Introducción
La familia Charinidae Quintero, 1986 está representada en las Américas por el género Charinus Simon, 1892, cuya distribución en este continente abarca desde Belice (Centroamérica) hasta el sur de Brasil, en Sudamérica (Miranda et al., 2021a, b). Además, con 96 de especies formalmente descritas, constituye el género más diversificado entre todos los que integran el orden Amblypygi.
De las 78 especies americanas de Charinus, la mayoría habita en Sudamérica, siendo Brasil el país con más riqueza de especies (Miranda et al. 2021a). En lo que respecta al Perú, solamente se han descrito cuatro especies, las cuales, por orden cronológico, son las siguientes: Charinus koepckei Weygoldt, 1972; C. longitarsus Armas & Palomino-Cardenas, 2016; C. tingomaria Ballón-Estacio & Armas, 2019; y C. yanatile Palomino-Cardenas, Armas & Del Castillo-Espinoza, 2022. Las tres últimas se localizan en la cordillera andina, entre los 670 y 1634 m s.n.m., siendo C. longitarsus y C. yanatile endémicas del departamento del Cusco (Palomino-Cardenas & Armas 2022).
En la presente contribución se describe una especie nueva de Charinus, la tercera procedente del departamento del Cusco, Perú.
Material y métodos
Para los segmentos del pedipalpo y las patas se emplea la terminología de Shultz (1989) y Harvey (2002): coxa, trocánter, fémur, patela, tibia y tarso + apotele o garra; las espinas de los pedipalpos aparecen numeradas de la base hacia el ápice. En los pedipalpos, la distinción entre espina y tubérculo se ha realizado según el criterio de Miranda et al. (2021a). Los caracteres utilizados son mayormente los referidos a la morfología externa, incluidos los morfométricos y merísticos. Para la confección de la clave taxonómica fueron seleccionados los caracteres más constantes dentro de cada especie, aunque la identificación que resulte de su utilización siempre deberá ser confirmada acudiendo a la descripción original o redescripciones y, preferiblemente, especímenes de museo identificados por una autoridad competente.
Para el examen de los ejemplares en el laboratorio y la toma de imágenes digitales se empleó un Estereoscopio Discovery V20 y una cámara AxioCam. Las mediciones se tomaron con el empleo de una regla reticulada y la aplicación del programa Adobe Photoshop 2020. El mapa de distribución se confeccionó utilizando el programa ArcGIS.
Las coordenadas geográficas fueron determinadas mediante GPS garmin y corroboradas en Google Earth.
La recolección de especímenes fue realizada bajo el amparo de la Resolución No. 35-2019-MINAGRI-SERFOR-DGGSPFFS del 30 de enero de 2019.
El material examinado está depositado en la colección MHN-UNSAAC (Museo de Historia Natural, Universidad Nacional de San Antonio Abad del Cusco, Perú).
Resultados y discusión
Orden Amblypygi Thorell, 1883
Familia Charinidae Quintero, 1986
Género Charinus Simon, 1892
Charinus castilloae Armas & Palomino-Cardenas n. sp.
Charinus sp. n. Armas & Palomino-Cardenas, 2023: 86, tabla I.
Figs. 1 - 4, 5 A - B, D; Tabla 1
Datos del tipo. Hembra holotipo (MHN-UNSAAC), Santa Teresa (13.10991 S, 72.59339 W; 1436 m de altitud), distrito Santa Teresa, provincia La Convención, departamento Cusco, Perú, 07 de mayo, 2022, A. Palomino C. Paratipos: Una hembra (MHN-UNSAAC), iguales datos que el holotipo. Tres hembras y un juvenil (MHN-UNSAAC), Santa Teresa (13.12572 S, 72.60049 S; 1511 m de altitud), distrito Santa Teresa, provincia La Convención, departamento Cusco, Perú, 07 de mayo, 2022, A. Palomino C.
Distribución. Solo se conoce de la localidad tipo (Fig. 1).
Etimología. El nombre específico es un matronímico en honor a la profesora Mercedes del Castillo Espinosa (UNSAAC), por su contribución al conocimiento de los amblipígidos del Cusco y su ejemplar y prolongado magisterio.
Diagnosis. Se distingue de sus congéneres americanos por la siguiente combinación de caracteres: tubérculo ocular y ojos medios muy pequeños (su diámetro es 0.5 veces el de uno de los ocelos laterales); pata I con 23 subartejos tibiales y 43 tarsales, siendo el primer tarsómero menor que la longitud del segundo y tercero juntos. Pata IV: basitibia formada por cuatro subartejos; distitibia con 16 tricobotrios, estando bc más próximo a bsf que a bf. Pedipalpos: fémur con tres o cuatro espinas dorsales y tres ventrales; patela con cuatro espinas dorsales y tres ventrales. Dedo movible del quelícero con cinco dientes. Gonópodos de la hembra en forma de vesícula o tonel (sucker-like), sin reborde distal y con la abertura muy ancha (su diámetro ocupa aproximadamente la mitad del que basalmente posee la estructura).
