INTRODUCCIÓN
Los sistemas bovinos doble propósito (DP) son ganaderías de producción de carne y leche que combinan aspectos de la lechería especializada y la cría y engorde de terneros destetos (DANE, 2015). Estos sistemas son comunes en países tropicales como Colombia (Rojo-Rubio et al., 2009), donde las producciones bovinas DP corresponden al 37% de los hatos ganaderos del país (FEDEGAN, 2018), los cuales en su mayoría (82%) son hatos pequeños y medianos, de no más de 50 bovinos (González-Quintero et al., 2020). Igualmente, se estima que cerca del 60% de la leche que se produce en Colombia proviene de sistemas bovinos DP (DANE, 2015).
A pesar de la importancia que tienen estos sistemas DP en la producción nacional de leche y en el desarrollo económico de los pequeños y medianos productores, principalmente en zonas del trópico medio y bajo colombiano (regiones donde se localizan la mayoría de estos sistemas), el desarrollo de proyectos relacionados con bienestar animal y protocolos de evaluación de estos sistemas es limitado (Hernández et al., 2017). México ha sido el líder regional en desarrollar estudios de bienestar animal en sistemas bovinos DP, logrando identificar que las principales debilidades de estos sistemas son la alimentación inadecuada y la falta de manejo del dolor cuando se realizan procedimientos dolorosos, y la temporada de lluvias como factor de riesgo a problemas de bienestar. Igualmente, estos estudios identificaron que las principales fortalezas de los sistemas DP son el acceso a pastoreo (factor inherente al tipo de sistema), la estrecha relación humano-animal y la no separación temprana de las vacas y las crías (Edstam, 2016; Hernández et al., 2017, 2018).
El proceso de desarrollar protocolos de evaluación de bienestar para animales de producción debe involucrar a los productores y tener en cuenta sus opiniones sobre la temática y sobre los posibles indicadores a utilizar al evaluar el bienestar animal (Doughty et al., 2017). Esto es incluso considerado uno de los pasos más importantes - si no el más importante - para avanzar en la adopción de buenas prácticas de bienestar animal, pues son los productores y los trabajadores del campo quienes están en contacto constante y directo con los animales, y quienes, a la hora de la verdad, van a implementar los cambios que ellos perciban como los más importantes y prácticos para mejorar el bienestar de sus animales y reducir la presentación de problemas (Doughty et al., 2017).
Adicionalmente, todo indicador de bienestar animal que haga parte de los esquemas de evaluación y monitoreo en los sistemas productivos debe ser no solo un indicador válido y confiable, sino que debe ser un indicador realizable; es decir, práctico, de bajo costo y aceptado por los diferentes actores involucrados en la cadena productiva, incluyendo a los productores (Martin y Bateson, 2007; Battini et al., 2014). Teniendo en cuenta lo anterior, los objetivos de este estudio fueron determinar las actitudes específicas de los productores sobre el nivel de impacto que tienen diversos aspectos y prácticas de la producción bovina DP en el bienestar de los animales y determinar los niveles de importancia percibidos por parte de los productores que tienen algunos indicadores de evaluación del bienestar bovino DP.
MATERIALES Y MÉTODOS
Este estudio observacional transversal fue aprobado por la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria (AGROSAVIA) y por el Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (Proyecto N.° 1002090). El estudio se realizó en el departamento del Meta (pie de monte llanero), en los municipios de Cumaral y Restrepo, Colombia. Se seleccionó una muestra por conveniencia de 20 fincas DP en función a la disponibilidad de recursos para realizar las visitas, a la disposición de los productores por participar y a la ubicación (aproximadamente 2.5 h del centro de investigación La Libertad, Agrosavia, Villavicencio, Meta, Colombia). Cada sistema productivo se visitó una sola vez entre septiembre y noviembre de 2021, realizando una encuesta presencial con cada productor.
Encuesta, Recopilación y Descripción de Datos
La encuesta fue diseñada en consulta con un panel de expertos (5 especialistas - científicos y académicos - en salud y bienestar de la especie bovina). Se utilizó una combinación de preguntas abiertas y cerradas (selección múltiple y escalas), las cuales fueron formuladas basándose en estudios realizados a consumidores, público en general, productores y varios actores de cadenas productivas en Australia (Doughty et al., 2017) y en Estados Unidos (Mckendree et al., 2018), así como en los protocolos de evaluación de bienestar para bovinos de leche y carne del Proyecto Europeo Welfare Quality(r) (2009).
La versión final de la encuesta constó de cuatro secciones:
La primera sección describe el propósito del estudio y los aspectos más relevantes de la encuesta con el fin de que los productores tomaran una decisión informada sobre autorizar o no su participación en la encuesta.
