INTRODUCCIÓN
La enfermería es una carrera científica y humanista, que posee como rol principal asumir la vigilancia de los sujetos en los distintos niveles de prevención y atención en salud, contemplando la interculturalidad de las personas1.
Los enfermeros fundan un alto nivel de satisfacción en los pacientes, que no solo están relacionados con la aplicación de habilidades y capacidades profesionales, esto debido a que la sociedad reconoce a expertos atentos, afectivos, sensibles e interesados, lo cual hace que se diferencie entre bueno y mal enfermero, más allá de su competencia profesional, pero también acrecienta un mayor estrés debido al “trabajo emocional” que implica2.
Ante esto, la formación de enfermería denota elevados grados de expectativas, debido a la complejidad del adiestramiento; asimismo, porque se encuentra regulada por una normatividad ética y se desenvuelve a través de procesos deliberativos de comprensión de los participantes, es decir, juicios basados en la interpretación de la acción educativa desarrollados por docente y alumno3.
Para Levvett-Jones et al., la práctica clínica es la parte fundamental del currículo concerniente a la carrera de enfermería, ya que es el espacio de aplicación de destrezas por los estudiantes sobre la base de sapiencias alcanzadas en la universidad4.
Asimismo, se trata de una práctica social, es decir, de actividad efectuada a partir de las necesidades sociales de cada momento histórico y que se compone y se convierte en la dinámica de las relaciones5.
Por ello, la práctica clínica se planea en instituciones de salud que reúnan las condiciones necesarias para la consecución de los objetivos inscritos en el plan de estudios6.
En este sentido, el docente de práctica clínica es uno de los actores principales de este proceso, pues su propósito es brindar, mediante su conocimiento técnico, las bases necesarias, así como su ayudar con actitud empática al estudiante de enfermería para su desarrollo profesional7.
La práctica clínica, además de ser una capacidad en sí misma, es también la vía para conseguir mayores niveles de competencia clínica a lo largo del tiempo, en base del quehacer diario. Si el alumno se deja llevar por prácticas habituales, poco involucradas, el efecto será una atención insuficiente, sin matices en cuanto a la comprensión clínica y que no ha de girar en función a los requerimientos del paciente y familia; pero, si el estudiante responde de forma sensible e involucrada a las situaciones que encuentre en su práctica, vinculándose emocionalmente, hará que estas se vuelvan casos paradigmáticos almacenados8.
El conocimiento técnico involucra una serie de habilidades prácticas e instrumentales que favorecen la transformación de los conocimientos científicos en acciones que pretendan solucionar determinadas necesidades9.
La actitud empática se refiere a la habilidad para entender las necesidades, emociones y problemas de los demás, situándose en su lugar y, de esta manera, responder correctamente a sus reacciones emocionales. De acuerdo al modelo, la competencia emocional de empatía se consigue cuando se fusiona, a nivel intelectual, la escucha activa, a nivel emocional, la comprensión y, a nivel conductual, la asertividad10.
Asimismo, es una respuesta emocional a los escenarios contingentes de los otros, tanto como una predisposición para actuar de una manera determinada ante ciertos contextos emotivos vividos por otros y, en esa medida, es susceptible de ser aprendida y enseñada11.
Las expectativas son categorías psíquicas que simbolizan la fuerza, el poder y el deseo de los sujetos para adquirir sus propósitos, y metas a nivel personal y/o grupal12.
Una persona puede tener expectativas respecto a un servicio o sobre un profesional concreto, las cuales pueden ser circunstanciales y relativas a un momento en el tiempo13.
Las expectativas se presentan como estándares respecto a lo que debería suceder. En este sentido, tener una expectativa representa esperar algo14.
Por otro lado, la satisfacción es concebida como una respuesta emocional que proviene del juicio cognitivo15.
La satisfacción estudiantil muestra el bienestar que sienten los alumnos por tener cubiertas sus expectativas académicas (prácticas clínicas) como efecto de las actividades que realiza la institución para atender sus necesidades educativas16.
