte, Arias (2015) y Henao y Barreto (2016) manifiestan que estas propiedades convierten a las semillas en un producto de alta calidad para la alimentación animal, que podría ser aprovechada en la alimentación de los cerdos.
No obstante, el valor nutritivo de un alimento debe ser evaluado a través de su coeficiente de digestibilidad; es decir, de la proporción del alimento absorbido y convertido en sustancias útiles para la nutrición. El coeficiente de digestibilidad está íntimamente relacionado con el valor nutritivo de los alimentos (Ly et al., 2013). Así, el objetivo de este estudio fue determinar la digestibilidad fecal aparente de la harina de semillas de sacha inchi (Plukenetia volubilis L) en cerdos criollos en crecimiento.
MATERIALES Y MÉTODOS
Ubicación
El estudio se realizó en el Laboratorio de Química de la Universidad Estatal Amazónica y en las instalaciones del Centro de Investigación Posgrado y Conservación Amazónica (CIPCA), ubicados en los cantones Pastaza y Arosemena Tola, provincias de Pastaza y Napo, Ecuador, respectivamente. El lugar de estudio posee un clima semicálido o subtropical húmedo, con precipitaciones que fluctúan entre 4000 y 4500 mm anuales, altitud de 500 a 900 msnm, y temperaturas entre 20 y 32 ºC (INAMHI, 2014).
Harina de Sacha Inchi
La semilla fue adquirida en el centro de acopio Huamboya. Las semillas fueron seleccionadas en el CIPCA, donde pasaron por un proceso de pre-secado durante tres días al sol. Luego, fueron colocadas en una secadora de tambor por 2 h a 65 ºC, se dejaron enfriar por 1 h, y finalmente fueron molidas en un molino semiindustrial TRAPS TRF 300G), con malla de 0.25 mm. La harina fue empacada en fundas herméticas y almacenada por 5 días hasta su uso.
Composición Proximal de las Dietas
Las dietas fueron formuladas tomando en consideración las recomendaciones de FEDNA (2013) (Cuadro 1). Se tomó una muestra de 1 kg de cada dieta para su análisis en el laboratorio del Instituto Nacional de Investigaciones Agropecuarias (INIAP), Santa Catalina, Quito, Ecuador. Se determinó materia seca (MS), proteína bruta (PB), fibra bruta (FB), grasa, extracto libre de nitrógeno (ELN), energía bruta (EB), calcio y fósforo, según los procedimientos descritos por la AOAC (2005).
Cuadro 1 Composición y aporte de las dietas experimentales (% Base seca)

1 Ingredientes: pasta de soya; coproductos de arroz, trigo, DGGs de maíz, coproductos de trigo, aceite de palma, coproductos de panadería, melaza de caña, carbonato de calcio, cloruro de sodio, L-Lisina 78%, fosfato dicálcico, ácido propiónico al 50%, aluminosilicato de sodio, DL-Metionina 99% y L-Treonina 98%. Aporte de nutrientes: proteína 34%, grasa 4%, fibra 5%, ceniza 7%, humedad 13%, lisina 0.92% y metionina 0.27%
2 Premezcla de vitaminas y minerales para cerdos en crecimiento (Vit A 2 300 ,00 UI, Vit D3 466 667 UI, Vit E 5000 UI, Vit K3 667 mg, Vit B1 333 mg, Vit B2 1000 mg, Vit B6 400 mg, Vit B12 4000 μg, ácido fólico 67 mg, niacina 6660 mg, ac. pantoténico 4000 mg, biotina 17 mg, colina 43 g, hierro 26 667 mg, cobre 41 667 mg, cobalto 183 mg, manganeso 16 667 mg, zinc 26 667 mg, selenio 67 mg, yodo 267 mg, antioxidante 27 g, vehículo qsp 1000 g)
Animales y Alimento
Se utilizaron dos cerdos criollos, machos castrados en crecimiento, con peso vivo de- 50 ± 2 kg. Los animales se ubicaron en jaulas metabólicas individuales de 1.0x0.40 m (0.40 m2), que incluyen un comedero tipo tolva y un bebedero de chupón. Se ajustó el consumo de alimento a razón de 0.10 kg (kg/MS) PV0.75 d-1. La mitad del alimento se ofertó en la mañana (08:00) y la otra mitad en la tarde (15:00). El agua de bebida estuvo disponible a voluntad.
Cada periodo de investigación estuvo constituido por 10 días, cinco de adaptación a la dieta y cinco de colecta total de heces, según el método descrito por Bauza et al. (2016). Las muestras diarias fueron guardadas en un congelador a -20 oC hasta terminar la colecta de cada periodo. Al término de cada periodo se hizo un pool de cada tratamiento y se tomó una muestra de 200 g para la determinación de MS, PB, FB, grasa, ELN, EB, Ca y P.
