Introducción
Las estructuras monumentales arquitectónicas en el contexto del patrimonio cultural por lo general presentan patologías de origen biótico que muchas veces pasan desapercibidos lo cual implica una intervención en el ámbito de la conservación, por ende en la conservación preventiva (Guillemard, 1992; Herráez & Rodríguez, 2004). En la actualidad hay una tendencia para establecer intervenciones en las que se tiene que considerar además de los factores microclimáticos (humedad, temperatura, iluminación, entre otros), físicos, químicos, etc., el biológico. Los horizontes mediatos de lo biológico implica el deterioro de los mismos sobre los elementos culturales dentro de los grupos taxonómicos implicados.
Esa interacción de agentes bióticos induce a un daño o biodeterioro. En el caso de patrimonio monumental arquitectónico, muchas veces están expuestos a la intemperie y a la acción de diversos organismos capaces de colonizarla y de causar deterioro en igual o mayor grado que los agentes físico-químicos. Para comprender los mecanismos involucrados en este proceso, es necesario considerar la obra arquitectónica como un ecosistema (Rosato, 2008). La estructura arquitectónica actúa como sustrato y/o soporte que muchas veces aporta los elementos base (minerales-nutrientes) que interactúa con los factores externos y los condicionan a una sucesión ecológica a lo largo del tiempo favoreciendo con ello el deterioro progresivo.
Las acciones en el patrimonio cultural durante los procesos de intervención en su conservación también radica en la planificación de estudios de conservación preventiva que representa fundamentalmente una estrategia basada en un método de trabajo sistemático que tiene por objetivo evitar o minimizar el deterioro mediante el seguimiento y control de los riesgos de deterioro que afectan o pueden afectar a un bien cultural (Instituto del Patrimonio Cultural de España, s/f). Uno de esos elementos dentro de la conservación preventiva se basa en los efectos (daño) ocasionados por agentes biológicos, a lo que se le denomina biodeterioro.
Diferentes investigadores han incidido también sobre la necesidad de contemplar los estudios sobre los organismos vivos y sus efectos en el patrimonio inmueble (Lazzarini &Tabasso, 1986; Doehne & Price, 2010; citado por Sameño, 2018).
El biodeterioro fue definido por H. J. Hueck (1965, 1968) como ciertos cambios indeseables en las propiedades de un material causados por la actividad vital de algunos organismos (Sameño & García, 1995). En consecuencia el biodeterioro de la propiedad cultural es el daño físico o químico efectuado por diferentes tipos de organismos en objetos, monumentos o edificios que pertenecen al patrimonio cultural (Videla, 1996). Este deterioro puede ser directo e indirecto, tanto en el plano estético, físico y químico. Condicionado por el impacto en este caso particular por agentes de origen vegetal o botánico.
Sameño (2018) indica que "el biodeterioro o el daño causado en las obras o piezas histórico-artísticas por organismos y microorganismos (plantas superiores, hongos, líquenes, briofitos, algas, cianobacterias…) ha sido estudiado a lo largo de los años, debido a la creciente preocupación por las pérdidas irreparables y de gran valor que pueden ocasionar en el Patrimonio Cultural". Este mismo autor precisa que el biodeterioro que experimentan los distintos materiales que componen los bienes culturales es un fenómeno complejo, todavía bastante desconocido. Investigar sobre los agentes biológicos de deterioro y sobre las principales causas que lo provocan requiere de nuevos estudios que permitan identificar qué alteraciones se producen y qué tratamientos se necesitan. Aunque hay que resaltar la escasez de bibliografía referente a este último tema, existen algunos estudios que se dedican de forma directa analizar las especies de organismos, los materiales que deterioran y el tipo de daño que provocan.
En este sentido, en las construcciones de adobe y arcilla del Complejo Arqueológico (C.A.) Chan Chan, se ha observado algún tipo de biodeterioro causado por vegetales y animales, que aún no ha sido tenido en cuenta. El único trabajo que se conoce al respecto es el estado de biodeterioro por insectos de los muros perimetrales de la ciudadela Tschudi (Gutiérrez & Mora, 2018). Sin embargo, no se conocen estudios científicos de biodeterioro causados por vegetales.
