INTRODUCCIÓN
El departamento de Junín registró el 8.2% (779 297) del total de la población ovina del Perú (9 523 198), de acuerdo con el IV Censo Nacional Agropecuario (INEI, 2012), siendo animales criollos el 71.3%. Las ovejas se caracterizan por ser poliéstricas estacionales, estacionalidad que se encuentra determinada por el fotoperiodo; es decir, las ovejas comienzan a manifestar celo cuando los días tienen menos horas de luz (Jainudeen et al., 2002; Alencastre y Gómez, 2005). La mejora de la producción de ovinos depende en gran medida de la eficiencia reproductiva (Alonso, 1981).
La involución uterina en el ovino ocurre alrededor de los 27 días posparto, usualmente antes del primer celo posparto. El hecho que las ovejas estén supeditas a la estacionalidad para iniciar sus ciclos estruales limita el número de partos a uno por año. No obstante, la manipulación del ciclo estrual por selección genética, métodos fisiológicos y cambios ambientales podría permitir hasta tres periodos d monta cada dos años (Jainudeen et al., 2002). En este sentido, Catalano et al. (2005) indican que la inducción del celo es un método que puede aplicarse en el manejo reproductivo de ovejas de razas de leche, pudiendo de esta manera acortar el anestro estacional.
En los rebaños de ovinos es frecuente la aplicación de la hormonoterapia farmacológica con el uso de prostaglandinas, progestágenos, melatonina y gonadotropina coriónica equina (eCG) (Lozano-González et al., 2012). Menchaca et al. (2013) han ensayado con diferentes dispositivos intravaginales y tiempos de permanencia en la vagina de las ovejas en estación reproductiva y en anestro; sin embargo, en el país se dispone de pocos trabajos comparativos respecto a los protocolos de sincronización cortos (6 días) y convencionales (12 días) en ovejas de un mes posparto con supresión temporal del amamantamiento de los corderos.
Normalmente se administra progestágenos durante 12-14 días; sin embargo, al sexto o séptimo día suele bajar la concentración en la sangre, lo que predispone al crecimiento del folículo dominante, de manera que el ovocito tiene una fertilidad disminuida al retiro del dispositivo intravaginal. Ante esto, Menchaca et al. (2013) propusieron tratamientos cortos con exposición a la progesterona de 5 a 7 días. Es así que el objetivo de la presente investigación fue evaluar el efecto del uso del protocolo corto de 6 días frente al convencional de 12 días, con el uso de progestágenos para la sincronización del estro y la ovulación en ovejas lactantes, para la inseminación artificial a tiempo fijo (IATF) con material seminal criopreservado.
MATERIALES Y MÉTODOS
Ubicación y Animales
El estudio fue realizado en la Estación Experimental Agropecuaria Santa Ana, perteneciente al Instituto Nacional de Investigación Agraria (INIA), ubicada en Huancayo, Junín, a una altitud de 3300 m. El material seminal fue colectado de un carnero de la raza Dohne Merino de la institución. Las ovejas utilizadas en el estudio fueron cruces entre Dohne Merino y Corriedale (F3).
Tratamientos Experimentales
Se trabajó con 64 ovejas con cría al pie, vacías de 30-40 días posparto. Los animales fueron seleccionados por conveniencia. Las ovejas fueron asignadas a dos tratamientos: (T1) constituido por ovejas con corderos al pie sometidas a supresión de amamantamiento temporal, donde se aplicó el protocolo de sincronización con progestágenos corto (6 días) (n1=32); y (T2) constituido por ovejas con corderos con corderos al pie sometidas a supresión de amamantamiento temporal, donde se aplicó el protocolo convencional (12 días) (n2= 32). La alimentación de las ovejas consistió en dietas con pastos naturales, suplementado con pastos cultivados y residuos de cosecha de chala de maíz a lo largo del día, y con estabulación en galpón por la noche (sistema combinado). Las ovejas fueron desparasitadas y vitaminadas previo al inicio del estudio.
Protocolos de Sincronización del Estro
Día 0: Se colocaron dispositivos intravaginales comerciales (CIDR® Ovis: 0.35 g de progesterona).
Día 6: Para las ovejas de T1 se retiraron los dispositivos intravaginales, y se inyectó 400 UI de eCG (Folligon®) IM. Los corderos fueron llevados aparte por 30 h.
Día 7: Para T1, posterior a las 30 horas del retiro del CIDR, se realizó la IATF con semen refrigerado (0.2 ml) por vía transcervical. Finalizada la inseminación, los corderos fueron reunidos con sus madres.
Día 12: Para las ovejas de T2, se retiraron los dispositivos intravaginales y se inyectó 400 UI de eCG (Folligon®) por vía IM. Los corderos fueron llevados aparte por 54 h.
Día 14: Para T2, posterior a las 54 horas del retiro del CIDR, se realizó la IATF) por vía trasnscervical con semen refrigerado (0.2 ml). Finalizada la inseminación, los corderos fueron reunidos con sus madres.
Detección de Celo e Inseminación Artificial
Para la detección del estro se utilizaron dos carneros machos de dos dientes con el pene cubierto con un mandil para evitar la cópula. Los carneros estuvieron presentes desde el retiro del CIDR en los dos grupos de tratamiento. Para la IATF se utilizó un vaginoscopio (Walmur®). El semen refrigerado (0.2 ml) tuvo una concentración de 200 x 106 por dosis y se inseminó una sola vez a cada oveja. El semen fue colectado 6 h antes de la IATF con una vagina artificial (Walmur®) atemperada a 42 ºC. El semen colectado fue disuelto con el dilutor Semental Dilutor’s (Labet SAC) siendo su instructivo, y conservado en refrigeración (4-5°C) hasta su empleo.