En diferentes trabajos se ha encontrado lo mencionado, por ejemplo, Nebot (2017) demostró que las expectativas de los estudiantes, ante cualquier inicio de prácticas, están delimitadas por la ilusión y la motivación, que contrastan con la indecisión y la inquietud ante lo inédito, más aún en la primera rotación. Las clases de preparación ante las prácticas forjan un alto grado de satisfacción entre los estudiantes, ya que favorecen una primera aproximación al paciente, aunque, el miedo y la inseguridad siguen presentes al inicio de las prácticas17.
Pérez (2017) en su investigación halló una satisfacción global de alta a muy alta en los estudiantes de enfermería respecto a las prácticas simuladas18.
Por su parte, Val (2016) halló que los alumnos muestran una notable satisfacción con las prácticas clínicas en la institución de salud, sobretodo con el interés que muestran los profesionales a cargo de su formación, aunque perciben que los docentes deben aumentar sus saberes sobre el proyecto formativo para direccionar a los educandos19.
Chaina (2015) reveló que la mayoría de estudiantes de enfermería se encuentran medianamente satisfechos con su formación académica disciplinar en lo que respecta a la práctica20.
La teoría aprendida, durante la formación en las aulas universitarias, cobra mayor fuerza a través de la práctica que desarrollan los estudiantes; no obstante, es frecuente observar que existe desmotivación en las actividades prácticas de formación o que no están preparados para asumir alguna actividad hospitalaria, siendo esto una de las mayores inquietudes de las instituciones formadoras y de los docentes, pues es frecuente apreciar que la aplicación de los conocimientos obtenidos en las aulas para el cuidado del paciente y de la familia, el manejo de situaciones reales y el uso de las herramientas disponibles para la mejora de la salud de los pacientes, es ineficiente; por ello se platea el presente trabajo, de tal manera que se pueda conocer la realidad que afrontan los estudiantes de enfermería, las dificultades y las alternativas de solución que conlleven a la correcta realización de las prácticas durante su estancia en el hospital. Además, se realizará un análisis sobre la problemática que sucede al momento que un interno realiza sus prácticas clínicas, para que el personal implicado pueda lograr avances y mejorar las situaciones en favor de la profesión, las instituciones educativas y la salud de las personas.
El objetivo de este artículo es determinar la relación entre las expectativas y la satisfacción sobre el conocimiento técnico y la actitud empática en las prácticas clínicas de estudiantes de enfermería del Hospital de Emergencias Grau Essalud, 2019.
MÉTODOS
Diseño y área de estudio
Fue un estudio de enfoque cuantitativo, tipo observacional y con diseño correlacional.
El área de estudio fue el Hospital de Emergencias Grau Es Salud, el cual se encuentra ubicado en la Av. Grau 351 en el distrito del Cercado de Lima y cuenta con distintas especialidades.
Población y muestra
Se tuvo como población a 110 estudiantes de enfermería que realizaban sus prácticas clínicas en el Hospital de Emergencias Grau, en el período 2019. En cuanto a la muestra, se trabajó con 80 estudiantes de enfermería, teniendo en cuenta un muestreo no probabilístico por conveniencia, dado que algunos no cumplieron los criterios de selección.
Variable e instrumentos
Las variables fueron: expectativas sobre el conocimiento técnico - actitud empática y satisfacción sobre el conocimiento técnico - actitud empática. La técnica fue la encuesta y los instrumentos: una escala de expectativas y otra de satisfacción sobre las prácticas clínicas, las cuales fueron validadas y confiabilizadas, previo a su aplicación.
Las escalas de Expectativas y de Satisfacción sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas, fueron construidas por el investigador en base a antecedentes e información bibliográfica y cada escala se constituyó de 10 ítems que evalúan las expectativas y la satisfacción de los estudiantes de enfermería sobre las prácticas clínicas. Estas escalas están clasificadas en dimensión conocimiento técnico de los docentes (5 ítems) y dimensión actitud empática (5 ítems). Los ítems de estas escalas tienen niveles respuesta tipo Likert y con puntaje que va de 1 a 3 puntos (Siempre = 3, A veces = 2, Nunca = 1). Ambas escalas fueron validadas mediante juicio de expertos por lo que se obtuvo concordancia entre sus apreciaciones; además se confiabilizaron a través de una prueba piloto; siendo muy alta la confiabilidad (alfa de Cronbach = 0.89) para escala de expectativas, y alta la confiabilidad (alfa de Cronbach = 0.75) para escala de satisfacción.