El presente trabajo busca establecer que agentes biológicos en el contexto botánico intervienen y ocasionan biodeterioro directo e indirecto en el patrimonio cultural arquitectónico de arcilla del palacio Nik An (Tschudi), C.A. Chan Chan, Trujillo, La Libertad, Perú entre los años 2014 y 2017.
Material y Métodos
Ubicación geográfica:
El C. A. Chan Chan se encuentra ubicado en el valle Moche, costa norte del Perú (8º06’32.04" S - 79º04’27.91" O y a 25 m.s.n.m.; Provincia de Trujillo, Distrito Huanchaco) en la cuenca baja y margen derecha del río Moche, entre el balneario de Huanchaco y la ciudad de Trujillo.
Aspecto Histórico
Fue la capital del estado Chimú (900 d.C. - 1460 d.C., Intermedio Tardío) y ocupó una extensión de alrededor de 20 km2 de los cuales ahora se conservan unos 14 km2, que incluye: a) Área central o nuclear urbana con 6 km2 y muestra arquitectura de gran escala (intermedia): diez conjuntos amurallados ("ciudadelas"): Chayhuac An o Quixmic An (Chayhuac), Chol An (Rivero), Utzh An (Gran Chimu), Tsuts An (Tello), Ñing An (Velarde), Ñain An (Bandelier), Fochic An (Squier), Xllangchic An (Uhle), Fechech An (Laberinto), Nik An (Tschudi), además numerosas construcciones semi-monumentales, pirámides truncas, espacios cercados, chacras hundidas y caminos; y b) Área marginal más rural con 8 km2 rodeando el área central, comprende conjuntos habitacionales, depósitos, templos de menor escala, cementerios, canales, chacras hundidas, hoyas de cultivo o huachaques/wachaques al sur y SE del área central (Chico, Grande y Gran Huachaque o Pampas de Alejandro), caminos, entre otros (ver Rodríguez et al., 2015).
Metodología:
El estudio estuvo circunscrito al palacio o ciudadela Nik An (Tschudi) del C.A. Chan Chan. Se realizaron recorridos en cinco visitas entre el 2014 y 2017, a fin de efectuar observaciones y recolecciones de vegetales que se encontraron ocasionando biodeterioro en las estructuras patrimoniales.
En el transcurso de las visitas se tomaron 10 puntos de georeferenciación en las zonas de ubicación donde fueron observados los efectos del biodeterioro y recolectados los ejemplares botánicos (Fig. 1 y Tabla 1). Para la toma de muestras se tuvieron en cuenta tanto las criptógamas como las fanerógamas, de estas últimas se consideraron las plantas leñosas y herbáceas. Se tomó en cuenta a las especies que se encontraron en espacios característicos predispuestos por la infestación (colonización) creciendo espontánea y directamente arraigadas a la base o soportadas sobre o entre el material constructivo de las estructuras de adobe y arcilla. También, se consideraron plantas que se encontraron en espacios cercanos a las estructuras patrimoniales que a través del tiempo podrían afectarlas. Para tal efecto se siguió la metodología de García (2016) y Gutiérrez & Noningo (2016) por similaridad de estudios. Para la flora se efectuó el proceso de herborización siguiendo la metodología y técnicas convencionales recomendadas por Rodríguez & Rojas (2006). La toma de datos referidos a las características exomorfológicas, formas de vida, nombres vulgares, hábitat, entre otros se realizó siguiendo a los mismos autores. La determinación taxonómica se efectuó con ayuda de bibliografía especializada, claves taxonómicas dicotómicas basadas en los caracteres exomorfológicos y de hábito (Sagástegui & Leiva, 1993; Rodríguez et al., 2015, 2017). Además por comparación morfológica con los ejemplares existentes en el herbario HUT. La clasificación seguida para la liquenobiota es a Mycobank Database (Mycobank, 2015) las fanerógamas es la de Chase & Reveal (2009) (e.g.: Clase Equisetopsida).
