INTRODUCCIÓN
La toxocariasis humana es una zoonosis transmitida por la ingesta de huevos larvados que se encuentran contaminando el suelo, causada generalmente por la infección con larvas de Toxocara canis y T. cati, que no pueden desarrollarse a estadios adultos en el humano (hospedero accidental) a diferencia de lo que ocurre en los hospederos definitivos. La seroprevalencia varia del 1,8 al 92,8% en el mundo y en Latinoamerica de 2,5 a 68,6% 1 - 4. En Venezuela se ha reportado en un rango de 9,7 a 66,6% 5 - 9.
El parásito produce cuatro síndromes: larva migrans visceral (LMV), larva migrans ocular (LMO), neurotoxocariasis y toxocariasis encubierta. Los principales síntomas en el síndrome de larva migrans clásico son: dolor abdominal, hiporexia, fiebre, tos, sibilancias, asma y hepatoesplenomegalia. Los síntomas comunes en LMO son: dolor de cabeza, fotofobia, dolor ocular, fatiga ocular, lagrimeo, disminución de la agudeza visual, hiperemia conjuntival, leucocoria, uveítis posterior, sinequias, cataratas, granulomas periféricos y de polo posterior, retinocoroiditis, desprendimiento de retina, hemorragia vítrea y pérdida visual 10. Tambien se encuentra prurito y miodesopsias 2 - 3.
Se ha descrito una disminución de las funciones cognitivas en la toxocariasis neurológica 11. Además, convulsiones focales o generalizadas, meningoencefalitis, eosinofilia y desórdenes de comportamiento 12. La toxocariasis encubierta puede ser asintomática o con síntomas leves 1 , 3. La identificación del parásito no es posible en el humano ya que la presencia de formas adultas solo se encuentra en el lumen del intestino delgado del hospedero definitivo (las pruebas de coprología son negativas) y la detección de las larvas en los tejidos u órganos por biopsia es un procedimiento intrusivo. El diagnóstico de toxocariasis se realiza mediante sus signos y síntomas clínicos, serología (detección de anticuerpos contra antígenos secretados/excretados de Toxocara spp), resultados hematológicos (presencia de eosinofilia y leucocitosis) y antecedentes epidemiológicos (existencia de factores de riesgo) 13.
La infección ocular con Toxocara spp. en la infancia puede producir la disminución o pérdida de la visión, lo que produce un gran impacto en su desarrollo, esto genera un problema de salud pública que se podría evitar con el diagnóstico y tratamiento oportuno. El objetivo de este estudio fue determinar las manifestaciones clínicas y alteraciones oculares en escolares con toxocariasis.
MENSAJES CLAVE
Motivación para realizar el estudio: la toxocariasis es una enfermedad parasitaria desatendida con efectos severos para la salud. En Venezuela se han realizado pocos estudios que reporte las manifestaciones oculares en escolares con toxocariasis.
Principales hallazgos: el 18,6% de los escolares presentó toxocariasis. Los síntomas clínicos predominantes fueron: reacciones alérgicas, lagrimeo abundante y disminución de la agudeza visual.
Implicancias: este estudio mostró una alta frecuencia de trastornos oculares en escolares con toxocariasis en un estado de Venezuela.
EL ESTUDIO
Se realizó una investigación de tipo transversal y descriptiva en el estado Anzoátegui en Venezuela, durante julio y diciembre del 2019. Para acceder a la población se incluyó a la escuela básica Fe y Alegría en el Municipio Bolívar (10° 8’28” N, 64° 36’49” O) y la escuela básica Aníbal Dominici en el Municipio Sotillo (10° 11’8 “N, 64° 38’5” O) (Figura 1). El estado Anzoátegui tiene un bioclima mosaico de bosque premontano, montano húmedo y tropical seco, con una temperatura habitual anual de 25 °C ± 2 °C y una precipitación de 600-1800 mm anuales 14.
Los escolares se seleccionaron por muestreo aleatorio simple hasta incluir el tamaño de muestra calculado más el 15% de probables pérdidas, con base en una prevalencia de infección del 14%, según un estudio anterior en escolares 9, y un nivel de confianza de 95%. Los criterios de inclusión fueron: pertenencia a la institución, edad entre 6 y 8 años y aprobación por escrito de los padres o tutores.
Los pediatras de nuestro grupo de trabajo solicitaron a los padres o tutores de los escolares, completar un cuestionario diseñado para recoger datos clínicos y epidemiológicos. Todos los escolares fueron examinados clínicamente; los seropositivos fueron evaluados por un oftalmólogo y se realizaron los siguientes exámenes: determinación de la agudeza visual, fondoscopia con oftalmoscopia directo, fondoscopia con oftalmoscopia indirecto y estudios especiales de ecografía ocular y angiografía fluoroceínica, en los casos necesarios.
