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Letras (Lima)

versión impresa ISSN 0378-4878versión On-line ISSN 2071-5072

Letras vol.94 no.139 Lima ene./jun. 2023  Epub 29-Jun-2023

http://dx.doi.org/10.30920/letras.94.139.6 

Estudios

Dequeísmo y queísmo en los estudiantes de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos de Lima Perú

Dequeísmo and queísmo in the students of the Faculty of Letters and Human Sciences of the Universidad Nacional Mayor de San Marcos of Lima Peru

1 Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Lima, Perú . mirella.robles@unmsm.edu.pe

2 Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Lima, Perú. edgar.yalta@unmsm.edu.pe

3 Universidad Nacional Mayor de San Marcos, Lima, Perú. mlovonc@unmsm.edu.pe

RESUMEN

Los estudios del queísmo y dequeísmo registran la evidencia de estas formas en contextos de educación superior; es decir, en ambientes donde se asume que predomina el uso de la lengua estándar. En esta línea, se encuentran investigaciones realizadas en espacios como la universidad. Estos fenómenos, que corresponden a usos no-estándares, se emplean incluso en alumnos de Humanidades o Letras. El objetivo de la investigación es describir el uso extendido de estas formas lingüísticas en los estudiantes de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas (FLCH) de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) de Lima-Perú, apoyándonos en dos variables académicas: cursos de la especialidad académica universitaria y tiempo en la especialidad académica universitaria. Metodológicamente, se encuesta a 40 estudiantes de las escuelas de la FLCH. Esta muestra comprende alumnos que ingresaron a estudiar entre los años 2016 y 2020. Los resultados del trabajo muestran que estos fenómenos del lenguaje se evidencian en un contexto formal, como es la FLCH de la UNMSM, con mayor ocurrencia en el queísmo y que la variable cursos de la especialidad académica universitaria es la más influyente.

Palabras clave: Dequeísmo; Queísmo; Universidad; Lengua estándar; Español del Perú

ABSTRACT

Studies of queísmo and dequeísmo record evidence of these forms in higher education contexts; that is, in environments where it is assumed that the use of the standard language predominates. Along these lines, research has been carried out in spaces such as universities. These phenomena, which correspond to non-standard uses, are even used by students of Humanities or Literature. The objective of this research is to describe the extended use of these linguistic forms in students of the Faculty of Letters and Human Sciences (FLCH) of the Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) in Lima-Peru, using two academic variables: courses in the university academic specialty and time in the university academic specialty. Methodologically, 40 students from FLCH schools were surveyed. This sample comprises students who entered to study between the years 2016 and 2020. The results of the work show that these language phenomena are evidenced in a formal context, as is the FLCH of the UNMSM, with greater occurrence in queísmo and that the variable courses in the university academic specialty is the most influential.

Keywords: Dequeísmo; Queísmo; University; Standard Language; Peruvian Spanish

1. Introducción

Los fenómenos del lenguaje conocidos como queísmo y dequeísmo son usos extendidos en el habla castellana, sobre todo, el queísmo frente del dequeísmo (Gómez, 1991). De tal manera, en América se registran estas formas en México (Arjona, 1978; 1979); Argentina (Del Valle Rodás, 1996-1997); Chile (DeMello, 1995; Prieto, 1995-1996; Rabanales, 2005; San Martín, 2015); Venezuela (Bentivoglio y Galué, 1998-1999; Guirado, 2009); Perú (Mc Lauchlan, 1982; Escobar, 2009); Costa Rica (Martínez-Sequeira, 2000); Cuba (Ortega, 2019) y Puerto Rico (Dietrick, 1995).

La ocurrencia de estos fenómenos ha sido abordada desde diferentes perspectivas, desde la psicolingüística, el discurso y la sociolingüística. Respecto a esta última corriente, existe una gran variedad de estudios (Almeida, 2009; Bentivoglio y Galué, 1998-1999; Guirado, 2009; Rabanales, 2005; San Martín, 2015), en los que se considera el factor social como causante de estos fenómenos lingüísticos. Así, se han estudiado como variables sociales los factores sexo, edad y nivel socioeconómico, y, en estudios delimitados al ámbito académico, se han analizado variables de este tipo adaptadas a este contexto, tales como la variable cursos (Millán, 1999-2000) o profesión (Ortega, 2019).

En la investigación de Alberto Millán (1999-2000), por ejemplo, se evidencian los usos queístas y dequeístas entre los estudiantes de la Facultad de Sevilla. Este hecho permite comprender que estas estructuras no-estándares se hallan también en el contexto formal universitario. El autor se apoya en la variable académica cursos, los cuales son equivalentes a un nivel o grado diferente. Respecto a los resultados, esta variable fue significativa, debido a que los estudiantes de los cinco cursos evidencian una tendencia "descendente de aciertos que se inicia a partir del 5.o curso" (p. 514), excepto los estudiantes del curso 1, en quienes la lógica no se cumple "respecto a los cursos 3o y 2o, aunque sí respecto al 4o y 5º" (p. 514). De esta manera, el autor indica que es lógico que el alumnado mejore sus expresiones conforme avanza de nivel. Además, es necesario precisar que los datos fueron obtenidos a través de la aplicación de un cuestionario que responde al registro escrito. En el presente artículo, a diferencia de Millán, se estudian estas construcciones (de que y que) en contextos lingüísticos aislados; asimismo, se considera este tipo de variable "cursos de la especialidad".

Respecto a los estudios previos sobre estos fenómenos lingüísticos, se encuentra el estudio de Nayara Ortega (2019). La autora presenta los siguientes objetivos: identificar los contextos en los que se manifiestan casos dequeístas y queístas en el habla culta de La Habana; comprobar la correlación de las variables edad y sexo relacionadas con el dequeísmo y queísmo; y analizar la correlación de la variable profesión con el comportamiento del dequeísmo. Para ello recogió cuarenta y cinco entrevistas, tomando en cuenta que cada uno de los entrevistados fueran graduados universitarios para considerarlos como hablantes cultos. Finalmente, el estudio concluye que los entrevistados presentaban queísmos y dequeísmos, y los participantes resultaron ser más queístas que dequeístas con mayor incidencia en los jóvenes; además, no existieron diferencias en relación con el sexo. Por otro lado, respecto a la profesión, la autora señala que los licenciados en Letras tienen una mayor conciencia lingüística a la hora de utilizar las estructuras de que y que, ya que no registraron usos dequeístas y solo pocos casos queístas. En esta línea, es necesario advertir que la autora relaciona el grado de conciencia lingüística con los cursos de "redacción y composición de textos" y de "gramática española", al igual que con el conocimiento de la "norma" (la autopreparación personal). Esto último es importante porque Ortega no concibe "norma" en sentido prescriptivo, sino como el "conjunto de las variantes más usuales dentro de una comunidad de hablantes desde el punto de vista cuantitativo" (2019, p. 256). En tal sentido, en la presente investigación adoptamos esta perspectiva descriptiva para que a partir de dicho concepto se pueda contrastar los usos lingüísticos de los estudiantes universitarios.

Asimismo, existen otros estudios que se aplican en otras regiones de habla hispana. Por ejemplo, el análisis de Ambrosio Rabanales (2005), quien aborda un corpus representativo de estos fenómenos en el habla culta de Santiago de Chile. El autor concluye que estos usos estarían evidenciando una pugna entre una forma conservadora (que) y una forma innovadora (de que), en cuanto al dequeísmo, y entre una forma conservadora (de que) y una forma innovadora (que), en cuanto al queísmo; es decir, nuevamente, se evidencian estos usos no-estándares en un contexto formal. Finalmente, también es importante rescatar el estudio de Jessica Mc Lauchlan (1982), el cual se aplicó en el habla culta de Lima con el objetivo de establecer la frecuencia de uso de estos fenómenos del lenguaje. La autora concluye que los hablantes presentan estos fenómenos lingüísticos en su registro y preponderan los usos queístas. Si bien es cierto que estas dos últimas investigaciones no atribuyen valor a los factores sociales, sí evidencian el uso extendido de estas estructuras lingüísticas a nivel del habla formal, pues la muestra en ambos casos está conformada por profesionales. Cabe recalcar que los dos investigadores utilizan valores porcentuales al presentar los datos obtenidos en sus trabajos.