El material botánico recolectado fue depositado en el herbario de la Universidad Nacional de Trujillo (HUT). Adicionalmente se hicieron registros fotográficos de las plantas y del daño al patrimonio en forma descriptiva.
Resultados
Se determinaron doce especies de vegetales que causan biodeterioro al patrimonio cultural que actúa como sustrato para su crecimiento y metabolismo en el palacio Nik An del Complejo Arqueológico Chan Chan, Trujillo, Perú (Tabla 2). Se encuentran distribuidas en 11 familias y 12 géneros; de ellas 2 criptógamas (2 especies liquénicas) y 10 fanerógamas (flora vascular) (5 hierbas, 1 sufrútice, 1 subarbusto, 2 arbustos y 1 árbol).
Todas las especies están produciendo un factor de riesgo en la conservación patrimonial por la falta de mantenimiento y la infestación de las mismas. Producen daños físicos (mecánicos) y químicos. Las fanerógamas son los agentes biodeteriorantes de alto riesgo teniendo en cuenta que la mayoría son perennes (presentan base leñosa) y que la acción mecánica efectuada por las raíces es la más importante. Se recomienda efectuar control manual a manera se conservación preventiva para evitar daños irreversibles.
La Flora responsable del Biodeterioro en el palacio Nik An (Tschudi) del Complejo Arqueológico Chan Chan es:
CRIPTOGAMAS
Familia: Caliciaceae Chevall.
Género: Buellia De Not
Nombre Científico: Buellia babingtonii (Hook. f. & Taylor) I.M. Lamb ex C.W. Dodge
Nombre vulgar: "liquen"
Biodeterioro: líquenes (asociación alga + hongo) costráceos terrícolas que invaden grandes extensiones del sustrato, cubriéndolas de una estructura oscura de aspecto desagradable. Se encuentra en lugares sin mantenimiento. Esta colonización es parte del proceso de sucesión; generalmente asociada a cianobacterias ubícuas y pioneras de la misma. El deterioro es mayormente químico por secreción de ácido oxálico, formando diversos compuestos con el sustrato arcilloso o pétreo. Propagación generalmente por anemocoria de las diásporas. Fig. 2. A-C.
Colección: E. Rodríguez R. et al. 3311a (HUT)
Familia: Roccellaceae Chevall.
Género: Roccella DC.
Nombre Científico: Roccella gracilis Bory
Nombre vulgar: "liquen"
Biodeterioro: Liquen fruticuloso grisáceo con varias ramas y numerosos soredios discoideos. En este caso se comporta como terrícola, cuyo disco de fijación del talo liquénico deteriora mecánicamente las estructuras de soporte. Así mismo, también existe deterioro químico por secreción de ácido liquénico y oxálico, formando diversos compuestos con el sustrato arcilloso o pétreo. Las numerosas poblaciones coadyuvadas con la humedad del medio ambiente imperante, deterioran las estructuras de barro. Propagación generalmente por anemocoria de las diásporas o talos fragmentados. Fig. 2. D-F.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3313a (HUT).
FANEROGAMAS
Familia: Amaranthaceae Juss.
Género: Alternanthera Forssk.
Nombre Científico: Alternanthera halimifolia (Lam.) Standl. ex Pittier
Nombre vulgar: "hierba blanca"
Biodeterioro: Hierba invasora, perenne, decumbente o procumbente, ramificada; abundante sobre suelos y muros abandonados o por falta de mantenimiento. El deterioro es mecánico (físico) a través del crecimiento de raíces que perforan el suelo y gran cobertura de sus ramas bajo las cuales viven numerosos invertebrados; o química, por la acidez de las raíces y por las exudaciones que genera la planta. Asimismo, la humedad imperante del medio ambiente condensada sobre el vegetal, crean microclimas que deterioran las estructuras ya sean paredes, bases o muros de contención del humedal. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 3.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3384a (HUT).
Familia: Asteraceae Bercht. & J. Presl
Género: Baccharis L.
Nombre Científico: Baccharis glutinosa Pers.
Nombre vulgar: "chilco hembra".