Se obtuvieron 5 mL de sangre y se centrifugaron a 2500 rpm durante 10 min para recolectar el suero. Se detectaron anticuerpos IgG contra antígenos de excreción/secreción de Toxocara spp. utilizando un ELISA siguiendo las instrucciones del fabricante (RIDASCREEN Toxocara IgG N ° 04-07-232 ®, sensibilidad 100%, especificidad 90,7%). Se colocaron 100 µL de cada suero (diluido 1/100 en solución tampón) en los pocillos de las placas sensibilizadas con el antígeno de excreción/secreción de T. canis y bloqueadas (del estuche comercial) y se incubó 1 h a 37 °C. Posteriormente, se lavaron las placas tres veces con 200 µL de solución de lavado por pocillo, durante 5 min cada vez. Se agregó 100 µL del conjugado anti-IgG humana acoplado a peroxidasa y se incubó a 37 °C durante una hora. Se lavó de la forma antes descrita y se añadió 100 µL del sustrato y se incubó a temperatura ambiente por 15 min. Se realizó la lectura de absorbancia a 405 nm, utilizando el lector de ELISA (Dynatech MR5000).
La información se documentó con Microsoft Excel 2016® y se evaluó con el software estadístico Stata 10.0®. Se consideró la distribución de frecuencias para todas las variables. La asociación de individuos seropositivos con la edad, sexo y sintomas se estudió mediante Odds Ratio (OR) y prueba de relación con chi cuadrado o prueba exacta de Fisher (en el caso de valores menores a 5). Para todas las pruebas estadísticas, el nivel de significancia fue 0,05.
El proyecto fue aprobado por el Comité de Bioética del Instituto de Investigaciones Biomédicas de la Universidad de Carabobo. Se firmó un consentimiento informado por escrito por parte de los padres o tutores de los niños, para la obtención de muestras de sangre siguiendo pautas éticas, también se obtuvo el asentimiento de los niños y solo se tomó muestra a quienes aceptaron participar. Todos los niños obtuvieron atención médica y recibieron tratamientos si fuera necesario.
RESULTADOS
Participaron 118 escolares, el 50% de los participantes eran de cada municipio, de los cuales el 57,6% (68/118) eran mujeres y el 42,4% (50/118) varones (Tabla 1). Las muestras de suero del 18,6% (22/118) de los niños dieron positivo por ELISA. La mayor seroprevalencia (20,3%, 12/59) se presentó en el municipio Sotillo (colegio Aníbal Dominici), sin significación estadística. La seroprevalencia fue mayor para los varones (20,0%, 10/50) que para las mujeres 17,6% (12/68) sin asociación estadísticamente significativa (p=0,746). En cuanto a la edad, la seroprevalencia fue mayor en los 6 años (22,5%, 18/80) seguido de 7 años (13,3% 4/30) y ninguna en los niños de 8 años, sin asociación estadísticamente significativa (Tabla 1).
Total n (%) | Anticuerpos anti-Toxocara spp. | Valor de p | |||
---|---|---|---|---|---|
Positivo n (%) | Negativo n (%) | OR (IC 95%) | |||
Número | 118 (100,0) | 22 (18,6) | 96 (81,4) | ||
Municipalidad | |||||
Bolivar | 59 (50,0) | 10 (16,9) | 49 (83,1) | 1,0 | |
Sotillo | 59 (50,0) | 12 (20,3) | 47 (79,7) | 1,3 (0,5-3,2) | 0,636 |
Género | |||||
Femenino | 68 (57,6) | 12 (17,6) | 56 (82,4) | 1,0 | |
Masculino | 50 (42,4) | 10 (20,0) | 40 (80,0) | 1,2 (0,5-3,0) | 0,746 |
Edad (años) | |||||
6 | 80 (67,8) | 18 (22,5) | 62 (77,5) | 1,00 | |
7 | 30 (25,4) | 4 (13,3) | 26 (86,7) | 0,5 (0,2-1,7) | 0,284* |
8 | 8 (6,8) | 0 (0,0) | 8 (100,0) | -- | -- |
Síntomas generales | |||||
Dolor de cabeza | 56 (47,5) | 16 (28,6) | 40 (71,4) | 1,0 | |
Tos seca | 54 (45,8) | 15 (27,8) | 39 (72,2) | 1,0 (0,4-2,2) | 0,926 |