En la presente investigación describimos el uso de estas construcciones lingüísticas en la comunidad académica de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas (FLCH) de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos (UNMSM) y consideramos las variables académicas de cursos de la especialidad académica universitaria y tiempo de la misma. De tal manera, planteamos las siguientes hipótesis para el estudio de nuestro grupo objetivo: i) los fenómenos del queísmo y dequeísmo están extendidos en el registro escrito de los estudiantes; ii) la variable cursos de la especialidad académica universitaria influye en los usos del (de) queísmo en el registro escrito entre los estudiantes; y iii) la variable tiempo en la especialidad académica universitaria influye en los usos del (de)queísmo en el registro escrito entre los estudiantes.

Las variables cursos y tiempo de la especialidad académica universitaria se relacionan con el nivel educativo de los estudiantes, tal como se revisó en Millán (1999-2000). Asimismo, de acuerdo con Ortega (2019), estas variables se relacionan con el grado de conciencia lingüística que adquieren los estudiantes en un contexto académico. De tal forma, esta investigación estudia los fenómenos de queísmo y dequeísmo apoyándose de variables académicas. En este sentido, se miden dichas estructuras lingüísticas en contextos formales para registrar si existen o no usos extendidos en el ámbito de la universidad en el lenguaje escrito, de tal manera que la investigación pueda servir como base para estudios próximos sobre el lenguaje académico de los peruanos con énfasis en el sector de las universidades.

Finalmente, el trabajo está estructurado de la siguiente manera: en primer lugar, la introducción, donde se formulan el planteamiento del problema, el objetivo, las hipótesis, la justificación y los antecedentes; luego, se presenta el marco conceptual, donde se expone el apartado de dequeísmo y queísmo y las variables académicas; más adelante, se registra la metodología, donde se evidencia el enfoque de investigación, las variables de estudio, la muestra y el método de recolección de datos; seguidamente, se muestran los resultados, la discusión y, por último, se presentan las conclusiones y las referencias bibliográficas.

2. Marco conceptual

2.1. Dequeísmo y queísmo

El dequeísmo y el queísmo han sido considerados casos censurables por la gramática normativa. Las reglas de escritura y de la oralidad formal rechazan el empleo de formas queístas y dequeístas en contextos académicos, al considerar que hay ciertos usos no admisibles en la lengua o variedad estándar, los cuales son calificados de agramaticales y de inaceptables. Para la concepción normativista, se trata de vicios, errores, correcciones, defectos, impedimentos (Pérez y Macías, 2016; Silva, 2019), por lo que constituyen una preocupación para los profesores normativos, quienes según Millán (1992a, p. 86) deberían corregir estos "vicios detectados". No obstante, los estudios sociolingüísticos abordan dichos fenómenos en espacios diferentes de comunicación para evidenciar los usos variados que tienen los hablantes o grupos sociales.

Estos fenómenos lingüísticos el queísmo y el dequeísmoestán determinados por la ausencia o presencia de la preposición de, aunque cada uno se desarrolla en contextos diferentes, por lo que Manuel Almeida (2009) señala que ambos son fenómenos opuestos, pero que se encuentran estrechamente relacionados. Así, dicho autor reconoce que el dequeísmo consiste en insertar la preposición de ante estructuras sintácticas encabezadas por que, cuando la normativa no lo requiere (i. e. "Sospecho que mañana no hay clases "Sospecho de que mañana no hay clases"); mientras que el queísmo, consiste en omitir dicha preposición en contextos donde se exige su presencia (i. e. "Me acuerdo de que estuviste la otra noche "Me acuerdo que estuviste la otra noche"). En esta línea, Bentivoglio y Galué (1998-1999) consideran que los hablantes utilizan la preposición de delante de que, motivados por la fórmula canónica "de que" de los verbos pronominales en español. De tal manera, el fenómeno del dequeísmo se atribuye a la ultracorrección o a la inseguridad lingüística por parte de los hablantes que, en consecuencia, también lo utilizan en construcciones con verbos no pronominales.

Partiendo de ello, Leonardo Gómez (1991) expone y ejemplifica las estructuras más frecuentes en las que aparecen ambos fenómenos, como se ve a continuación. En primer lugar, respecto al dequeísmo, el autor reconoce las siguientes manifestaciones: en función de complemento directo (i. e. "Opino de que no tiene razón"); en función de sujeto: con verbos no copulativos o locuciones verbales (i. e. "Resulta de que no lo sabía"), verbos copulativos (i. e. "Es probable de que llueva"), pasivas reflejas (i. e. "Se dice [...] de que va a haber nuevo director") y verbos con doble pronominal (i. e. "Se nos olvidó de que iban a venir"); en función de atributo con un sustantivo como núcleo del sujeto (i. e. "La idea es de que todos debemos colaborar"); en locuciones conjuntivas (i. e. "A no ser de que"); con el verbo pensar (i. e. "Pensar de que") y en confusión entre preposiciones (i. e. "Quedó de que me lo diría"). En segundo lugar, respecto al queísmo, Gómez (1991) reconoce que este fenómeno puede aparecer ante una conjunción que o un relativo que. En esta línea, el autor señala que ante el que conjuntivo, el queísmo aparece en las siguientes estructuras: en cláusulas con función de suplemento de un verbo o de una locución verbal (i. e. "Me enteré que me habían suspendido"), en función adyacente de un adjetivo (i. e. "Estoy seguro que me lo dijo") y en función adyacente de un sustantivo (i. e. "Tengo la impresión que va a llover"); mientras que ante un que relativo, el queísmo aparece en las siguientes estructuras: en cláusulas enfáticas (i. e. "Por eso fue que no te lo dije"), en cláusulas con función de complemento indirecto (i. e. "La chica que (le) doy clase es muy agradable"), en cláusulas explicativas y/o apositivas (i. e. "Con esa chica, que salgo, lo paso bien") y en cláusulas donde la preposición rige un pronombre tónico o un nombre (i. e. "Es una casa que en ella habitaba un fantasma").

La presente investigación, en la búsqueda por desarrollar un estudio descriptivo, recoge los alcances de Gómez (1991), junto con los de Bentivoglio y Galué (1998-1999) sobre el queísmo y el dequeísmo.

Primero, adaptamos la clasificación de Gómez sobre los usos del (de)queísmo en los distintos contextos que plantea. Asimismo, respecto a Bentivoglio y Galué, recogemos la alternancia de los valores de que y que, considerando como factores influenciables los relacionados con el grado de conciencia lingüística. En esta línea, encaminamos la investigación al contexto académico y nos enfocamos en el análisis de los usos de los universitarios, ya que los estudiantes son considerados como uno de los grupos académicos que presentan mayor manejo de la lengua estándar, por el hecho de estar inmersos en un área educativa; por lo tanto, son más conscientes del uso de estas formas lingüísticas y tienen tendencia a desarrollar y recibir mecanismos de aprendizaje que les posibilita utilizar las formas más comunes en el ámbito del registro formal. Estos mecanismos pueden ser el fenómeno de ultracorrección o, por otra parte, las variables relacionadas con lo académico que intervienen en estos usos lingüísticos.