Biodeterioro: Planta arbustiva, perenne, erguida o ascendente, ramificada, resinosa. El deterioro es mecánico (físico) a través del crecimiento de raíces que perforan el suelo produciendo rajaduras y ablandamiento del terreno mermando la verticalidad de los cimientos; o química, por la acidez de las mismas y por las resinas producidas típicas de esta especie. Asimismo, la humedad imperante del medio ambiente condensada sobre el vegetal, crean microclimas que deterioran las estructuras ya sean paredes, bases o muros de contención del humedal. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 4.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3382a (HUT).
Familia: Asteraceae Bercht. & J. Presl
Género: Spilanthes Jacq.
Nombre Científico: Spilanthes leiocarpa DC.
Nombre vulgar: "turre macho"
Biodeterioro: Hierba invasora, perenne, estolonífera, ramificada, decumbente-ascendente, cobertora de suelo. El deterioro es mecánico (físico) a través del crecimiento de raíces y la incrustación de estolones, o química, por la acidez de las mismas y diversos exudados o resinas producidas; asimismo, la humedad imperante del medio ambiente condensada sobre el vegetal, crean microclimas que deterioran las estructuras ya sean paredes o muros de contención del humedal. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 5.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3383a (HUT).
Familia: Boraginaceae Juss.
Género: Tiquilia Pers.
Nombre Científico: Tiquilia paronychioides (Phil.) A.T. Richardson
Nombre vulgar: "flor de arena"
Biodeterioro: Herbácea o sufruticosa, postrada; invasora, crece por falta de mantenimiento. El deterioro es mecánico (físico) a través del crecimiento de raíces que horadan las estructuras, o químico, por la acidez de las mismas y diversos exudados. Igualmente, la humedad imperante del medio ambiente condensada sobre el vegetal, crean microclimas que deterioran las estructuras, sobre todo los cimientos (base) de las construcciones y los muros de contención del humedal. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 6.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3395a (HUT).
Familia: Fabaceae Lindl.
Género: Acacia Mill.
Nombre Científico: Acacia macracantha Humb. & Bonpl. ex Willd.
Nombre vulgar: "espino".
Biodeterioro: Árbol erguido, espinoso, raíces profundas. Planta leñosa cerca al monumento histórico, causa daño mecánico como consecuencia de la expansión de sus raíces a fin de obtener agua, en el tiempo si el sistema radicular sigue interactuado puede causar rajaduras a las edificaciones contiguas por debilitamiento de sus cimientos, coadyuvado por el daño químico por la acidificación del medio y la creación de microclimas de humedad variable. Por tratarse de una leguminosa en sus raíces presentan nódulos donde viven organismos fijadores de nitrógeno. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 7.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3395a (HUT).
Familia: Malvaceae Juss.
Género: Waltheria L.
Nombre Científico: Waltheria ovata Cav.
Nombre vulgar: "lucraco"
Biodeterioro: Subarbusto postrado-ascendente que crece como invasora por falta de mantenimiento. El deterioro del patrimonio cultural es mecánico (físico) a través del crecimiento de raíces que se profundizan a fin de obtener agua, produciendo rajaduras y ablandamiento del terreno, debilitando de esta manera los cimientos de los muros; o química, por la acidificación del medio y la excreción de sustancias quelantes (forma complejos con iones pesados) producidas también por las raíces, y por diversos exudados que produce la planta. Asimismo, se comportan como plantas apoyantes sobre las paredes (soporte para crecimiento), cuya humedad imperante del medio ambiente condensada sobre el vegetal, crean microclimas que deterioran las estructuras de barro. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 8.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3319a (HUT).
Familia: Nyctaginaceae Juss.
Género: Cryptocarpus Kunth
Nombre Científico: Cryptocarpus pyriformis Kunth
Nombre vulgar: "chope".
Biodeterioro: Sufrútice, postrado de gran expansión sobre el suelo, escandente o apoyante; abundante en el área de estudio. Tiene como soporte a paredes, muros, etc., en donde produce erosión, crea y mantiene microclimas especialmente de humedad negativos para el soporte, además de horadar el suelo con sus raíces. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 9.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3393a (HUT).
Familia: Rhamnaceae Juss.
Género: Scutia (Comm. ex DC.) Brongn.