Descripción de la hembra (Figs. 2 - 4, 5 A - B, D). De pardo claro, más pálido ventralmente; carapacho con los surcos y depresiones ligeramente oscurecidas; tubérculo ocular negro.
Carapacho arriñonado y convexo (Fig. 2 A), 1.3 veces más ancho que largo, muy finamente granulado, con microcerdas acuminadas dispersas; borde anterior con seis macrocerdas, casi recto; área frontal muy ancha. Proceso frontal triangular, no visible en vista dorsal. Tubérculo ocular pequeño (0.08 mm de diámetro), separado 0.09 - 0.13 mm del margen anterior; ojos medios pequeños, la mitad del tamaño de los ocelos laterales (Fig. 2 A); ojos laterales con pigmentación negra hacia los bordes, separados 1,41-1,73 mm entre sí y 0.20 - 0.30 mm del margen lateral, cada tríada con una microcerda próxima al margen posterior. Sulcus situado a 0.69 - 0.93 mm del margen posterior.
Esternón (Fig. 2 B) moderadamente quitinizado. Tritosternón corto (2.0 veces tan largo como su ancho en la base), cónico y de vértice truncado, con cuatro pares de macrocerdas (apicales, medias, subasales y basales), más 4 - 6 pequeñas cerdas basales; las macrocerdas subasales y apicales son las más fuertes y largas. Tetrasternón 1.9 veces más ancho que largo, con un par de fuertes macrocerdas anterolaterales, bien separadas entre sí, además de dos cerdas posteriores muy pequeñas. Pentasternón 1.5 veces más ancho que largo, con un par de fuertes macrocerdas anterolaterales, claramente separadas entre sí. Metasternón tan ancho como largo, con dos cerdas posteriores submedias.
Opérculo genital 1.70 - 1.90 veces más ancho que largo, con abundantes microcerdas concentradas en la región media, a lo largo del submargen posterior; margen posterior claramente convexo, con numerosas cerdas cortas.
Gonópodos cónicos, en forma de vesícula o tonel, más anchos que más largos; sin reborde distal y con abertura sub-redondeada, de aproximadamente 0.5 veces el diámetro del gonópodo (Fig. 4 A - B).
Quelíceros (Fig. 5A). Superficie anteroventral del segmento basal con cuatro dientes internos; sin dientes externos. Diente basal (superior) con la cúspide proximal claramente mayor que la distal. Dedo móvil con cinco dentículos romos que decrecen progresivamente hacia el ápice.
Pedipalpos relativamente cortos (patela tan larga como el carapacho), con dispersas cerdas acuminadas cortas (Figs. 2 C - D). Trocánter con una espina interna media, dirigida hacia afuera, y otra ventral subdistal, levemente curvada y dirigida hacia atrás (Fig. 3A); superficie dorsal interna con dos tubérculos setíferos, de los cuales el basal es el mayor; apófisis ventroanterior espiniforme, con 12 fuertes cerdas, terminada en un fuerte espolón (Fig. 3A) y una larga macrocerda subdistal. Fémur con tres o cuatro espinas dorsales que decrecen gradualmente hacia el ápice, siendo la primera 1.4 mayor que la segunda y 2.2 veces más larga que la tercera; la espina terminal es muy pequeña y puede estar ausente en uno o ambos pedipalpos; entre el margen basal y Fd-1 hay dos tubérculos setíferos moderadamente desarrollados; en posición externa, hay dos tubérculos setíferos más pequeños, uno a nivel de Fd-1 y otro a nivel de Fd-2, de los cuales este último posee la cerda mayor. Superficie ventral con tres espinas, de las cuales Fv-1 es muy corta; Fv-1 es 1,36 veces mayor que Fv-2, en tanto esta última es 2,3 veces más larga que Fv-3; próxima a la base de Fv-1 hay una diminuta espina secundaria. Patela con cuatro espinas dorsales y tres ventrales, las cuales incrementan su tamaño hacia el ápice del artejo, siendo la basal, en ambos casos, diminuta; en su tercio basal, Pd-3 y Pd-4 presentan una macrocerda cada una; además, existe un fuerte tubérculo setífero entre Pd-4 y el margen distal de la patela. Tibia con dos espinas dorsales (Td-2˃Td-1) y una espina ventral (Fig. 3 B). Tarso con dos espinas dorsales, de las cuales la primera es mucho más pequeña que la segunda. Garra aguda y curvada, similar en tamaño al tarso (Fig. 3B).
Patas con cerdas cortas y acuminadas dispuestas en filas a lo largo del margen ventral externo de los artejos. Fémur de las patas II-IV con un lóbulo espiniforme ubicado en la esquina ventral de la cara prolateral. Flagelo (pata I) compuesto por 23 artejos tibiales y 43 tarsales; de estos últimos, el primero es ligeramente más corto que los dos siguientes juntos (Fig. 5 B). Segundo tarsómero de las patas II-IV con un fino anillo blanquecino subdistal. Pata IV con la basitibia constituida por cuatro pseudoartejos, el último de ellos con un tricobotrio (dt) a mediación del artículo; distitibia con tres tricobotrios basales y 13 distales, tricobotrio bc más próximo a bsf que a bf (Fig. 5 D); no se observaron variaciones en el número ni en la posición relativa de los tricobotrios. Dimensiones (Tabla 1).