Así, el espacio donde se desarrolla la investigación responde a un área educativa de nivel superior, donde es habitual el uso formal de la lengua. Sin embargo, investigaciones como la de Millán (1999-2000) y Ortega (2019) ponen en evidencia que los contextos educativos son espacios flexibles donde convergen variedades estándares y no-estándares; incluso, estas últimas se perciben como formas innovadoras, según Rabanales (2005). En relación con ello, Zavala y Córdova (2010), al analizar los discursos que emiten estudiantes universitarios del Perú, reconocen en ellos que la escritura académica, y, en general, el lenguaje académico, es más una cuestión de identidad cultural y social, en lugar de una mera competencia lingüística. Según las autoras, los estudiantes pueden llegar a identificarse con la literacidad que se aprende y se privilegia, sin dejar los usos lingüísticos autogenerados que no son aceptables en los contextos académicos tradicionales, pero que están presentes y pueden servir de base para el aprendizaje de otros usos más aceptables, pues los universitarios no solo emplean la variedad académica estándar, sino también las no-estándares y propias, dentro de la universidad. Dichos usos, en términos sociales, puede traer en los estudiantes consecuencias de discriminación lingüística, al asumir que los universitarios que emplean formas de hablar o escribir no prestigiosas son sujetos incompletos, inacabados o poco inteligentes (Zavala y Córdova, 2010). Ello suele ocurrir con los casos queístas y dequeístas, dado que son usos censurables por la normativa lingüística y su empleo puede generar burlas o rechazos hacia el escribiente o hablante que los produjo.

2.2. Variables académicas

Las variables académicas son aquellas que permiten medir aspectos relacionados con el estudiante en un contexto formal, donde también interviene el nivel de educación o el conocimiento que posee el estudiante universitario según el grado y las materias que esté cursando. Este tipo de variables presentan características particulares y muy bien definidas. Ocaña (2011) diferencia las variables académicas de las variables pedagógicas, ya que las últimas tienden a abarcar lo externo a la práctica del docente: esfuerzo del alumno y la política académica de la institución. Es decir, las variables académicas son las que se relacionan con el rendimiento académico, los cursos de la especialidad, el esfuerzo del estudiante o la malla curricular que sigue.

Yolvi Ocaña (2011) agrega que existe un amplio conjunto de variables académicas en el nivel universitario que suelen ser consideradas para la investigación. La primera de ellas son las características académicas del colegio de procedencia. Respecto a ello, agrega que es importante conocer el tipo de colegio de procedencia para observar si hay alguna influencia, las cuales pueden ser las siguientes: el financiamiento, la admisión de estudiantes según su sexo, la evaluación de ingreso de sus alumnos, la cantidad de estudiantes, el acompañamiento, los niveles académicos, la cantidad de horas y si es bilingüe. Además, la autora también señala la importancia de otras variables académicas como el rendimiento escolar, el examen de admisión, la vocación del estudiante, el esfuerzo, el efecto de las cargas académicas y laborales, así como el rendimiento previo en cursos obligatorios y las facilidades académicas.

En esta investigación, las variables académicas que permiten conocer los usos de los estudiantes de la FLCH de la UNMSM son las siguientes: i) cursos de la especialidad académica universitaria y ii) tiempo en la especialidad académica universitaria. Estas variables desarrollan la implicancia que tienen los cursos y el tiempo en la especialización en los usos lingüísticos.

La variable cursos de la especialidad académica se ha estudiado en otros ámbitos, pero no en el país; igualmente, respecto al tiempo en la especialidad académica, no se ha evaluado su incidencia, a pesar de que ambas tienen que ver con la etapa académica estudiantil. Su selección responde a términos descriptivos, más que prescriptivos. Al escogerlas no se quiere formular un enfoque más normativo al estudio; por el contrario, como señalan los estudios mencionados, el ámbito académico puede ilustrar casos descriptivos de usos lingüísticos espontáneos o naturales, aun cuando el estudiante se encuentre en un contexto formal donde se promueve la variedad estándar. Estas variables se detallan a continuación.

2.2.1. Cursos de la especialidad académica universitaria

Los cursos de la especialidad académica universitaria son las materias académicas que brinda una facultad a los estudiantes matriculados, con la finalidad de que adquieran conocimiento instructivo sobre el área que se imparte. Los cursos que tratan temas de lenguaje son aquellos de normativa o gramática, redacción, oralidad, comprensión de lectura, comprensión e interpretación de textos. Las universidades ofrecen en sus mallas curriculares materiales sobre el uso estándar de la lengua nacional. Las especialidades humanísticas en el Perú presentan más cursos lingüísticos obligatorios que las especialidades de ciencias. Su finalidad es que los estudiantes mejoren sus competencias lingüísticas y comunicativas en la variedad académica formal.

2.2.2. Tiempo en la especialidad académica universitaria

El tiempo en la especialidad académica universitaria es el período académico que le toma a un estudiante universitarioculminarsu especialidad.Cadaestudiante lleva sus materias o cursos en dos semestres, en el caso de que su especialidad académica siga una malla curricular de carácter semestral, a no ser que se trate de cursos anuales, en el caso de que su especialidad siga una malla curricular de carácter anual. Las especialidades de pregrado en el país duran cinco años y los estudiantes llevan diez semestres. Un alumno regular estudia en tal período a no ser que se retrase y se amplíe su permanencia en la universidad.

En la sección de metodología se relaciona cada variable con los probables resultados.

3. Metodología

3.1. Enfoque de investigación

El enfoque de investigación aplicado es de tipo cuantitativo, cuyo alcance de estudio es descriptivo. En tal sentido, como señalan Hernández-Sampieri y Mendoza (2018), se busca mostrar los sucesos o fenómenos objeto de estudio a detalle; de esa manera, se mide o recoge información, ya sea de manera conjunta o independiente, sobre las variables involucradas.

3.2. Variables de estudio

La variable dependiente que se estudia comprende la alternancia de dos valores o variantes que ~ de que; es decir, aquella que varía por la presencia o ausencia de la preposición de delante de la conjunción subordinante que. Por otro lado, las variables independientes extralingüísticas son las variables académicas, considerando el contexto académico donde se desarrolla la investigación.

En esta investigación, la variable "cursos de la especialidad académica universitaria" está relacionada con la existencia o no de algún curso de redacción o normativa que los estudiantes de las diferentes especialidades llevan en su plan de estudio. Por tal motivo, se realiza una evaluación previa de dicho plan para cada especialidad de la FLCH de la UNMSM, con la finalidad de categorizar las escuelas en dos grandes grupos: grupo A (GA) y grupo B (GB). Así, el GA está conformado por las especialidades de Bibliotecología y Ciencias de la Información, Comunicación Social, Literatura y Lingüística, ya que estas especialidades tienen dentro de sus planes de estudios cursos relacionados con la redacción y la normativa. Por otro lado, el GB está integrado por las especialidades de Arte, Conservación y Restauración, Danza y Filosofía, dado que estas especialidades no cuentan con cursos relacionados con la redacción y la normativa en sus propios planes de estudios.

En la presente investigación, la variable tiempo en la especialidad académica universitaria refiere al período académico, en este caso relacionado con los cinco ciclos impares de estudio de los encuestados: primero, tercero, quinto, séptimo y noveno (I, III, V, VII y IX), pues el recojo de los datos se realizó en el primer semestre del año académico. Estos ciclos son equivalentes a los años de ingreso 2020, 2019, 2018, 2017 y 2016, respectivamente. La importancia de esta variable radica en que su implicancia permite medir el grado de influencia del período académico que están cursando los estudiantes en relación con la presencia o ausencia de la preposición de ante que; además, al ser estudiantes de Letras existe una mayor preocupación sobre el uso de la lengua estándar, la cual se acrecienta conforme el alumno avanza de grado o ciclo.