Nombre Científico: Scutia spicata (Humb. & Bonpl. ex Willd.) Weberb.
Nombre vulgar: "peal".
Biodeterioro: Arbusto sarmentoso, espinoso, tallos difusamente ramificados. Se encuentra en lugares de escaso mantenimiento. El deterioro es mecánico (físico) a través del crecimiento de raíces produciendo rajaduras de las estructuras, o química, por la acidez de las raíces; asimismo, la humedad imperante del medio ambiente condensada sobre el vegetal con numerosas ramas, crean microclimas que deterioran las estructuras (especialmente las bases de las construcciones) que la soportan debido a su gran cobertura. Fig. 10.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3331a (HUT).
Familia: Verbenaceae J. St.-Hil.
Género: Phyla Lour.
Nombre Científico: Phyla nodiflora (L.) Greene
Nombre vulgar: "turre hembra".
Biodeterioro: Hierba invasora, perenne, rastrera, cobertora; abundante sobre suelos y muros abandonados o por falta de mantenimiento. El deterioro es mecánico (físico) a través del crecimiento de raíces, ubicadas en los tallos radicantes, que perforan el suelo y gran cobertura de sus ramas rastreras largas, bajo las cuales viven numerosos invertebrados; o química, por la acidez de las raíces y por las exudaciones que genera la planta. Asimismo, la humedad imperante del medio ambiente condensada sobre el vegetal, crean microclimas que deterioran las estructuras ya sean paredes, bases o muros de contención del humedal. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 11.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3320 (HUT).
Familia: Poaceae Barnhart
Género: Distichlis Raf.
Nombre Científico: Distichlis spicata (L.) Greene
Nombre vulgar: "grama salada".
Biodeterioro: Hierba invasora, perenne, rizomatosa. El deterioro es mecánico (físico) a través del crecimiento de los rizomas, los cuales se incrustan en las estructuras ocasionando fracturas o rajaduras de las paredes o desplazamientos de estructuras líticas de los muros de contención del humedal; igualmente trepan a alturas considerables. Por la humedad imperante del medio ambiente condensada sobre las plantas, crean microclimas que deterioran las estructuras. La dispersión de semillas puede ser vía zoocoria o anemocoria. Fig. 12.
Colección: E. Rodríguez R. et al.3385a (HUT).
Discusión
En el ámbito de la estructura arquitectónica monumental de la ciudadela de Chan Chan cuya construcción es a base de material de arcilla, pocas veces se ha tomado en cuenta la presencia de la flora como factor de deterioro. En esta oportunidad, se ha efectuado la detección de los agentes causantes del biodeterioro de origen botánico, los mismos que fueron encontrados tanto en la base, superficies de los muros, caminos y espacios próximos y colindantes a estos.
Tomando en cuenta que los agentes biológicos, entre estos los de origen botánico, interactúan en el medio donde se desarrollan en relación a los factores bioclimáticos que se condicionan con estos y afectan su crecimiento, como son la humedad, la temperatura, los vientos, la presión y las precipitaciones; en este caso respecto a una estructura arquitectónica que se asienta en área desértica costera y tiene proximidad al mar.
Considerando que los oasis de neblina representan de manera habitual un hotspot de biodiversidad, particularmente de plantas vasculares en el hiperárido desierto costero. En estos ecosistemas, la mayor parte del agua ingresa por efecto de la condensación de la neblina costera, y se restringen a pequeñas áreas donde la topografía de la Cordillera de la Costa favorece la captura del flujo aéreo marino (Vargas et al., 2017).
En este sentido, el área de estudio se encuentra ubicado en la franja costera de la provincia de Trujillo, región La Libertad con las características antes mencionadas, la cual es una estrecha región que bordea sus costas, con paisajes áridos y zonas subtropicales interrumpidas con monte ribereño costeros, acantilados, y playas. La infraestructura de esta ciudadela es de material de arcilla la misma que presentan alta capacidad higroscópica (absorber humedad del medio circundante -humedad atmosférica), produciendo absorción y retención de agua, elemento importante para el desarrollo de agentes biológicos, que se ubican en lo que se conoce como sucesión ecológica. En este caso los líquenes por la presencia de algas de tipo cianofitas y hongos liquenizados; por cuanto las superficies superiores están expuestas a las condiciones ambientales climáticas de neblina y condensación de agua. Los líquenes tienen la capacidad de colonizar diversos sustratos como característica importante (Rosato, 2008). De acuerdo, con la cercanía que tengan con el agua del mar, los líquenes pueden habitar tres zonas de la costa: sublitoral, litoral y supralitoral; así como también la región terrestre (Fletcher, 1973a, 1973b; tomado de Guzmán et al., 2019).