Fotofobia | 40 (33,9) | 14 (35,0) | 26 (65,0) | 1,4 (0,6-3,2) | 0,503 |
Dolor ocular | 34 (28,8) | 14 (41,2) | 20 (58,8) | 1,8 (0,7-4,3) | 0,219 |
Tos productiva | 34 (28,8) | 14 (41,2) | 20 (58,8) | 1,8 (0,7-4,3) | 0,219 |
Fatiga visual | 32 (27,1) | 8 (25,0) | 24 (75,0) | 0,8 (0,3-2,2) | 0,727 |
Palidez cutánea/mucosa | 32 (27,1) | 12 (37,5) | 20 (62,5) | 1,5 (0,6-3,8) | 0,387 |
Epífora | 30 (25,4) | 18 (60,0) | 12 (40,0) | 3,8 (1,5-9,5) | 0,004 |
Disminución de la agudeza visual | 22 (18,6) | 12 (54,5) | 10 (45,5) | 3,0 (1,1-8,3) | 0,031 |
Reacciones alérgicas | 22 (18,6) | 14 (63,6) | 8 (36,4) | 4,4 (1,5-12,4) | 0,004 |
Fiebre | 22 (18,6) | 7 (31,8) | 15 (68,2) | 1,2 (0,4-3,4) | 0,777 |
Dolor abdominal | 14 (11,7) | 6 (42,9) | 8 (57,1) | 1,9 (0,6-6,3) | 0,303 |
Dificultad respiratoria | 8 (6,8) | 2 (25,0) | 6 (75,0) | 0,8 (0,2-4,6) | 0,833* |
Hepatomegalia | 6 (5,1) | 6 (100,0) | 0 (0,0) | -- | -- |
Artralgia/mialgia | 2 (1,7) | 1 (50,0) | 1 (50,0) | 2,5 (0,2-42,4) | 0,513* |
Náuseas/vómitos | 2 (1,7) | 1 (50,0) | 1 (50,0) | 2,5 (0,2-42,4) | 0,513* |
* prueba exacta de Fisher
Las manifestaciones clínicas generales y su asociación con la presencia de anticuerpos frente a Toxocara spp. se muestran en la Tabla 1. Los principales signos y síntomas clínicos en niños seropositivos fueron: hepatomegalia (100% 6/6); reacciones alérgicas (63,6%, 14/22); epífora (60%, 18/30); disminución de la agudeza visual (54,5%, 12/22); dolor abdominal (42,9%, 6/14); dolor ocular y tos productiva (41,2%, 14/34 cada uno); palidez cutánea/mucosa (37,5%, 12/32) y fotofobia (35,0%, 14/40). Los signos y síntomas con asociación estadísticamente significativa fueron reacciones alérgicas (p = 0,004), epífora (p = 0,004) y disminución de la agudeza visual (p=0,031).
La evaluación oftalmológica en escolares seropositivos (n = 22) reveló que los principales síntomas oculares fueron: epífora (81,8% 18/22); dolor ocular y fotofobia (63,6% 14/22 cada uno); disminución de la agudeza visual (54,5%, 12/22) y fatiga visual (36,4%, 8/22). Otros síntomas se informaron con menos frecuencia como; estrabismo, queratitis, uveítis, iritis, granuloma retiniano, endoftalmitis, amaurosis, leucocoria, desprendimiento de retina y endotropía (Tabla 2).
Positivo | Negativo | |||
---|---|---|---|---|
N | (%) | N | (%) | |
Trastornos oculares | ||||
Epífora | 18 | (81,8) | 4 | (18,2) |
Dolor ocular | 14 | (63,6) | 8 | (36,4) |
Fotofobia | 14 | (63,6) | 8 | (36,4) |
Disminución de la agudeza visual | 12 | (54,5) | 10 | (45,5) |
Fatiga visual | 8 | (36,4) | 14 | (63,6) |
Estrabismo | 6 | (27,3) | 16 | (72,7) |
Queratitis | 5 | (22,7) | 17 | (77,3) |
Uveítis | 4 | (18,2) | 18 | (81,8) |
Iritis | 3 | (13,6) | 19 | (86,4) |
Granuloma de retina | 2 | (9,1) | 20 | (90,9) |
Endoftalmitis | 1 | (4,5) | 21 | (95,5) |
Amaurosis | 1 | (4,5) | 21 | (95,5) |
Leucocoria | 1 | (4,5) | 21 | (95,5) |
Desprendimiento de retina | 1 | (4,5) | 21 | (95,5) |
Endotropia | 1 | (4,5) | 21 | (95,5) |
DISCUSIÓN
La seroprevalencia en el presente estudio es levemente superior a la reportada en otros estudios en Venezuela, por ejemplo, en escolares de los estados Aragua 9 y Zulia 15, y en indígenas del estado Delta Amacuro 5. En otros estudios en escoloares la seroprevalencia fue superior a la reportada en este trabajo (29,0-58,9%) 6 - 8. Probablemente, debido a que existen más factores de riesgo que favorecen la transmisión de la toxocariasis en estas comunidades.