La segunda sección 'Aspectos sociodemográficos' constó de seis preguntas cerradas sobre género, edad, nivel educativo, tipo de vinculación con el sistema (trabajador vs. propietario), ubicación, y año de establecimiento del sistema (Cuadro 1).
La tercera sección preguntó sobre las prácticas dolorosas rutinarias que se realizan en el sistema, así como el 'cómo' (método y control del dolor), el 'cuándo' (edad de los animales) y el 'quién' realizaba el procedimiento.
La cuarta y última sección 'Actitudes específicas sobre el sistema y prácticas realizadas' tuvo dos subsecciones. La primera indagó sobre las percepciones de los productores sobre el nivel de impacto (utilizando una escala Likert de 5 puntos) que tienen diversos aspectos y prácticas inherentes al sistema DP en el bienestar de los animales, clasificándose dentro de las categorías ambiental, de salud y de manejo. La segunda subsección indagó sobre actitudes específicas acerca del nivel de importancia (utilizando una escala Likert de 5 puntos) percibido que tienen diversos indicadores a la hora de evaluar el bienestar de los bovinos; estos indicadores fueron clasificados dentro las categorías ambiental, de manejo, de salud, y estados afectivos de los animales.
Manejo de Datos y Análisis Estadístico
Los datos obtenidos en la encuesta se digitaron en hojas de cálculo de Microsoft Excel (Microsoft Corp., USA), donde se realizó la limpieza y organización de datos y luego se importaron a SAS(r) Studio (SAS Institute Inc., USA) para el análisis estadístico. Las estadísticas descriptivas calculadas incluyeron porcentajes, intervalos de confianza (IC) del 95%, media y desviación estándar (DE). Se calculó la media y DE (de la puntuación Likert) para cada uno de los ítems listados en los cuadros 2 y 3. Para cada una de las categorías (tres categorías de aspectos que impactan el bienestar, y cuatro categorías de indicadores de bienestar), se calcularon puntuaciones compuestas promedio (y DE) sumando las puntuaciones de Likert para cada uno de los ítems pertenecientes a cada categoría.
Se utilizaron pruebas Kruskal-Wallis con comparaciones Post-Hoc (método DwassSteel-Critchlow-Fligner) para evaluar las diferencias en la puntuación compuesta entre categorías. Para visualizar de manera gráfica las percepciones sobre el nivel de impacto que tienen los diversos aspectos y prácticas inherentes al sistema bovino DP y sobre el nivel de importancia percibido que tienen diversos indicadores de bienestar, se generó una gráfica de barras apiladas horizontales, usando Microsoft Excel, a fin de evidenciar la distribución porcentual de los productores por cada nivel de la escala Likert, para cada ítem listado en los cuadros 2 y 3.
Categoría | Ítem (aspectos y prácticas) | Media ± DE |
---|---|---|
Ambiental | 3.92a ± 1.29 | |
Carga de parásitos externos (garrapatas) | 4.65 ± 0.58 | |
Estrés por calor | 4.55 ± 0.76 | |
Miasis (gusanera) | 4.25 ± 1.37 | |
Depredación por perros ferales, pumas | 3.55 ± 1.54 | |
Suciedad (barro/material fecal) en la ubre | 3.35 ± 0.93 | |
Estrés por frío | 3.15 ± 1.49 | |
De manejo | 4.05a ± 1.09 | |
Falta de verificación (consumo de calostro por la | 4.65 ± 0.48 | |
cría) | ||
Topización/Descorne sin analgesia | 4.25 ± 0.91 | |
Castración sin analgesia | 4.20 ± 1.15 | |
Topización/Descorne sin anestesia | 4.20 ± 1.05 | |
Castración sin anestesia | 4.10 ± 1.25 | |
Marcaje sin analgesia | 4.05 ± 1.05 | |
Marcaje sin anestesia | 3.95 ± 1.36 | |
La poca leche que le queda a la cría post-ordeño | 3.80 ± 1.06 | |
La separación diaria de vacas y crías | 3.70 ± 1.12 | |
El destete de las crías | 3.65 ± 1.08 | |
De salud | 4.07a ± 1.06 | |
Carga de parásitos internos | 4.40 ± 1.15 | |
Dificultades al parto | 4.20 ± 1.15 | |
Cojeras | 4.00 ± 1.02 | |
Abortos | 3.70 ± 1.30 |
1 Las respuestas variaban entre 1 y 5, donde 1 = No hay impacto, y 5 = Impacto extremo. Los valores con diferentes superíndices (a, b) indican diferencias estadísticamente significativas (p<0.05) entre las calificaciones promedio de las tres 3 categorías (ambiental, de manejo y de salud). Los valores reportados corresponden a media y desviación estándar por categoría y aspecto específico