Siendo su bioclima en este espacio desértico y subtropical caracterizado por escasas precipitaciones líquidas usualmente asociadas a eventos ENOS con un ingreso habitual de neblina o "camanchaca". Esta característica es compartida con las zonas costeras del sur de Perú, por lo que la potencial extensión en la distribución de las especies presentes en el área de estudio estaría determinada por la continuidad de este bioclima (Vargas et al., 2017). La zona considerada por los diferentes oasis está dominada por un bioclima de tipo tropical desértico a hiperdesértico (Luebert & Pliscoff, 2006; Moreira-Muñoz, 2011; tomado de Vargas et al., 2017). Condicionadas con variables ambientales como humedad, salinidad y vegetación se encuentran estrechamente relacionadas a los océanos (Guzmán et al., 2019).
Poseen hábitats íntimamente relacionados a la presencia del agua marina, son líquenes costeros que se encuentran generalmente en la región terrestre o en la zona supralitoral de las costas (Brodo, 2001; Tehler, 2002, 2006, 2011; Tehler et al., 2009; tomado de Guzmán et al., 2019). Las condiciones microclimáticas que favorecen la alta diversidad liquénica (humedad elevada, nieblas o neblinas frecuentes y densas), se espera que favorezcan de igual manera la diversidad de flora vascular (Vargas et al., 2017).
Considerando que el elemento base de los muros constructivos de la arquitectura de Chan Chan es la arcilla, este material es de origen de rocas sedimentarias descompuestas constituidas por agregados de silicatos de aluminio hidratados procedentes de la descomposición de rocas que contienen feldespato, como el granito, provenientes de rocas ígneas, metamórficas y sedimentarias descompuestas por la meteorización o alteración hidrotermal (García, 1985). También se debe tener en cuenta las acciones químicas debidas a la meteorización son muy complejas y lentas coadyuvantes al biodeterioro de las construcciones de adobes y arcilla. Al respecto García (1985) indica que el agua participa como vehículo universal en el desarrollo de estas transformaciones, ya que en ella pueden disolverse multitud de agentes químicos agresivos (e.g.: CO2, ácidos húmicos, variadas sales minerales, etc.) que disueltos en el agua producen la descomposición de algunos minerales primarios de las rocas. El mismo autor refiere la transformación de los feldespatos en caolinita u otros minerales de la arcilla, la formación de cloritas y de micas hidratadas, etc. Esto ha sido evidenciado en el estudio especialmente cuando las plantas que presentan abundante follaje acumulan grandes cantidades de agua que humedecen sostenidamente las edificaciones de arcilla. Implica que su estructura molecular favorece a la captación de agua la misma que reacciona con los componentes o elementos minerales como nutrientes frente a la presencia de ciertas especies biológicas de origen vegetal, como algas y hongos, organismos bióticos para la presencia de los líquenes saxícolas.
En relación con eso, Ariño & Gómez (2002) consideran dos tipos de efectos de los líquenes sobre un substrato: procesos físicos o mecánicos (biogeofísicos), que producen la desintegración del substrato, y procesos químicos (biogeoquímicos), que conducen a la descomposición del substrato, los agentes implicados son la producción de dióxido de carbono, de substancias quelantes y de ácido oxálico.