3.3. Muestra

La muestra está conformada por un total de cuarenta estudiantes que pertenecen a las especialidades de la FLCH de la UNMSM, en Lima-Perú, que ingresaron a estudiar desde 2016 hasta el año 2020. Dado el período de la pandemia de la COVID-19, se pudo obtener la data de participantes voluntarios a través de la comunicación virtual con un formulario de Google Forms, como se precisa más adelante. A pesar de este período excepcional, fue posible recoger información confiable en torno al estudio. Cabe precisar que investigaciones como la de Ortega (2019) han usado también una muestra de cuarenta a cuarenta y cinco participantes.

Respecto de la selección específica de la universidad, se escogió una pública por la cantidad de estudiantes que convergen desde las distintas partes del país, lo cual permite abordar las diferentes posibilidades en las que se presentan estos fenómenos del lenguaje. Asimismo, en el caso de la facultad, la selección se debe a que los estudiantes emplean y enseñan la variedad estándar en academias, institutos y universidades. Muchos de ellos poseen usos estándares que han legitimado desde su preparación para la universidad, y que legitiman en su desarrollo académico y profesional; después de egresar, por ejemplo, enseñan cursos de gramática y lenguaje, generalmente cursos de normativa y corrección de estilo aludiendo como norma a la variedad estándar1.

Por otro lado, para garantizar la representatividad de la muestra, se distribuye a los estudiantes de manera equitativa a las variables académicas consideradas en el presente estudio y categorizadas, primero, según los años de ingreso 2016-2020, equivalente al tiempo en la especialidad académica universitaria; y según el GA y el GB que constituyen la agrupación por especialidades. De tal forma, se consideran ocho estudiantes por cada año de ingreso (2016, 2017, 2018, 2019 y 2020) y veinte estudiantes por cada grupo (GA y GB). Las características de los estudiantes, según las variables académicas, se aprecian en la Tabla 1. En este sentido, no fue sencillo acceder a una cantidad mayor de participantes. Sin embargo, se procuró encontrar una regularidad en el número de universitarios de Letras.

Tabla 1 Distribución de los estudiantes según las variables académicas cursos y tiempo en la especialidad académica universitaria 

Grupo/N.º estudiantes 2016 2017 2018 2019 2020 Total
Grupo A (GA) 4 4 4 4 4 20
Grupo B (GB) 4 4 4 4 4 20
N.º de estudiantes 8 8 8 8 8 40

Elaboración propia.

3.4. Recolección de datos

Para la recolección de datos se utilizó un cuestionario (véase Anexo) -validado previamente por un grupo de especialistas y aplicado a un grupo de estudiantesdonde se incluyen oraciones enunciativas en diferentes contextos respecto al dequeísmo y al queísmo. El cuestionario fue elaborado y adaptado sobre la base de los contextos presentados por Gómez en su artículo "Reflexiones sobre el ‘dequeísmo y queísmo’ en el español de España" (1991). Los datos se recogieron durante 2020, año de confinamiento por la pandemia de la COVID-19. La técnica se adaptó para ser aplicada de manera virtual a través de la aplicación Google Forms, la cual permite administrar y elaborar encuestas y cuestionarios. Así, la primera sección está destinada a obtener datos demográficos y las variables de estudio; la segunda, a recoger la frecuencia de uso de los casos de queísmo y dequeísmo. Esta segunda sección está compuesta por doce preguntas cerradas con respuestas dicotómicas (es decir, dos posibilidades de respuestas: de que o que), pues resulta más sencillo de codificar: seis incluyen contextos donde las formas canónicas son de que y las otras seis, donde las formas canónicas son que. Esto es, de los 480 casos, 240 incluyen la primera forma y los otros 240 la segunda forma. Ahora bien, en la descripción de los resultados nos apoyamos también de los puntajes y promedios obtenidos a partir de la aplicación del cuestionario. En esta línea, cada respuesta correcta otorga un punto, por lo que el puntaje máximo del cuestionario es doce, mientras que por cada respuesta incorrecta no se otorga ni se descuenta algún punto, pues el fin último es analizar las formas no canónicas. Cabe mencionar que los términos "correcto" e "incorrecto" son criterios normativos que solo se utilizan a fin de sustentar los resultados generales de la investigación descriptiva.

4. Resultados

Para esta sección se presentan y se describen los resultados en tres apartados. En el primero se presenta la frecuencia de uso de los fenómenos lingüísticos queísmo y dequeísmo, los cuales permitirán evidenciar si se trata de fenómenos extendidos en el registro escrito de estudiantes universitarios de la FLCH de la UNMSM; al inicio serán validados en su conjunto (ambos fenómenos) y luego de manera independiente (según casos queístas y según casos dequeístas). En los dos siguientes apartados se presentan los resultados de las variables académicas cursos de la especialidad académica universitaria, cuyos indicadores son GA y GB, y tiempo en la especialidad académica universitaria, cuyos indicadores son 2016, 2017, 2018, 2019 y 2020. Es necesario precisar que las variables académicas serán descritas también en función de los puntajes y promedios de los estudiantes, los cuales permitirán un mejor desarrollo y una mejor síntesis en términos de los usos lingüísticos del queísmo y dequeísmo, en la discusión y en las conclusiones, al igual que una mayor profundización del tema. A continuación, la etiquetación de la muestra según las dos variables académicas.

Tabla 2 Etiquetación de la muestra 

Etiqueta Grupo (G) Año de ingreso
C1 GA 2016
C2 GA 2016
C3 GA 2016
C4 GA 2016
C5 GB 2016
C6 GB 2016
C7 GB 2016
C8 GB 2016
C9 GA 2017
C10 GA 2017
C11 GA 2017
C12 GA 2017
C13 GB 2017
C14 GB 2017
C15 GB 2017
C16 GB 2017
C17 GA 2018
C18 GA 2018
C19 GA 2018
C20 GA 2018
C21 GB 2018
C22 GB 2018
C23 GB 2018
C24 GB 2018
C25 GA 2019
C26 GA 2019
C27 GA 2019
C28 GA 2019
C29 GB 2019
C30 GB 2019
C31 GB 2019
C32 GB 2019
C33 GA 2020
C34 GA 2020
C35 GA 2020
C36 GA 2020
C37 GB 2020
C38 GB 2020
C39 GB 2020
C40 GB 2020

4.1. Frecuencia de uso

De los 480 casos donde las formas variantes son de que y que, los estudiantes tienden a utilizar las formas canónicas; es decir, utilizan de que en contextos donde se requiere dicha preposición y omiten la preposición de en contextos también normados. En la Tabla 3 se muestra que los casos canónicos alcanzan un 75 %, mientras que los casos no canónicos que comprenden los usos queístas y dequeístastotalizan un 25 %. Aunque la diferencia porcentual entre ambos casos es amplia y la cantidad de usos canónicos triplica a la cantidad de usos no canónicos, se percibe la alternancia de las formas no estándares en contextos formales.

Tabla 3 Frecuencia absoluta y porcentual de los casos canónicos y no canónicos 

Casos canónicos N.º / (%) Casos no canónicos N.º / (%) Total N.º / (%)
360 (75) 120 (25) 480 (100)

Ahora bien, basándonos únicamente en los casos no canónicos, la Tabla 4 muestra las cantidades registradas respecto a los usos queístas y dequeístas. Así, se percibe que la variación porcentual (a favor del queísmo) entre ambos usos es incluso mayor a la presentada entre casos canónicos y no canónicos. Esto es, los estudiantes de la FLCH presentan una tendencia queísta evidente, incluso aún más marcada, en términos porcentuales, en comparación con los casos canónicos.