Diferentes valores de seroprevalencias se reportaron en niños de otros países, por ejemplo, 13,8% en México 16, 19,3% en China 17, 58,2% en Tailandia 18 y 88,6% en Honduras 19, demostrando una gran variabilidad. En un metanálisis para estimar la seroprevalencia de la toxocariasis en todo el mundo, los autores encontraron una seroprevalencia global del 19,0%, con el valor más alto en África (37,7%) y el más bajo en la región del Mediterráneo Oriental (8,2%), 34,1% en el sudeste asiático, 24,2% en el Pacífico occidental, 22,8% en América y 10,5% en las regiones europeas, lo que indica el rasgo cosmopolita de la toxocariasis 20.
La escuela Aníbal Dominici en el municipio Sotillo fue donde se registró la mayor prevalencia, aunque no estadísticamente significativa, quizás allí se encuentren mayores factores de riesgo, por ejemplo, la presencia de perros callejeros. Los participantes masculinos tuvieron una mayor seroprevalencia, aunque no estadísticamente significativa. Otros estudios han mostrado resultados similares 7 - 9 , 18 , 21 y en otros, se ha demostrado una asociación significativa entre el sexo masculino y la infección 9 , 22 - 23. Quizás, los varones tienen un mayor contacto con los huevos de Toxocara spp. debido a su comportamiento como jugar en parques de tierra. Otros estudios reportaron diferencias en cuanto a la edad, con mayor prevalencia en menores de 8 años 9 , 22 - 23, posiblemente por la falta de hábitos de higiene y más tendencia a la geofagia.
Los signos y síntomas con asociación estadísticamente significativa fueron reacciones alérgicas, epífora y disminución de la agudeza visual, quizás porque la presencia de antígenos del parásito pueda desencadenar reacciones alérgicas y la reacción antígeno anticuerpo y la inflamación por la presencia del parásito pudiese generar disminución de la agudeza visual. Otros autores también han reportado estas manifestaciones clínicas compatibles con toxocariasis tales como; reacciones alérgicas 8 - 9 , 21, epífora ( 8 - 9, disminución de la agudeza visual ( 8 - 9 , 22 - 24, dolor abdominal 8 - 9 , 21, dolor ocular 8 - 9, tos ( 8 - 9, palidez cutánea/mucosa ( 8 - 9 y fotofobia 8 - 9 , 22.
La evaluación oftalmológica en los escolares seropositivos reveló alta frecuencia de síntomas oculares, tales como; epífora, dolor ocular, fotofobia, disminución de la agudeza y fatiga visual, aunque solo la disminución de la agudeza visual y la epífora tuvieron asociación estadísticamente significativa. Asimismo, se detectaron casos de queratitis, uveítis, iritis, granuloma retiniano, endoftalmitis, amaurosis, leucocoria, desprendimiento de retina y endotropía. En la toxocariasis ocular otros autores han descrito; uveitis 22 - 23, miodesospsias, prurito y leucocoria 23.
La detección de anticuerpos anti-Toxocara spp. debería ser una prueba de rutina para el cribado de casos sospechosos, ya que podrían ayudar con el diagnóstico en casos de pacientes con signos y síntomas clínicos; sin embargo, los resultados negativos no pueden excluir una posible toxocariasis ocular. Por otro lado, esta parasitosis puede confundirse con el retinoblastoma, con riesgo de enucleación ocular 16. Además, en otros estudios la toxocariasis ocular se ha asociado con uveítis, disminución de la visión, estrabismo y leucocoria, especialmente en niños y jóvenes de zonas rurales 22 - 23.
Las limitaciones del estudio fueron no poder hacer la evaluación oftalmológica a toda la población estudiada, sino solo a los seropositivos, además de no contar con otra prueba de diagnóstico inmunológico para comparar los resultados del estuche comercial.
En conclusión, luego de realizar una evaluación oftalmológica exhaustiva en escolares con toxocariasis de un estado en Venezuela, los resultados muestran una alta frecuencia de signos y síntomas como una causa importante de enfermedad ocular y que puede producir disminución o pérdida de la visión, afectando el desenvolvimiento de los escolares en su educación, como en su vida en general y oportunidades futuras de trabajo, problemas que se podrían evitar con el diagnóstico y tratamiento oportuno.