De este grupo botánico, una de las especies de liquen hallado asociado a este estudio es Buellia babingtonii, por lo general esta es una especie comunitaria de estructuras líticas adaptada a condiciones extremas tanto en temperatura como a humedad pero también es terrícola como en el presente estudio cuya acción principal de biodeterioro es biogeoquímica por secreción de ácido oxálico. Otra especie hallada es el liquen Roccella gracilis que vive de forma litófita o epilítica o saxícola, sobre troncos o ramas secas (cortícolas) o de comportamiento terrícola como en este estudio. Los talos deterioran mecánicamente las estructuras de soporte existiendo además un deterioro por la acumulación de humedad y acción química por reacción con el sustrato por secreción de ácido liquénico y oxálico. En general, las especies de este género pueden ser cortícolas o saxícolas (en ocasiones ambas), poseen hábitats íntimamente relacionados a la presencia del agua marina, son líquenes costeros que se encuentran generalmente en la región terrestre o en la zona supralitoral de las costas (Brodo, 2001; Tehler, 2002, 2006, 2011; Tehler et al., 2009; tomado de Guzmán et al., 2019).
Estas especies de líquenes por su presencia, desarrollo y exposición tanto en posición y ubicación se les encuentra sometidas a condiciones climáticas extremas y oscilantes. Por consiguiente, estos organismos están adaptados a soportar constantes ciclos de secado-humectación, como alta radiación solar y una elevada salinidad que acarrea consigo la brisa oceánica (Hawksworth, 2000, Nash & Lange, 1988; tomado de Guzmán et al., 2019).
El uso de los muros de arcilla como soporte o apoyo de descanso y ventilación de ciertas aves en especial los gallinazos (Coragyps atratus "gallinazo de cabeza negra" y Cathartes aura "gallinazo de cabeza roja"); airean y refrigeran el cuerpo evacuando sus deyecciones sobres las patas (urohidrosis), las mismas que escurren hacia la superficie de los muros. Esto implica el nitrificar y adicionar materia orgánica como producto de su alimentación, acelerando el estado de descomposición; consecuentemente, favorece el acceso de nutrientes a organismos de flora (líquenes) y fauna (Gutiérrez & Fernández, 2018).
Las especies de plantas vasculares que invaden los espacios directos e indirectos de la estructura arquitectónica (caminos, patios y muros), pueden conllevar a efectos totalmente negativos de los agentes botánicos respecto al deterioro estético, como al deterioro físico y químico. Las plantas ejercen una acción devastadora, en donde las raíces, ramas y el follaje contribuye al aumento local de la humedad en sus alrededores y propicia la implantación y el crecimiento de otras especies (Saralegui et al., 2018).
La presencia de plantas vasculares de tipo arbustivo y leñoso en los caminos y pasadizos, entre los muros y portales relacionados con esta arquitectura monumental, corresponde a la cobertura de la vegetación de plantas leñosas y arbustivas, poco influenciada directamente por la salinidad del océano, próximo a las estructuras arquitectónicas. Estas plantas causan daño mecánico como consecuencia de la expansión de sus raíces, daño químico por la acidificación del medio y la excreción de sustancias quelantes, y alteración de los parámetros microclimáticos, incremento del riesgo de incendios y obstrucción física y visual (Caneva & Salvadori, 1988; tomado de Saralegui et al., 2008).
Las especies tales como: Waltheria ovata, Tiquilia paronychioides y Spilanthes leiocarpa por lo general son propias de suelos arcillosos y sus variantes, propios de hábitat de cultivos y suelos abandonados. De ramificación al ras del suelo. Retiene ligeramente la humedad. T. paronychoides, crece en asociación con otras plantas como Baccharis glutinosa (Saldaña et al., 2020). S. leiocarpa, es una especie de tipo estolonífera como un brote lateral que nace en la base del tallo que crece horizontalmente con respecto al nivel del suelo, de manera epigea (sobre el suelo) o subterránea, deteriorando estructuras.
Respecto a Distichlis spicata, es una planta herbácea conformante de las comunidades de los Gramadales (Rodríguez et al., 2015), crece y se desarrolla en forma agresiva engrosando el tallo (rizomas) en un volumen acelerado ocasionando deterioro, el cual es mecánico (físico) con rajaduras de muros, por el desplazamiento y desprendimiento de estructuras compactas de suelo o la base de estructuras arquitectónicas. En cuanto a su distribución contribuyen a la retención de humedad en el substrato y facilitan el crecimiento de otras plantas más agresivas (Gutiérrez & Noningo, 2016). Esta especie tiene una particularidad, que se presentan en consocies, es decir una comunidad natural con una sola especie dominante. Al aumentar la sequedad del suelo de arenas, las consocies se tornan gregarias y, poco a poco la superficie queda sin vegetación, llegando a la litorideserta absoluta (López & Rivas, 1952).