Historia natural. La serie tipo fue recolectada entre los 1435 y 1511 m de altitud, en Bosque seco subtropical (transicional a Bosque húmedo subtropical), en áreas muy antropizadas (mayormente de cultivos), debajo de piedras, troncos caídos y entre la capa superficial de detritos vegetales (hojarasca) y cerca de los arroyos de aguas termales, por lo general en pequeños grupos de uno a dos individuos, de igual o diferente sexo y estadio postembrionario.
Comparaciones. Las otras dos especies que habitan en el Cusco, C. longitarsus y C. yanatile, también poseen gonópodos femeninos en forma de ventosa o tonel, con la abertura muy ancha y sin reborde distal; pero presentan 14 tricobotrios en la distitibia del cuarto par de patas, no observándose variación de este carácter merístico en ninguno de los ejemplares examinados. Además, C. longitarsus posee 30 tarsómeros en las patas I (flagelo), siendo el primero tan largo como los siete u ocho siguientes en conjunto; en C. yanatile, el tubérculo ocular es más grande (0.10 vs 0.08 mm), en tanto el tarsómero 1 del primer par de patas es más largo que los dos siguientes juntos (Fig. 5 C).
Las otras dos especies descritas del Perú, Charinus tingomaria Ballón-Estacio & Armas, 2019, del departamento de Huánuco, y C. koepckei Weygoldt, 1972, del área subcostera del departamento de Arequipa, poseen los gonópodos en forma de cojines redondeados (cushion-like). Además, en C. koepckei el tetrasternón y el pentasternón están divididos; en tanto la especie de Huánuco se distingue de C. castilloae n. sp., por presentar los pedipalpos con mayor cantidad de espinas dorsales y ventrales (fémur: 3 - 4 dorsales y 4 ventrales; patela: 5 dorsales), así como evidente dimorfismo sexual secundario (pedipalpos más largos en el macho).
La especie brasileña Charinus renneri Miranda, Giupponi, Prendini & Scharff, 2021, descrita del estado de Bahía y solamente conocida de una cueva muy húmeda, guarda cierta similitud con C. castilloae, pero se diferencia de esta por los siguientes caracteres: (1) tubérculo ocular y ojos medios claramente más grandes (estos últimos son de tamaño similar a los ocelos laterales); (2) gonópodos femeninos más redondeados, con pequeñas proyecciones laterales; (3) dedo móvil del quelícero con ocho dentículos; (4) área anterior del carapacho claramente más estrecha; y (5) segmento basal del quelícero con un diente retrolateral diminuto.
Charinus longitarsus
(Fig. 4 C - D)
Charinus longitarsus Armas & Palomino-Cardenas en Armas et al., 2016: 46-48, figs. 1 A-G, 2 A-E, 3 A-B, tabla I.
Nota aclaratoria. Los gonópodos ilustrados por Armas & Palomino-Cardenas en Armas et al. (2016: fig. 2D), supuestamente de una hembra de C. longitarsus, en realidad corresponden a los de un macho. Los gonópodos femeninos de esta especie (Fig. 4 C - D) son similares a los de C. yanatile y C. castilloae. Presentamos nuestras disculpas por el lapsus cometido.
Clave para la identificación de las especies peruanas del género Charinus
1 Pata I con 27 a 30 tarsómeros, siendo el primero muy largo (mayor que la longitud de los tarsómeros 2 al 7 juntos). Basitarso de la pata IV con tres pseudoartejos. Gonópodos femeninos en forma de ventosa o tonel (Fig. 4 C - D). longitarsus
Pata I con 42 o 43 tarsómeros, siendo el primero corto (menor que la longitud de los tarsómeros 2 al 4 juntos) (Fig. 5 B - C). Basitarso de la pata IV con tres o cuatro pseudoartejos. Gonópodos femeninos en forma de cojines redondeados o de tonel. 2
Pata IV: basitibia constituida por cuatro pseudartejos; distitibia con 16 tricobotrios (Fig. 5 D); gonópodos femeninos en forma de cojines redondeados. 3
Pata IV: basitibia con tres pseudartejos; distitarso con 14 o 16 tricobotrios; gonópodos femeninos en forma de tonel (Fig. 4). 4
3 Tetrasternón y pentasternón divididos en dos placas redondeadas. Dedo móvil del quelícero con cinco dientes (Fig. 5 A). Pedipalpos: fémur con 3 o 4 espinas dorsales; patela con cuatro espinas dorsales. koepckei
Tetrasternón y pentasternón enteros (Fig. 2 B). Dedo móvil del quelícero con siete u ocho dientes. Pedipalpos: fémur y patela, ambos con cinco espinas dorsales. tingomaria
4 Distitibia de la pata IV con 14 tricobotrios; tarsómero 1 del primer par de patas más largo que los dos siguientes juntos (Fig. 5 C). yanatile
Distitibia de la pata IV con 16 tricobotrios; tarsómero 1 del primer par de patas más corto que los dos siguientes juntos (Fig. 5 B). castilloae