Tabla 4 Frecuencia absoluta y porcentual de los casos queístas y dequeístas en los estudiantes de la FLCH de la UNMSM 

Casos queístas N.º / (%) Casos dequeístas N.º / (%) Total N.º / (%)
104 (86,7) 16 (13,3) 120 (100)

La Figura 1 ilustra la diferencia porcentual entre los usos del queísmo 87 % (104 casos) en comparación con el dequeísmo 13 % (16 casos). Ello permite mostrar que los estudiantes de la FLCH de la UNMSM hacen uso, en el registro escrito, de formas no aceptadas en el contexto académico. Asimismo, aunque la tendencia queísta es evidente, es necesario recalcar que, para esta muestra, la cantidad de casos donde se inserta la preposición de ante cláusulas encabezadas por que en contextos no canónicos son importantes, ya que, a diferencia de la investigación de Ortega (2019), los estudiantes de esta facultad sí presentan casos dequeístas, los cuales son usos censurables en el registro formal, incluso aún más que el queísmo.

Figura 1 Frecuencia de uso porcentual de dequeísmo y queísmo de los estudiantes de la FLCH de la UNMSM 

4.2. Cursos de la especialidad académica universitaria

Los resultados correspondientes a los usos canónicos y no canónicos según la variable "cursos de la especialidad académica universitaria" se encuentran en la Tabla 5. En esta tabla se evidencia que la mayor variación porcentual se encuentra en el GA, a favor de los casos canónicos. Por otro lado, en el GB se evidencia un ascenso de las formas no canónicas cuando comparamos ambos grupos, debido a que la cantidad porcentual de este es casi el doble de la cantidad porcentual del GA. Sin embargo, cabe recalcar que para ambos grupos los casos canónicos son mayores a los casos no canónicos.

Tabla 5 Frecuencia absoluta y porcentual de los usos canónicos y no canónicos según la variable cursos de la especialidad académica universitaria 

GA N.º / (%) GB N.º / (%)
Casos canónicos 199 (82,9) 161 (67,1)
Casos no canónicos 41 (17,1) 79 (32,9)
Total 240 (100) 240 (100)

Respecto solo a los casos no canónicos, esta variable evidencia una variación en los usos acerca del queísmo y del dequeísmo, tanto en el GA como en el GB. En la Tabla 6 se percibe que el GA hace uso, con un 90,2 %, de casos queístas y, con un 9,8 %, de casos dequeístas; por otro lado, el GB hace uso, con un 84,8 %, de casos queístas y, con un 15,2 %, de casos dequeístas. Cabe recalcar que el GA tiende a utilizar más la variable queísta, mientras que el GB propende a utilizar más la variable dequeísta al comparar ambos grupos, según cada uno de los casos, en términos porcentuales. Asimismo, en su conjunto, el GB hace uso, en mayor cantidad, de ambos fenómenos lingüísticos, con un total de 79 casos, los cuales representan un 66 % del total de casos encontrados.

Tabla 6 Frecuencia absoluta y porcentual de los casos queístas y dequeístas según la variable cursos de la especialidad académica universitaria 

GA N.º / (%) GB N.º / (%)
Casos queístas 37 (90,2) 67 (84,8)
Casos dequeístas 4 (9,8) 12 (15,2)
Total 41 (100) 79 (100)

Ahora bien, como se muestra en la Figura 2, la mayor variación porcentual entre casos queístas y dequeístas se percibe en el GA. Respecto al GB esta diferencia porcentual se reduce -es decir, los estudiantes evidencian una mayor variación o alternancia entre ambas formas de que y que en contextos no canónicos-; en esta línea, aumentan los casos dequeístas, incluso, la variación porcentual de casos dequeístas entre el GA y el GB es mayor a la variación porcentual de casos queístas entre ambos grupos. Asimismo, para ambos grupos, la cantidad porcentual de casos queístas es alta, razón por la cual se podría postular el uso extendido del queísmo en el registro escrito de los estudiantes de la FLCH de la UNMSM. Por otro lado, con respecto a la existencia de casos dequeístas -fenómeno censurable en el registro formal y del cual reducida o nula frecuencia de uso se obtiene en otras investigaciones con muestras académicas-, para el ámbito de la FLCH de la UNMSM se muestra un uso "innovador" -en términos de Rabanales (2005)respecto al uso del dequeísmo. Además, es menester añadir que estos usos están influenciados por los cursos de lengua y redacción que llevan los estudiantes, pues son las especialidades del GB quienes evidencian más esta tendencia innovadora.

Figura 2 Frecuencia de uso porcentual de dequeísmo y queísmo de los estudiantes de la FLCH de la UNMSM, según la variable cursos de la especialidad académica universitaria 

Para una mayor comprensión sobre la actuación de esta variable académica, a continuación se describe su implicancia a través de los puntajes máximos que se obtuvieron en cada especialidad, de tal forma que se pueda evaluar la influencia de los cursos que registran estas según el plan de estudios que maneja dicha universidad y, específicamente, la Facultad de Letras. Las especialidades del GA consiguieron los puntajes más altos respecto a los usos de que y que en contextos canónicos: Bibliotecología y Ciencias de la Información (12), Comunicación Social (11), Lingüística (11) y Literatura (11). Por otro lado, en las especialidades del GB los puntajes más altos en ambos usos estuvieron entre 9 y 10: Arte (10), Conservación y Restauración (10), Danza (10) y Filosofía (9). Como se observa, se irá formando una tendencia en el sentido de que las especialidades del GA utilizan con mayor frecuencia las formas canónicas en comparación al GB, todo ello considerando los cursos de cada especialidad. A continuación, esto se ejemplifica en la Figura 3.

Figura 3 Puntajes más altos por especialidad de la FLCH de la UNMSM 

También se presentan los promedios de puntaje por especialidad. El promedio más alto lo obtuvieron las especialidades de Lingüística y Bibliotecología y Ciencias de la Información con 10,4 y 10,3, respectivamente; luego, las especialidades de Literatura y Comunicación Social con 9,8 y 9,3, respectivamente; seguidamente, la especialidad de Filosofía con 9 puntos de promedio, las especialidades de Conservación y Restauración y Danza con 8 puntos de promedio y, finalmente, la especialidad de Arte con 7,6 puntos en promedio. De esta manera, respecto al resultado anterior sobre los puntajes máximos, en este apartado se reafirma la tendencia sobre estos usos lingüísticos, ya que en promedio las especialidades del GA vuelven a presentar una tendencia hacia un registro estándar en comparación con el promedio de las especialidades del GB. A continuación, esto se ejemplifica en la Tabla 7.

Tabla 7 Promedio de puntajes de las especialidades de la FLCH de la UNMSM 

Especialidad Promedio
Lingüística 10,4
Bibliotecología y Ciencias de la Información 10,3
Literatura 9,8
Comunicación Social 9,3
Filosofía 9,0

4.3. Tiempo en la especialidad académica universitaria

Los resultados correspondientes a los usos canónicos y no canónicos según la variable "tiempo en la especialidad académica universitaria" se encuentran en la Tabla 8. Allí se evidencia que la cantidad porcentual de casos canónicos supera a los casos no canónicos en todos los indicadores (2016, 2017, 2018, 2019 y 2020). Asimismo, son los estudiantes ingresantes quienes presentan una mayor variación porcentual entre estos usos, en comparación con los estudiantes que están por culminar su carrera. Esto es, los primeros cometen menos usos queístas y dequeístas, mientras que los segundos duplican la cantidad de casos no canónicos (incluso alcanzan el mayor porcentaje de usos no canónicos respecto a los otros años). Luego, se evidencia una variación porcentual descendente del 2017 al 2019, donde las cantidades porcentuales de casos canónicos y no canónicos presentan una ligera diferencia.