Tanto Alternanthera halimifolia como Cryptocarpus pyriformis, son especies herbáceas y sufruticosas respectivamente, que crecen postradas sobre los arenales o apoyándose sobre otras plantas de la costa y parte baja de los valles occidentales. Con sistema radicular amplio y potente para mayor captación de agua. Son especies xerofitas que actúan como sombrilla para otras especies botánicas. Por presentar sistema radicular subterráneo grueso y ramificado (Tejada & Ayasta, 2016), tendrían capacidad de acumular agua a su alrededor propiciando el encharcado a las proximidades de caminos y pasos al interior de la estructura arquitectónica. Por presentar estructura foliar pubescente esta también acumula agua por condensación de la neblina nocturna e invernal.
En cuanto a la especie herbácea Phyla nodiflora, por lo general tapiza rápidamente la superficie del suelo, desarrolla sus raíces conforme avanza en su crecimiento los tallos radicantes. Se propaga rápidamente y es invasiva; así como, resistente a la sequía, lo cual lo hace más potente en su poder invasivo de cubrimiento en el área de estudio.
Entre la flora leñosa, los arbustos presentes en el estudio, Baccharis glutinosa, es una especie resinosa de poca altura formando parte del matorral xerófilo, adaptada a la vida en un medio seco. Presentan raíces gemíferas, es decir, estructuras que tienen nudos y entrenudos con yemas adventicias que producen los brotes, permitiendo la reproducción vegetativa, en consecuencia se vuelve invasiva de las superficies del suelo. Scutia spicata, es una especie de zonas áridas cercanas a las playas, mejor adaptada para esta condición; es conformante de la comunidad de los Matorrales (Rodríguez et al., 2017). De las especies arbóreas se ubicó a Acacia macracantha, de mucha utilidad que se distribuye por valles interandinos secos, sus copas radio máximo hasta 12 metros altura entre 4 a 6 m con diámetro máximo del tronco de 8 metros. Esta especie contrarresta la desertificación ya que proporciona nutriente al suelo y fija nitrógeno capturado del aire y es muy resistente a la sequía de manera que puede sobrevivir en zona áridas. Resiste a las prolongadas sequias y a suelos salinos. Es una especie conformante de la comunidad Vegetación macrotérmica - xerofítica denominada Espinales (Rodríguez et al., 2015); ayuda a la fertilización de los suelos áridos, por su influencia en reducir la erosión, sedimentación, degradación de los suelos y la adición de materia orgánica, generado por la acumulación de las hojas en el suelo (Castromonte, 2018). Sin embargo, su ubicación cerca a los muros produce rajaduras y deterioro por debilitamiento de sus cimientos, coadyuvado por el daño químico evidenciada por la acidificación del medio y la creación de microclimas de humedad variable.
Finalmente, de la evaluación prospectiva se observó biodeterioro y bioalteración de los muros y bases de la ciudadela. Se recomienda la rápida intervención sobre la flora invasora, la eliminación mecánica y mantenimiento permanente de la ciudadela, previo diseño de un plan integrado de control.
Conclusiones
En el palacio Nik An (Tschudi) del Complejo Arqueológico Chan Chan se registraron 12 especies distribuidas en 11 familias y 12 géneros; de ellas 2 criptógamas (2 especies liquénicas) y 10 fanerógamas (5 hierbas, 1 sufrútice, 1 subarbusto, 2 arbustos y 1 árbol). Los taxa se encuentran al interior del complejo arquitectónico en la base y sobre los muros, caminos y pasadizos, ocasionando dos tipos de efectos sobre el sustrato: biogeofísicos (mecánicos) y biogeoquímicos; así como potenciales agentes de biodeterioro.