Tasa de No Retorno de Celo y de Preñez
De los 15 a 17 días pos-IATF se realizó el primer diagnóstico de preñez (no retorno de celo) con el uso de machos con mandil. A los 41 días pos-IATF se realizó el segundo diagnóstico de preñez utilizando un ecógrafo acoplado a un transductor lineal (Sonovet 600V®) a 6 MHz. El transductor se unió a un tubo de PVC (device penetration) de 15 cm para facilitar el ingreso del transductor por el recto. Finalmente, a los 90 días pos- IATF se realizó la confirmación definitiva de la preñez por balotaje externo (perneo). (Figuras 1 y 2). Al final del estudio se registró el tipo de parto de las ovejas.
Análisis Estadístico
La tasa de no retorno de celo fue estimada mediante la conducta sexual de los macho con mandil y la tasa de preñez fue determinada por ecografía transrectal, así como por balotaje externo (método del perneo) según tratamiento fueron analizados mediante la prueba de Chi-cuadrado con corrección de Yates. Para el análisis de los datos se utilizó el software R v. 4.1. 0 (R Core Team, 2021).
RESULTADOS
Los resultados del retorno de celo posterior a la inseminación artificial se presentan en el Cuadro 1. Las ovejas de T1 mostraron una menor, pero no significativa tasa de no retorno de celo (81.25%) frente a las ovejas de T2 (87.25%) (p>0.05). Los resultados de la ecografía a los 41 días pos-IATF (T1: 81.25%; T2; 87.50%) y del diagnóstico de preñez mediante balotaje (T1: 81.25; T2; 86.67%) fueron estadísticamente similares, mostrando que ambos protocolos de sincronización de celo ofrecen resultados similares.
El porcentaje de partos simples (73.1%) y partos melliceros (80.8%) fue, asimismo, similar entre los protocolos de sincronización evaluados (p>0.05) (Cuadro 1).
DISCUSIÓN
Los dos protocolos de sincronización corto de 6 días y convencional de 12 días permitieron que 81.25% (T1) y 87.50% (T2) de las ovejas no retornen en celo, indicando que podrían haber quedado gestantes. En un estudio previo, pero con menor número de animales, Espinoza et al. (2020) reportaron 95.3% de no retorno de celo en ovejas lactantes con destete temporal con programa convencional de 12 días, en condiciones de manejo y ambientes similares. Autores como Ungerfeld y Rubianes (1999), Simonetti et al. (2000) y Farfán et al. (2009) mencionan que tanto los tratamientos cortos (con periodo de sincronización entre 6 a 7 días) como los tratamientos largos (con periodo de sincronización entre 15 a 16 días) son efectivos en la inducción de celo, ya sea en estación reproductiva o fuera de ella.
No se obtuvo diferencias estadísticas entre los dos protocolos de sincronización de celo (p>0.05), aunque hubo un menor porcentaje de retorno de celo con la sincronización convencional con destete temporal de 54 horas (T2), concordando con lo mencionado por Menchaca et al. (2013) en cuya compilación de resultados de varios trabajos de investigación concluyen que tanto los tratamientos largos como los cortos suelen dar los mismos resultados.
Los resultados del diagnóstico de preñez tanto con ecografía transrectal a los 41 días pos-IATF (81.25% y 87.50%) como mediante el balotaje externo a los 90 días pos- IATF (81.25% y 86.67%) resultaron estadísticamente similares. Farfán et al. (2009) reportaron tasas de preñez con el protocolo largo de 12 días de 66.7-75.0% en comparación con el protocolo corto de 6 días con 83.3-91.7%, en tanto que Espinoza et al. (2020) reportaron porcentajes de preñez del 93.3% (14/15), 60.0% (6/10) y 66.7% (8/12) con protocolos de sincronización largo y solo variando el tiempo de presencia de las crías con las madres. Los porcentajes de preñez obtenidos en esta investigación pueden considerarse alto, teniendo además en consideración que el tamaño muestral fue mayor que en los otros estudios mencionados.
Mango (2015) obtuvo porcentajes de gestación de 42.1% (8/19) y 61.1% (11/18) con 300 y 600 UI de eCG, respectivamente, porcentajes menores a los obtenidos en este experimento. Menchaca et al. (2013), por otro lado, propusieron los tratamientos cortos de 5 a 7 días empleando 200-400 UI de eCG para inducir la ovulación, además de PGF2α al retirar el dispositivo para eliminar al cuerpo lúteo, obteniendo tasas de preñez cercana al 50% con IATF con semen fresco. Dichos autores consideran la importancia de evitar que los folículos preovulatorios se expongan a niveles bajos de progesterona por periodos prolongados, cosa que ocurre en el periodo largo, toda vez que la presencia de un folículo persistente con alta secreción de estradiol puede alterar el ambiente folicular, uterino/ oviductual y el transporte espermático (Johnson et al., 1996; Viñoles et al., 2001;
La mayor, aunque no significativa frecuencia de partos dobles con el tratamiento corto (26.9%) respecto al tratamiento largo (23%) concuerda con el estudio de Menchaca et al. (2013), pudiendo este resultado estar relacionado al desbalance hormonal que ocurre en el periodo largo.