Tabla 8 Frecuencia absoluta y porcentual de los usos canónicos y no canónicos según la variable tiempo en la especialidad académica universitaria 

2016 N.º / (%) 2017 N.º / (%) 2018 N.º / (%) 2019 N.º / (%) 2020N.º / (%)
Casos canónicos 62 (64,6) 75 (78,1) 73 (76,0) 70 (72,9) 79 (82,3)
Casos no canónicos 34 (35,4) 21 (21,9) 23 (24,0) 26 (27,1) 17 (17,7)
Total 96 (100) 96 (100) 96 (100) 96 (100) 96 (100)

Ahora bien, respecto a los casos no canónicos, la Tabla 9 indica que los estudiantes que ingresaron a estudiar en 2016 y que están por culminar su especialidad registran un 79,4 % de casos queístas y un 20,6 % de casos dequeístas; los que ingresaron a estudiar en 2017 muestran un 83,3 % de casos queístas y un 16,7 % de casos dequeístas; los que ingresaron a estudiar en 2018 y que se encuentran a mitad de la especialidad indican un 96 % de casos queístas y un 4 % de casos dequeístas; los que ingresaron a estudiar en 2019 registran un 78,9 % de casos queístas y un 21,1 % de casos dequeístas; por último, los que acaban de ingresar a estudiar y están cursando su primer ciclo universitario, todos los casos que registran son queístas y ninguno dequeísta. Así, la frecuencia porcentual de casos queístas, de manera ascendente, por año es la siguiente: 2019, 2016, 2017, 2018 y 2020; por ende, en sentido opuesto, la frecuencia porcentual de casos dequeístas, de manera ascendente, según el año de ingreso es: 2020, 2018, 2017, 2016 y 2019. Formulados de esta forma, los datos no proporcionan una regularidad respecto a los usos de estos fenómenos lingüísticos conforme el alumno avanza de año; sin embargo, si observamos cada indicador de manera independiente existe una tendencia queísta absoluta en aquellos estudiantes que recién inician su ciclo universitario, en comparación con los otros años, donde además de casos queístas se registran casos dequeístas.

Respecto a la variación porcentual entre casos queístas y dequeístas según cada año de ingreso, en la Figura 4 se percibe que la mayor variación porcentual la registran aquellos alumnos que ingresaron a estudiar en 2020; mientras que la menor variación porcentual se muestra en aquellos que ingresaron a estudiar en 2019, pues se evidencia, en estos últimos, la mayor frecuencia porcentual de casos dequeístas. Ahora bien, son los alumnos que ingresaron a estudiar en 2019, seguidos de los que lo hicieron en 2016, quienes evidencian mayor alternancia al usar las formas de que y que en contextos no canónicos. Cabe recalcar que, si bien no se puede generalizar los usos sobre estas formas lingüísticas según cada año de ingreso -ya que se percibe, por ejemplo, usos dequeístas para el año 2019 (estudiantes que se encuentran en su segundo año de estudio) y para el año 2016 (estudiantes en su último año académico)es menester indicar que los estudiantes de los dos últimos años (2016 y 2017), quienes estarían más preocupados por el uso de la lengua estándar, son los más regulares, en el registro escrito, respecto a los usos dequeístas (variante rechazada en el contexto formal). Asimismo, es necesario recalcar que son los estudiantes de estos dos últimos años quienes presentan mayor cantidad de casos queístas y dequeístas, con 58 usos en total.

Tabla 9 Frecuencia absoluta y porcentual de los casos queístas y dequeístas según la variable tiempo en la especialidad académica universitaria 

2016 N.º / (%) 2017 N.º / (%) 2018 N.º / (%) 2019 N.º / (%) 2020N.º / (%)
Casos queístas 27 (79,4) 20 (83,3) 24 (96,0) 15 (78,9) 18 (100)
Casos dequeístas 7 (20,6) 4 (16,7) 1 (4,0) 4 (21,1) 0
Total 34 (100) 24 (100) 25 (100) 19 (100) 18 (100)

Figura 4 Frecuencia de uso porcentual de dequeísmo y queísmo de los estudiantes de la FLCH de la UNMSM, según la variable tiempo en la especialidad académica universitaria 

Finalmente, apoyándonos en la Tabla 2, "Etiquetación de la muestra", si relacionamos ambas variables académicas, según los puntajes obtenidos, se observa que en el GA los puntajes más bajos fueron registrados por estudiantes que llevan 3 o más años de tiempo en la especialidad; estos son C2 y C19. Respecto al puntaje más alto, C17 obtuvo 12 puntos y se encuentra en el tercer año de la especialidad, correspondiente a la Escuela de Bibliotecología y Ciencias de la Información. Igualmente, los otros ocho estudiantes que obtuvieron 11 puntos tienen una característica particular: cuatro de ellos se encuentran en los dos últimos años de la especialidad (años de ingreso 2016 y 2017) y los otros cuatro están en los dos primeros años de la especialidad (años de ingreso 2019 y 2020); además, también es importante resaltar que, de los ocho estudiantes, cinco pertenecen a la especialidad de Lingüística, lo cual se puede explicar debido a la influencia de cursos de redacción avanzada dentro de la malla curricular. Así pues, en este grupo no se observa una tendencia que indique la relevancia del tiempo en la especialidad para reconocer estos casos.

En el GB, los puntajes más bajos fueron obtenidos por estudiantes que llevan mayor tiempo en la especialidad; estos son C7 y C13 con 4 y 5 puntos, respectivamente; ambos estudiantes pertenecen a la especialidad de Arte. Por otro lado, el puntaje más alto fue 10, el cual fue registrado por tres estudiantes, uno de ellos cursa su primer año en la especialidad, este es C39 y pertenece a la carrera de Arte. Además, es importante recalcar que el segundo puntaje más alto fue el más recurrente en este grupo y la mayoría responde a estudiantes que se encuentran a mitad de la especialidad o están iniciando su etapa universitaria. Los otros puntajes fueron 6 y 8 que se distribuyen casi de forma equitativa en todos los estudiantes de este grupo. De esta manera, se puede apreciar que la variable "tiempo en la especialidad académica universitaria" para este grupo influye de manera relativa y, a veces, contradictoria a lo esperado.

La correlación de ambas variables se muestra en la Tabla 10. De manera general, se percibe que para el GA la mayor cantidad de casos queístas y dequeístas responde al siguiente orden descendente, según el año de ingreso: 2016, 2018, 2019, 2017 y 2020. Asimismo, para el GB el orden descendente es el siguiente: 2016, 2017, 2018, 2020 y 2019, cabe subrayar que en los años 2018 y 2020 la cantidad de casos queístas y dequeístas es la misma. Ahora bien, como se mencionó anteriormente y se recalca en esta tabla, el GA tiende a cometer menos casos queístas como dequeístas en comparación al GB; entonces, es menester mencionar algunas particularidades que permiten contrastar con los resultados generales: en los ingresantes del año 2018 el único caso dequeísta que ocurre aparece en el GA; en los ingresantes del año 2019 la cantidad de casos queístas en el GA supera en uno a la cantidad de casos queístas en el GB; por último, en los ingresantes del año 2020 la cantidad de casos dequeístas en ambos grupos es la misma. Esto es, cuando se espera que todos los indicadores amparen los resultados generales, estas particularidades no tan contundentes muestran un ligero cambio.

Tabla 10 Frecuencia absoluta de los casos queístas y dequeístas según la variable cursos y tiempo en la especialidad académica universitaria 

GA GB
  Casos queístas Casosdequeístas Casos queístas Casosdequeístas
2016 11 2 16 5 34
2017 4 1 16 3 24
2018 10 1 14 0 25
2019 8 0 7 4 19
2020 4 0 14 0 18
37 4 67 12
41 79 Total

5. Discusión

Tras la obtención de los resultados notamos una importante ocurrencia del queísmo, en el lenguaje escrito,entrelosestudiantesdelaFLCHdelaUNMSM. Ello ratifica en un primer momento nuestra hipótesis inicial: los fenómenos del queísmo y dequeísmo están extendidos en el registro escrito de los estudiantes de la FLCH de la UNMSM. Este primer resultado reafirma las investigaciones que se han realizado respecto a los resultados de otras investigaciones, que registran el mayor uso del queísmo en el ámbito académico, donde los cursos de la especialidad académica y el tiempo en la especialidad influyen en los estudiantes.