Para categorizar los niveles de expectativas y satisfacción se utilizó la Baremación mediante la fórmula:
K= ((N° de ítems x puntaje mayor)- N° de ítems) ÷ 3)
De esta manera se obtuvo que, tanto para Expectativa como para Satisfacción sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas, era de nivel bajo (10 - 16 puntos), nivel medio (17 - 23 puntos) y nivel alto (24 - 30 puntos). Y para cada una de las dimensiones se consideró como nivel bajo (5 - 8 puntos), nivel medio (9 - 12 puntos) y nivel alto (13 - 15 puntos).
Procedimientos
Se gestionó el permiso para la recolección de datos en la sede Hospitalaria de Emergencias Grau de Essalud, mediante un documento de permiso; luego se aplicó la encuesta a la población objetivo (estudiantes de enfermería) y finalmente se verificó la calidad de los datos recolectados.
Análisis estadísticos
Para el análisis estadístico se usó el programa SPSS versión 25. La estadística descriptiva de variables cualitativas se dio mediante distribución de frecuencias (relativas: % y absolutas: N), y de variables cuantitativas a través de medidas de tendencia central y de dispersión. La estadística inferencial para relacionar Expectativas y satisfacción sobre conocimiento técnico - actitud empática de prácticas clínicas, se utilizó el estadístico no paramétrico, Rho de Spearman, dado que la evaluación fue a través de análisis de datos cuantitativos.
RESULTADOS
En laFigura 1yTabla 1se muestra las características de los 80 estudiantes de enfermería que realizaron sus prácticas clínicas en el Hospital de Emergencias Grau durante el año 2019, cuya edad promedio fue 21.36 años, 75% de sexo femenino y 72.5% solteros.
Caracteristicas generales | N | % | |
---|---|---|---|
Edad | M ± DE (Mín - Máx) | 21.36 ± 2.6 (18 - 29) | |
Estado Civil | Soltero | 58 | 72.5% |
Casado | 6 | 7.5% | |
Divorciado | 2 | 2.5% | |
Separado | 3 | 3.8% | |
Conviviente | 11 | 13.8% |
Las expectativas sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas de los estudiantes de enfermería fueron de nivel alto en 97.5% y 2.5% de nivel medio; y en cuanto a su dimensión conocimiento técnico fue 86.3% de nivel alto y 13.8% de nivel medio; y para la dimensión actitud empática fue 86.3% de nivel alto y 13.8% de nivel medio. (VerTabla 2)
Expectativas sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas y sus dimensiones | N | % | |
---|---|---|---|
Expectativas | Alta | 78 | 97.5% |
Media | 2 | 2.5% | |
Baja | 0 | 0.0% | |
Conocimiento técnico | Alta | 69 | 86.3% |
Media | 11 | 13.8% | |
Baja | 0 | 0.0% | |
Actitud empática | Alta | 69 | 86.3% |
Media | 11 | 13.8% | |
Baja | 0 | 0.0% |
La satisfacción sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas de los estudiantes de enfermería fue de nivel medio en 60% y 40% de nivel alto; y en cuanto a su dimensión conocimiento técnico fue 75% de nivel medio y 22.5% de nivel alto; y para la dimensión actitud empática fue 73.8% de nivel medio y 23.8% de nivel alto. (VerTabla 3)
Satisfacción sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas y sus dimensiones | N | % | |||
---|---|---|---|---|---|
Satisfacción | Alta | 32 | 40.0% | ||
Media | 48 | 60.0% | |||
Baja | 0 | 0.0% | |||
Conocimiento técnico | Alta | 18 | 22.5% | ||
Media | 60 | 75.0% | |||
Baja | 2 | 2.5% | |||
Actitud empática | Alta | 19 | 23.8% | ||
Media | 59 | 73.8% | |||
Baja | 2 | 2.5% |
Por otro lado, en laTabla 4se observa que no hubo relación significativa entre las expectativas y satisfacción sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas de los estudiantes de enfermería (p=0.661). A su vez, se demostró que no existe relación significativa entre la expectativa y la satisfacción en la dimensión conocimiento técnico (p=0.653) y en la dimensión actitud empática (p=0.653) de las prácticas clínicas de los estudiantes de enfermería. (VerTabla 5yTabla 6)
