SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.29 número2Publicaciones editoriales: MitosConocimientos sobre tuberculosis en agentes comunitarios de salud en Tacna, Perú índice de autoresíndice de materiabúsqueda de artículos
Home Pagelista alfabética de revistas  

Servicios Personalizados

Revista

Articulo

Indicadores

  • No hay articulos citadosCitado por SciELO

Links relacionados

  • No hay articulos similaresSimilares en SciELO

Compartir


Acta Médica Peruana

versión On-line ISSN 1728-5917

Acta méd. peruana v.29 n.2 Lima abr./jun. 2012

 

Carta al Editor

Medicina Tradicional versus Medicina Científica ¿En verdad somos tan diferentes en lo esencial?

Traditional Medicine against Scientific-based Medicine ¿Are we so different in their essentials?

 

Reneé Pereyra-Elías1, Duilio Fuentes Delgado2

1. Estudiante de Medicina Humana, Escuela de Medicina, Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas, Lima, Perú.

2. Director Ejecutivo. Centro Nacional de Salud Intercultural. Instituto Nacional de Salud, Lima, Perú.


La medicina tradicional es el conjunto de prácticas, creencias y conocimientos sanitarios basados en el uso de recursos naturales (plantas, animales o minerales), terapias espirituales y técnicas manuales que buscan mantener la salud individual y comunitaria .

La medicina científica (también conocida como alopática u occidental) es la medicina convencional, considerada oficial en nuestro sistema de salud . Para muchos, ambas son prácticas aparentemente irreconciliables que se encuentran en las antípodas del ejercicio médico. Además de esa supuesta dicotomía o contradicción, se desenvuelven en una convivencia carente de horizontalidad y de respeto entre ellas. Se deja de lado y se menosprecia el valor de la práctica de la medicina tradicional por la naturaleza empírica que la caracteriza o por la dimensión mágico-religiosa en la que está parcialmente basada. El escepticismo deviene muchas veces en el desprecio y la marginación de estas prácticas.

Asimismo, al ser la medicina científica considerada legalmente como el sistema oficial de atención en salud en nuestro país, algunas personas la imparten con cierto paternalismo y prejuicios a las personas relacionadas con la medicina tradicional. Ante esta inequitativa situación, es de importancia preguntarnos ¿Son así de diferentes estos sistemas médicos? Tomando en cuenta sus aspectos esenciales, la respuesta sería no, debido a que:

1. La primera y tal vez la más importante semejanza entre ambas: se fundamentan en un propósito común. Existe un patrón primario, innato al hombre, que lo hace buscar una manera de encontrar la salud para sí mismo a través de la medicina, siendo su fin último servir a quien sufra de algún padecimiento o enfermedad .

2. Ambos son sistemas médicos: un cuerpo de doctrina por el que cada cultura concibe el proceso saludenfermedad y actúa con respecto a él en sus diferentes dimensiones .

3. No se desarrollan como procesos individuales y aislados, sino en un contexto comunitario; por lo general, en su propio entorno, con personas que comparten la misma cultura .

4. Ambas ocupan una posición oficial en su sociedad, son reconocidas por ésta y juegan un rol muy importante. Tienen una “ubicación social integrada”, ya que ninguna es marginada por la sociedad a la que pertenece .

5. Respecto del aspecto legal, ambas están en armonía con las leyes establecidas por su cultura, obedeciendo y colaborando con ellas .

6. Ambos sistemas médicos tienen un autor principal o ejecutor: un sanador (el curandero o chamán en la medicina tradicional y el médico en la medicina científica). Este representante es una persona preparada especialmente para desempeñar esa labor (por un proceso educativo arduo y prolongado), siendo muy difícilmente reemplazado por una persona sin el entrenamiento correspondiente . Además, en ambos contextos, el sanador ocupa un rol importante y prestigioso dentro de su sociedad .

7. Tienen la misma dimensión moral: la razón que las mueve goza de un matiz vocacional que busca la sincera ayuda social, mas no el afán de lucro u otros intereses personales .

8. Son falibles y limitadas .

Conjuntamente con estas semejanzas esenciales, y debido a que ambas medicinas son sistemas abiertos, fácilmente influenciables por factores exógenos, se ha producido desde su encuentro hace varios siglos una suerte de situación sincrética.

El contacto cada vez más cercano entre ambas, que disminuyó la espesura de la barrera transcultural, ha devenido en un proceso de intercambio de elementos propios y foráneos: el curandero peruano ha brindado a la medicina científica un vasto conocimiento en plantas medicinales y métodos terapéuticos empíricos en base a los cuales se crearon terapias científicamente orientadas; mientras que la medicina científica también ha ido enriqueciendo el bagaje profesional del curandero .

El Perú es un territorio multicultural, en el cual coexisten y son reconocidas diversas culturas: las indígenas originarias y sus derivadas y la cultura hegemónica heredada de occidente. Sin embargo, en esta coexistencia y a pesar del enriquecimiento bidireccional mencionado, las culturas indígenas han estado siempre subyugadas, dominadas o aisladas en territorios recónditos .

La interculturalidad en salud se presenta como una opción para mejorar el panorama; en la cual cada cultura, manteniendo su identidad, pueda aceptar y adoptar paradigmas no propios para la óptima atención de salud de cualquier individuo en nuestro país. Esto, idealmente, se traduciría en un clima de inclusividad, integralidad y complementación tan necesario para afrontar la problemática que padece nuestro sistema de salud .

En conclusión, ambas medicinas comparten una misma naturaleza en lo esencial y las diferencias surgirían, sencillamente, debido a la coyuntura en la que se desenvuelve cada una. Como escribió el Doctor Fernando Cabieses, “[…] la diferencia esencial entre la medicina tradicional y la medicina académica no es una diferencia entre un enfoque científico racional y un conocimiento empírico, sino un problema de dos ideologías diferentes.” , ambas deben aprender a convivir para superar los obstáculos que supone esta aparente, más no absoluta dicotomía.

Es importante este respeto mutuo, de tal manera que podamos entablar un diálogo intercultural, encontrando los puntos de encuentro o de articulación que puedan conducirnos a mejorar los niveles de salud de nuestra población.

 

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

1. Cabieses F. Apuntes de Medicina Tradicional: la racionalización de lo irracional. 1993 2a ed. Lima: Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología; 1993.

2. Reyna OGP. Medicinas Alternativas y Complementarias. Rev Soc Peru Med Interna. 2001;14(2):62-65.

3. Seguín C. Medicinas tradicionales y Medicina Folclórica. Lima: Fondo Editorial del Banco Central de Reserva del Perú; 1988.

4. Cabieses F. Conferencia: Neurobiología del misticismo. Academia Nacional de Medicina - Anales. 2005. p. 11-22.

5. Estrella E. Biodiversidad y Salud en las poblaciones indígenas de la Amazonía. Lima: Tratado de Cooperación Amazónica, Secretaría Pro Tempore; 1995.

6. Salaverry O. Interculturalidad en salud. Rev Peru Med Exp Salud Publica. 2010; 27(1):80-93.

7. Knipper M. Más allá de lo indígena: salud e interculturalidad a nivel global. Rev Peru Med Exp Salud Pública. 2010 Mar; 27(1):94-101.

 

CORRESPONDENCIA

Reneé Pereyra Elías

renee.pereyra.elias@gmail.com