INTRODUCCIÓN
La Dirección General de Caza y Pesca del Ministerio de Fomento y Agricultura introduce la tilapia (Oreochromis niloticus) en la década del 60 a los departamentos de la región de San Martín (Lago Sauce), Loreto (estación Quistococha) y Lambayeque (Reservorio de Tinajones) procedente del Brasil para ser empleada como pez de cultivo y forraje para alimentar al «paiche» o «pirarucu» (Arapaina gigas). Esta iniciativa no fue exitosa, quedando individuos de tilapia en diversos estanques de Loreto (Hurtado, 2016).
Las tilapias son peces introducidos a América Latina y son considerados como perjudiciales para los ecosistemas naturales debido a que pueden distorsionar el flujo de energía en el ecosistema, eliminación de especies nativas e introducción de parásitos y microorganismos (Hurtado, 2016). La mayoría de estas especies, una vez establecidas, son permanentes y su erradicación es difícil, costosa y muchas veces irreversible (Ehemann et al., 2015).
En las crianzas y cultivos de peces se debe tener especial cuidado para prevenir enfermedades ocasionadas por parásitos, dado que aumentan en número cuando los peces se encuentran en un estanque, por la alta densidad de siembra o condiciones no aptas de nutrición (Fernández, 2012).
En la Región de Loreto se ha detectado la presencia de ejemplares de tilapia (Oreochromis niloticus) en cuerpos de agua naturales y en estanques de cría del eje carretero Iquitos-Nauta. Es primordial destacar la falta de información sobre la fauna parasitaria presente en Oreochromis niloticus «tilapia» colectadas en la zona por ser una especie prohibida para la producción acuícola en Loreto, siendo cultivada de forma ilegal por piscicultores amazónicos.
Conociendo los riesgos a nivel sanitario que puede ocasionar la tilapia en ambientes naturales de la Amazonía peruana y existiendo relatos de reportes de su crianza ilegal en cautiverio, el presente estudio identificó a los ectoparásitos presentes en O. niloticus «tilapia» colectadas en un estanque piscícola del eje carretero Iquitos-Nauta en Loreto, Perú.
MATERIALES Y MÉTODOS
Los ejemplares de tilapia (Oreochromis niloticus) fueron colectados al azar de un estanque piscícola de filtración (10 m de ancho, 18 m de largo y 1.5 m de profundidad) conteniendo solo peces cíclidos. El estanque estaba ubicado en el km 2.8 de la carretera Iquitos Nauta (18M 0687391E y 9579431 UTM) y los peces fueron colectados utilizando una red bolichera y jamo mediano. Los peces seleccionados fueron acondicionados en bolsas plásticas con agua y oxígeno para el traslado al Laboratorio de Parasitología y Sanidad Acuícola del Instituto de Investigaciones de la Amazonía Peruana (IIAP), ubicado en la carretera Iquitos-Nauta, km 4.5, en Loreto-Perú.
Los 30 peces tenían seis meses de edad promedio. Fueron medidos con un ictiómetro EIMM (Krauss & Henke) para medición de peces de hasta 60 cm y pesados con una balanza digital NVK IP68 (precisión de 1 g). Luego, los peces fueron sacrificados mediante punción con un estilete en la fontanela, realizando un movimiento giratorio para remover el cerebro y causar la muerte del pez (Eiras et al., 2000). Se retiraron las branquias utilizando una tijera punta fina y se colocaron en frascos de plástico conteniendo agua caliente (60-68 °C). Los parásitos fueron conservados en etanol 96%. Las muestras fueron analizadas bajo estereoscopio y los parásitos encontrados fueron clarificados con el medio Hoyer. Fotografías de los parásitos fueron realizadas utilizando una cámara acoplada al microscopio.
Los índices parasitarios (prevalencia, intensidad, intensidad media, y abundancia media) fueron calculados según Bush et al. (1997). La prevalencia indica las veces que una determinada especie de parásito es encontrado en una población muestreada, la intensidad refleja el número total de parásitos encontrados en la población muestreada, la intensidad media es la cantidad media de parasitismo entre los hospederos parasitados, y la abundancia media es el número promedio de parásitos por hospedero examinado en una muestra (incluye a los no infectados). Los parásitos fueron identificados utilizado bibliografía especializada (Douëllou, 1993; Maneepitaksanti y Nagasawa 2012).