Coeficientes de Digestibilidad Aparente
Los coeficientes de digestibilidad fecal aparente (CDFA) de los nutrientes de las dietas utilizadas se calcularon según la siguiente fórmula: CDFA (%) = ([Nutriente ingerido Nutriente excretado] /Nutriente ingerido) * 100.
Diseño Experimental
Se utilizó un diseño experimental cuadrado latino 2x2, con la finalidad de evaluar el aprovechamiento de los nutrientes de la harina de semillas de sacha inchi en el nivel de inclusión de 0 y 15 % en cerdos criollos de crecimiento. El diseño se representa por el siguiente modelo matemático:
Y(ijk) = µ + a(i) + ß(j) + ð(k) + e(k) i = 1, 2, ... , t ; j = 1, 2, ... , t ; k = 1, 2, ... , t
donde Y(k) = Medición sobre la unidad experimental situada en la i-ésima fila y en la jésima columna, sometida al k-ésimo tratamiento (15% de inclusión de la harina de semilla de sacha inchi y un grupo control), µ = Constante común a todas las observaciones, a(i) = efecto correspondiente a la i-ésima fila, (periodo de tiempo) ß(j) = efecto correspondiente a la j-ésima columna, (los animales) ð (k) = efecto correspondiente al k-ésimo tratamiento, e(k) = error residual, aleatorio, normal e independientemente distribuido, con media cero y varianza s².
El procesamiento estadístico de los datos se realizó con el paquete estadístico SPSS v. 22. Los datos de la digestibilidad de la MS, PB, FB, grasa, ELN, EB, Ca y P se analizaron mediante el análisis de varianza (ANOVA) con un modelo de clasificación simple, donde se controló el efecto de la dieta con el nivel de inclusión de harina de la semilla de sacha inchi al 15% y el grupo control. Para la diferencia entre medias se utilizó la prueba Fisher con p<0.05.
RESULTADOS
En el Cuadro 2 se muestran los coeficientes de digestibilidad aparente de los nutrientes en las dos dietas de cerdos criollos en crecimiento. Se observaron mejores coeficientes de digestibilidad en la MS y P (p<0.05) en la dieta que no incluyó la harina de semillas de sacha inchi, mientras que los coeficientes de digestibilidad de PB, FB, grasa, ELN y Ca no presentaron diferencias significativas entre tratamientos.
DISCUSIÓN
Se observaron diferencias significativas para los coeficientes de digestibilidad aparente de la MS y P a favor del grupo control en comparación con la dieta que incluyó 15% de harina de semillas de sacha inchi. El coeficiente de digestibilidad de la MS de la dieta experimental fue superior al obtenido por Ly et al. (2013) en cerdos criollos alimentados con palmiche (Roystonea regia), posiblemente debido al proceso de secado y molido que recibieron las semillas antes de la elaboración de la harina (Caicedo et al., 2018).
El coeficiente de digestibilidad del fósforo en la dieta con 15% de harina de sacha inchi presentó menor valor que en la dieta control. En este sentido, Phiny et al. (2003) y Castaño et al. (2012) manifiestan que el aprovechamiento del fósforo está influenciado por los contenidos de fósforo fítico y calcio de la materia prima. Al respecto, Gutiérrez et al. (2011) señalan que la semilla del sacha inchi contiene grandes cantidades de calcio (2406 mg/kg), lo cual pudo haber bloqueado la absorción del fósforo en el tracto digestivo del cerdo. Para mejorar la utilización del fósforo, Peña (2018) evaluó la eficacia de la fitasa microbiana en cerdos de engorde, obteniendo 54.6% de coeficiente de digestibilidad del fósforo. De igual manera, Pattacini et al. (2012) empleando fitasa fúngica mejoraron el coeficiente de digestibilidad del fósforo (44.15%). De esta manera, en estos dos estudios se obtuvieron valores de digestibilidad del fósforo superiores a los del presente estudio.
Los coeficientes de PB, FB, grasa, ELN y Ca no presentaron efecto significativo entre tratamientos, debido al procesamiento de tratamiento de la materia prima, así como también, al bajo contenido de fibra que tenían las dietas bajo estudio. Al respecto, estudios realizados en cerdos criollos indican que a medida que se incrementan los niveles de fibra en la dieta (desde 8.5% hasta 17.5%) disminuye la digestibilidad de los nutrientes (Toro, 2008; Linares et al., 2011).