Variable | Satisfacción sobre Conocimiento técnico -científico | |||||
---|---|---|---|---|---|---|
Expectativas sobre Conocimiento técnico | Correlación de Spearman | 0.051 | Sig. | 0.653 | Nº | 80 |
DISCUSIÓN
Es importante destacar que la práctica clínica dirige el camino por donde se podrá alcanzar mejores niveles de competencia clínica en el transcurso del tiempo, en base a la labor diaria. En el caso que el estudiante se deje llevar por prácticas tradicionales, con poco involucramiento, la consecuencia será una atención escasa, sin matices en cuanto a la comprensión clínica y que no gira en función a los requerimientos del paciente y de la familia. Teniendo en cuenta lo atribuido, es fundamental conocer la opinión de los estudiantes de enfermería respecto a las prácticas clínicas con el propósito de saber la situación que se afronta en las rotaciones.
Respecto a los hallazgos del presente artículo, las expectativas de los estudiantes de enfermería sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas obtuvieron un alto nivel (97.5%) con mayor énfasis en aspectos del docente que evalúen y refuercen sus conocimientos y que les permitiera intercambiar opiniones con otros estudiantes, así como la identificación de las necesidades psicosociales de la familia, entre otros. Por su parte, Nebot en su investigación demostró que las expectativas de las estudiantes ante cualquier inicio de prácticas, están delimitadas por la ilusión y la motivación, aunque a veces sienten incertidumbre y preocupación ante lo desconocido, especialmente en la primera rotación17. Esto revela que los alumnos tenían una gran predisposición y estímulo para empezar sus prácticas clínicas y asumir retos que le admitan lograr sus competencias; asimismo esperaban altos estándares pues sus perspectivas eran elevadas.
En cuanto a la satisfacción de los estudiantes de enfermería sobre conocimiento técnico - actitud empática de las prácticas clínicas se obtuvo un nivel medio (60%) a alta (40%), puesto que indicaron que a veces los docentes de práctica clínica fueron cuidadosos en el seguimiento de los casos clínicos o les enseñaron a identificar las necesidades y los cuidados de cada paciente. Estos resultados reflejan el contraste entre lo deseado (expectativas) y lo que llegan a experimentar durante sus prácticas clínicas. Estos resultados difieren del trabajo de Pérez, donde se observó que la satisfacción global de los estudiantes de enfermería de la Facultad de Valladolid respecto a sus prácticas clínicas es alta o muy alta18; mientras que Ruiz et al. en su estudio demostraron que los alumnos de Ciencias de la Salud están muy satisfechos con los conocimientos prácticos y con las competencias adquiridas, manifestando que las prácticas clínicas han favorecido su aprendizaje, al tiempo que expresan una alta satisfacción en la acogida en los centros y la integración en los equipos de trabajo21.
Por otro lado, Chaina halló que los estudiantes de enfermería se encuentran medianamente satisfechos con su formación práctica20. En el estudio de Bustamante se mostró que el 55.2% de los estudiantes tiene una percepción medianamente favorable sobre las prácticas clínicas, el 41.4% tiene una percepción favorable y el 3.4% una percepción desfavorable22.
No hubo relación entre expectativas y satisfacción de los estudiantes de enfermería respecto a conocimiento técnico - actitud empática de sus prácticas clínicas, lo que podría deberse al hecho que ya sabían acerca de las situaciones a afrontar en sus prácticas y que no fue tan influyente en su nivel de satisfacción.