La determinación de la correlación entre el tamaño y peso de los hospederos contra la abundancia de monogenoideos se realizó utilizando la prueba no paramétrica del Coeficiente de Correlación de Spearman (rs) en el paquete estadístico BioEstat 5.3 para Windows.
RESULTADOS
El peso promedio y la desviación estándar de los peces fue de 63.0 ±32.8 g y la talla fue de 13.8 ± 3.7 cm. Se identificó una especie de Monogenoidea: Cichlidogyrus tilapiae parasitando las branquias (Figura 1). Los índices parasitarios se presentan en el Cuadro 1. Las correlaciones entre el tamaño y peso de los peces y la abundancia de monogenoideos no fue significativa (rs=-0.21; p=0.26; rs=-0.11; p=0.55, respectivamente).
DISCUSIÓN
Cíclidos africanos del género Oreochromis son parasitados por monogenoideos pertenecientes a los géneros Cichlidogyrus y Scutologyrus (Jiménez-García et al., 2001). Especies de estos géneros han sido reportadas en diferentes partes del mundo; así, en Brasil se reporta a C. halli, C. longicornis, C. sclerosus, C. thurstonae y C. tilapiae en O. niloticus y C. tilapiae en Tilapia rendalli (Cohen et al., 2013); en Colombia a C. sclerosus en O. niloticus (Cohen et al., 2013); en México a C. sclerosus infestando a ejemplares de O. niloticus criadas en piscigranjas (ParedesTrujillo et al., 2016); en China se ha reportado a Cichlidogyrus cirratus, C. halli, C. sclerosus, C. thurstonae y C. tilapiae infestando las branquias de Oreochromis spp en cuerpos de aguas naturales (Zhang et al., 2019); en tanto que en Malasia se ha reportado la presencia de C. halli, C. mbirizei, C. sclerosus, C. thurstonae y C. tilapiae en branquias de O. niloticus procedentes de ambientes naturales y de estanques de cultivo (Lim et al., 2016).
Para el Perú, el primer registro de monogenoideos infestando a O. niloticus de ambientes controlados fue reportado en la región de San Martín, identificado las especies C. sclerosus, C. thurstonae y Cichlidogyrus sp parasitando las branquias (Cabrera, 2019). Los índices parasitarios reportados por Cabrera (2019) mostraron una prevalencia de 92.5%, abundancia media de 39.8 e intensidad media de 43. Ese mismo año, se reportaron a especies de Cichlidogyrus parasitando a ejemplares de O. niloticus procedentes de piscigranjas de la Banda de Shilicayo, San Martín, Perú, con prevalencia superior al 75%, abundancia media de 3.27 e intensidad media de 4.28 (Calderón, 2019). En el presente estudio, se reporta por primera vez en la región de Loreto una especie de Cichlidogyrus parasitando a O. niloticus provenientes de un estanque de cultivo, con una prevalencia superior al 73%, abundancia media de 5.8 y con intensidad media de 7.9.
La presencia de C. tilapiae en la región Loreto podría ser considerada como una alerta ante un posible desequilibrio en los ambientes acuáticos amazónicos, ya que la posibilidad de que la tilapia se esté estableciendo en cuerpos de aguas naturales es latente, lo cual podría poner en peligro a la ictiofauna nativa al encontrar en la tilapia a un fuerte competidor de espacio, alimento y posible transmisor de patógenos. De acuerdo con Mendes Marques y Murrieta Morey (2018), peces nativos de la Amazonía peruana pueden estar siendo parasitados por parásitos exóticos, tal y como es reportado por estos autores quienes identificaron al copépodo asiático Neoergasilus japonicus en piel y aletas de una especie nativa amazónica como Colossoma macropomum «gamitana» en la región San Martín, Perú. Actualmente son muy pocos o casi inexistentes los estudios enfocados en la fauna parasitaria de tilapias introducidas al Perú y sus posibles efectos en ecosistemas acuáticos naturales.