Otros estudios señalan la incidencia de factores académicos en usos queístas. En contraste, Millán (1999-2000) atribuye la mayor frecuencia del queísmo, entre los estudiantes de la Facultad de Filología, al temor de estos en cometer usos dequeístas o al poco conocimiento del fenómeno queísta; además, en un trabajo anterior, el autor señala, sobre la mayor incidencia de casos queístas, que "la causa principal [radica] en que, por ser el fenómeno más directamente opuesto al dequeísmo, el informante, al procurar evitarlo, incurre en él" (Millán, 1992b, p. 165). A partir de ello, los usos queístas, entre los estudiantes de la FLCH, también pueden estar motivados por el rendimiento académico o alguna variable afín, ya que al ser estudiantes de Letras tienen mayor conocimiento sobre la gramática normativa; es decir, conocen muy bien ambos fenómenos por sus aprendizajes en el contexto universitario. Este resultado sugiere que no es el conocimiento del fenómeno dequeísta que los hace ser queístas, sino otras variables académicas más precisas y que podrían sustentar o explicar, incluso, los resultados tan fluctuantes que proporcionan una de nuestras variables académicas planteadas en el presente trabajo: "tiempo en la especialidad". Asimismo, concordamos con Abelardo San Martín (2015) al considerar que la preponderancia de los usos queístas sobre los usos dequeístas se debe al fenómeno de hipercorrección, porque la conciencia del uso incorrecto del dequeísmo tiende a omitir la preposición de cuando no debería suceder. Ello se relaciona con el conocimiento sobre usos normativos, el cual se fundamenta en el mayor grado de conciencia sobre las formas estándares y no-estándares (Labov, 1983; 2001). Todas estas apreciaciones podrían ser sustentadas con otras investigaciones, donde se consideren nuevas y precisas variables académicas, por ejemplo, el rendimiento académico.

Ahora bien, respecto al reducido número de casos dequeístas concordamos con Raymundo Casas (2015), quien considera que esta construcción es más recurrente en jóvenes alejados de los ámbitos educativos; ello se sustenta en los resultados que halla el autor, los cuales indican una nula cantidad de casos dequeístas en los estudiantes que entrevista y mayor recurrencia en jóvenes no ligados a alguna institución educativa. Además, seguimos la línea de Georgina Canet (2012) quien indica que el dequeísmo es un fenómeno recurrente, sobre todo, en la comunicación oral y coloquial; como la consideración de María Santos (2015) que atribuye los casos dequeístas a usos fuera de la norma académica, en comparación con el queísmo que es descriptivamente más socialmente aceptado. Cabe pensar que también hay un mayor temor a cometer casos dequeístas que queístas en la variedad estándar para evitar burlas o llamados de atención, debido a que son casos que los hablantes correctores pueden notar más, en el espacio académico, donde pueden percibirse o ser estereotipados como hablantes defectuosos (Zavala y Córdova, 2010). De tal manera, estas apreciaciones permiten sustentar el reducido uso del dequeísmo, en el lenguaje escrito, por estudiantes de la FLCH de la UNMSM; además, explicar que dichos estudiantes son más conservadores en los usos del dequeísmo e innovadores en los usos del queísmo, y que el conocimiento sobre normatividad de la lengua condiciona, de manera importante, la existencia o no de estos fenómenos lingüísticos. No obstante, es de notar que los dos usos que se estudian aparecen en contextos académicos formales.

En dicha línea, consideramos que los resultados de esta investigación, respecto a la influencia de las variables académicas, resultan importantes, ya que, por ejemplo, la variable "cursos de la especialidad académica universitaria" influye en estos usos lingüísticos. De tal manera que, aunque se trate de una única facultad, Letras y Ciencias Humanas, los cursos de redacción y normativa que llevan los estudiantes de las especialidades que hemos clasificado como GA son imprescindibles para la práctica de un lenguaje estándar. Además, atribuimos estos resultados a lo que Ortega (2019) denomina "conciencia lingüística" y al "grado de preparación del estudiante", pues al tratarse de alumnos de Letras presentan mayores herramientas lingüísticas (cursos, foros, ponencias, etc., donde se imparten conocimientos relacionados con la lengua), sobre todo, las especialidades que pertenecen al GA, las cuales son análogas a las especialidades de Letras, Bibliotecología y Filosofía, que describe dicha autora en su estudio. Además, obtiene resultados similares a los nuestros, respecto a la significativa influencia de los cursos de la especialidad en los usos del (de) queísmo.

Ahora bien, respecto a los puntajes y promedios por especialidad, Millán (1999-2000) concluye que los estudiantes de las especialidades que han llevado con mayor extensión cursos de lengua y literatura fueron los que presentaron la menor cantidad de aciertos respecto a los usos del (de)queísmo. Así de sorprendentes fueron nuestros resultados con respecto al "tiempo en la especialidad académica universitaria"; los estudiantes de los últimos años, quienes suponíamos manejaban mayor conocimiento con respecto al uso de la variedad estándar, fueron los que obtuvieron los menores puntajes en el cuestionario. Sin embargo, la mayoría de ellos corresponde a estudiantes del GB; es decir, quienes no tienen en su plan de estudios cursos de redacción o normativa. Uno de los resultados que apoya la preponderancia de los cursos de especialidad es que el promedio de los mayores puntajes fue obtenido por estudiantes de la especialidad de Lingüística, que llevan como cursos imprescindibles los relacionados con lengua, normativa y redacción, en comparación con las otras especialidades. Todas estas observaciones deben ser evaluadas, nuevamente, en otras investigaciones, donde se prepondera la influencia de las variables académicas, ya que, Millán (1999-2000) -cuya muestra en su investigación estuvo conformada por estudiantes matriculados en la Facultad de Filología, período académico 1991-1992atribuye su resultado a la redacción de los libros antiguos, en su lengua, donde era muy frecuente omitir la preposición de, o al poco interés de los estudiantes por matricularse a un curso sobre aprendizaje de una segunda lengua considerada como insignificante para ellos. Esto puede explicar por qué la variable "tiempo en la especialidad académica universitaria" no es contundente. Todo ello nos sugiere que aun cuando los estudiantes permanezcan estudiando o matriculados en diversos ciclos, presentan usos queístas porque evaden los cursos de gramática española, especialmente los que egresan en contraste con estudiantes de ciclos menores, o se guían de textos antiguos con usos queístas.

6. Conclusiones

La presencia de los fenómenos del queísmo y dequeísmo recogidos en contextos escritos aislados por parte de los estudiantes de la FLCH de la UNMSM nos indica una tendencia innovadora, citando a Rabanales (2005), al usar la forma no canónica que, en contextos donde la lengua estándar demanda de que. Asimismo, se produce una tendencia sobre los usos del (de)queísmo por parte de estudiantes que están cursando los últimos años de especialidad; de manera más evidente, esta tendencia ocurre en los estudiantes que pertenecen al GB. Hemos notado que, si bien es cierto, los estudiantes conocen ambos fenómenos, la diferencia en que se imparten los cursos, por especialidad académica, sobre los usos de la variedad estándar, motiva que los estudiantes del GB sean los más recurrentes en los usos no canónicos.

En la primera hipótesis se formula que los fenómenos del queísmo y dequeísmo están extendidos en el registro escrito de los estudiantes de la FLCH de la UNMSM. Esta primera aserción se cumple de manera relativa en la investigación, ya que los estudiantes de la FLCH de la UNMSM sí presentan ambos usos no estándares de la lengua en el lenguaje escrito, pero el uso extendido se da a favor del queísmo. De esta manera, se evidenció de forma significativa la ocurrencia porcentual de casos queístas en comparación a los casos dequeístas. Así, de los usos registrados del (de)queísmo, el 87 % corresponde a casos queístas. En otras palabras, los estudiantes de la FLCH de la UNMSM tienden a evitar la estructura de que y preponderar el uso de la forma innovadora que; asimismo, evitar el dequeísmo y preponderar el uso de la forma conservadora que. Lo último también se sustenta en que al ser estudiantes de Letras tienen mayor conciencia lingüística, con respecto a la elección de estas formas lingüísticas.

La segunda hipótesis que se plantea indica que la variable "cursos de la especialidad académica universitaria" influye en los usos del (de)queísmo en el registro escrito, entre los estudiantes de la FLCH de la UNMSM. Esta aserción se cumple en la investigación en los estudiantes del GA, quienes registran menos frecuencia en el uso de estas formas lingüísticas en comparación a los estudiantes del GB que presenta un 66 % del total de casos registrados de estos fenómenos lingüísticos. En dicha línea, cabe precisar que los estudiantes que evidenciaron los puntajes más altos en el cuestionario (12, 11 y 10 puntos) pertenecen a las especialidades del GA. Asimismo, en términos porcentuales, el GA presenta mayor recurrencia de casos queístas (uso mayormente aceptado en la lengua formal), mientras que el GB presenta mayor recurrencia de casos dequeístas (uso rechazado en el registro formal). Esto demuestra que la variable "cursos de la especialidad" tiene relevancia en la investigación, debido a que los alumnos que llevan cursos de redacción y normativa, como los del GA, son menos frecuentes en el uso de estas formas lingüísticas.

La tercera hipótesis que se plantea indica que la variable "tiempo en la especialidad académica universitaria" influye en los usos del (de)queísmo en el registro escrito, entre los estudiantes de la FLCH de la UNMSM. Esta aserción no se cumple, pues los resultados no permiten establecer tendencias respecto a los usos de estas formas lingüísticas según el año de ingreso. Se parte de la idea de que los estudiantes, durante sus estudios o ciclos, dejarían de cometer usos (de)queístas al estar más preocupados por la gramática normativa y por su ejercicio del campo laboral donde los primeros trabajos son de educación especialmente normativa. Sin embargo, los resultados que conciernen a la variación porcentual entre casos queístas y dequeístas, en los estudiantes que están a punto de culminar su especialidad (2016 y 2017) y los estudiantes que inician su época universitaria (2020), proporcionan pistas sobre una posible regularidad acerca de los usos de estas formas lingüísticas y, especialmente, sobre las formas dequeístas. En esta línea, los ingresantes no registran ningún caso dequeísta, mientras que los alumnos que están a punto de culminar su especialidad registran dos de las cantidades porcentuales más altas sobre el uso de dicho fenómeno. Ello evidencia que el uso está extendido entre los universitarios más allá de la presencia de la variable tiempo en la especialidad académica universitaria.

Los resultados obtenidos en este trabajo pueden servir de base para investigaciones futuras, donde se exploren la extensión de los usos queístas y dequeístas en otras universidades del Perú; de tal manera, que se contraste o reafirme la información brindada en la presente indagación descriptiva. En esta línea, incluso, si se generaliza el uso de este fenómeno lingüístico en el contexto académico, se podría evaluar desde otras perspectivas teóricas. Además, este tipo de investigaciones puede expandirse a otros grados académicos, tal como lo realizó Millán (1992a) al estudiar el habla de los niños del colegio público Anejo de Sevilla respecto a los usos del (de)queísmo y, con otros trabajos (Millán, 1988; 1992b; 1999-2000), para poder completar su proyecto de investigación sobre el habla de los sevillanos, aconsejando que se realicen los estudios desde una perspectiva sociolingüística descriptiva más abarcadora, antes que normativista. Finalmente, debido a las limitaciones metodológicas tomando en consideración el contexto de pandemia por COVID-19 (amplitud de la muestra y la producción de textos escritos en tiempo real), se sugiere estudiar el uso del queísmo y dequeísmo a nivel oral en los estudiantes universitarios, así como en profesores y autoridades académicas, para explorar la extensión de tales usos y su aparición como rasgo de una variación sociolingüística en el ámbito académico profesional peruano. De esta manera, la extensión de dichos fenómenos lingüísticos se validará por una amplia y rigurosa investigación. Otro estudio posterior puede considerar la variable tiempo de preparación preuniversitaria, pues hay estudiantes que se preparan un año o más para lograr el ingreso a la universidad. Durante este período, los estudiantes preuniversitarios fortalecen sus competencias lingüísticas, lo cual puede beneficiarlos con el reconocimiento de los fenómenos del (de)queísmo en sus primeros años de especialidad, ya que, según Sánchez (2006), los cursos de redacción otorgan herramientas importantes en el lenguaje escrito de los estudiantes universitarios.

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Notas

11 Cabe señalar que la Universidad Nacional Mayor de San Marcos es una institución académico-profesional que cuenta con 20 facultades organizadas en cinco áreas académicas: Ciencias de la Salud; Ciencias básicas; Ingenierías; Ciencias económicas y de Gestión; y Humanidades y Ciencias jurídicas y Sociales. Así, el área de Humanidades y Ciencias Jurídicas y Sociales está compuesta por cuatro facultades, entre ellas la Facultad de Letras y Ciencias Humanas. Desde una perspectiva histórica, esta facultad es considerada como la más antigua de la universidad y, como consecuencia, la más antigua de América. Igualmente, la facultad cuenta con las escuelas de Arte, Bibliotecología y Ciencias de la Información, Conservación y Restauración, Comunicación Social, Danza, Filosofía, Lingüística y Literatura que imparten cursos relacionados con la lengua y desde donde se provee profesores de Humanidades para otras facultades para los cursos de lenguaje y redacción. Es la facultad que reúne a los estudiantes de Lingüística, por ejemplo, que llevan cursos de gramática normativa.

Agradecimientos

2Este artículo ha sido elaborado en el marco del grupo de investigación Lenguas y Filosofías del Perú (LFP).

ANEXO

Encuesta sobre el dequeísmo y queísmo en los estudiantes de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos

Datos

1. Edad:

2. Sexo: Femenino/Masculino

3. Lugar de nacimiento:

4. Especialidad/ciclo:

5. Colegio de procedencia: Estatal/Particular/Preuniversitario

Cuestionario

A continuación, se presentan enunciados con espacios en blanco para completar con cualquiera de las dos posibilidades "que" o "de que". Solo se debe colocar una opción.

1. Pienso [que]/[de que] Seinfeld es una buena serie de televisión.

2. Estoy seguro(a) [que]/[de que] mañana vendrá mamá.

3. El entrenador del club dudó [qué]/[de qué] tan viable podría ser la negociación con un jugador de fútbol indisciplinado.

4. Necesito [que]/[de que] al amanecer lleves el carro al mecánico.

5. Los amigos de Juan preguntaron dónde conoció a su enamorada, entonces él recordó [que]/[de que] la conoció en una playa del sur cuando celebraba el Año Nuevo.

6. Me acordé [que]/[de que] era el cumpleaños de mi hermano.

7. Julio se enteró [que]/[de que] su equipo favorito de la NBA no ganó la temporada.

8. Se dice [que]/[de que] va a llover toda el día.

9. El presidente de la República advirtió [que]/[de que] la cifra de contagiados iría en aumento.

10. Tengo la impresión [que]/[de que] -, probablemente, el próximo año continúen las clases virtuales.

11. Estas son las cosas [que]/[de que] me acuerdo.

12. Es difícil [que]/[de que] sepamos cuándo terminará esta crisis.

Recibido: 28 de Diciembre de 2021; Revisado: 05 de Mayo de 2022; Aprobado: 18 de Enero de 2023

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