Categoría | Indicadores | Media ± DE |
---|---|---|
Ambiental | 4.30 a ± 0.61 | |
Acceso a sombra en los potreros | 4.65 ± 0.49 | |
Carga de parásitos externos (garrapatas, moscas, tábanos) | 4.40 ± 0.59 | |
Condiciones ambientales (clima) | 4.20 ± 0.52 | |
Capacidad de carga (Animales/ha) | 4.20 ± 0.61 | |
Limpieza de los animales | 4.05 ± 0.68 | |
De manejo | 4.23 a ± 0.67 | |
Consumo de calostro por los terneros | 4.55 ± 0.51 | |
Capacidades del personal (entrenamiento/conocimiento) | 4.50 ± 0.51 | |
Actitud del personal | 4.45 ± 0.51 | |
Acceso a agua potable | 4.40 ± 0.75 | |
Limpieza de los bebederos | 4.40 ± 0.50 | |
Alimento (cantidad y calidad) | 4.40 ± 0.50 | |
Prontitud en el tratamiento de animales enfermos | 4.25 ± 0.63 | |
Cantidad de leche diaria que queda a los terneros pos | 4.15 ± 0.67 | |
ordeño | ||
Interacción madre-cría | 4.15 ± 0.87 | |
Frecuencia del monitoreo de la salud y estado del hato | 4.10 ± 0.55 | |
Forma de eutanasia de animales que no se recuperan | 4.05 ± 0.60 | |
Cómo se hace el destete | 3.85 ± 0.74 | |
Cómo se hace la separación vacas-crías diaria | 3.70 ± 0.80 | |
De salud | 4.19 a ± 0.72 | |
Mortalidad de las crías | 4.45 ± 0.69 | |
Cambios en el peso vivo | 4.35 ± 0.49 | |
Presencia de hemoparásitos | 4.35 ± 0.49 | |
Carga de parásitos internos | 4.30 ± 0.47 | |
Cambios en la condición corporal | 4.25 ± 0.72 | |
Presencia de miasis y/o nuche | 4.20 ± 1.00 | |
Número de animales enfermos o heridos | 4.15 ± 0.74 | |
Mortalidad de animales en todo el rebaño | 4.10 ± 0.97 | |
Casos de abortos | 4.05 ± 0.76 | |
Casos de cojeras | 3.95 ± 0.76 | |
Condición de las pezuñas | 3.95 ± 0.68 | |
Estados afectivos | 3.82 b ± 0.92 | |
Estado mental (emociones experimentan a diario) | 4.15 ± 0.81 | |
Distancia de fuga (miedo) | 4.00 ± 0.85 | |
Si se utiliza analgesia y/o anestesia durante la castración | 3.80 ± 0.89 | |
Si se utiliza analgesia y/o anestesia durante la | 3.65 ± 0.93 | |
topizada/descorne | ||
Si se utiliza analgesia y/o anestesia durante el marcaje | 3.50 ± 1.05 |
1 Las respuestas variaban entre 1 y 5, donde 1 = No es importante, y 5 = Esencial. Los valores con diferentes superíndices (a, b) indican diferencias estadísticamente significativas (p<0.05) entre las calificaciones de las cuatro categorías (ambiental, de manejo, de salud y estados afectivos). Los valores reportados corresponden a media y desviación estándar por categoría e indicador específico
RESULTADOS
Descripción de productores y sistemas productivos
Del total de participantes entrevistados, 40% eran propietarios del sistema productivo y 60% eran trabajadores. La mayoría eran-hombres (90%), 30% tenían entre 30 y 45 años y otro 30% entre 46 y 60 años. Asimismo, 35% poseían al menos un título universitario de pregrado. El año promedio de establecimiento de los sistemas productivos fue 1999 (rango: 1967 a 2020) (ver los aspectos sociodemográficos de los productores en detalle en el Cuadro 1).
El promedio (±DS) del número total de animales presentes en las fincas fue 76 ± 79 bovinos (incluyendo todos los grupos etarios) (rango: 14 a 280 animales). La raza más predominante en las fincas fue Girolando (55%), seguido de Gyr (10%), en tanto que el resto fueron cruces entre las razas Gyr, cebú, Simmental, Pardo Suizo, Holstein y Jersey. El total de vacas en producción fue 20 ± 19 (rango: 4 a 91 vacas) con una producción promedio de 5.8 ± 3.0 L/vaca/día, con una frecuencia de ordeño de una vez al día en todas las fincas. El destete de las crías lo hacen a los 7.8 ± 0.9 meses (rango: 5 a 9 meses).
Practicas dolorosas
Las tres prácticas rutinarias que se realizan en los sistemas DP visitados fueron topización/descorne (en 80% de las fincas; n=16/20), castración (25%; n=6/20) y marcaje (100%; n=20/20). La topización/descorne se realiza a los 63 ± 65 días (rango: 2 a 210 días) con hierro caliente como método predilecto (87.5%; n=14/16) frente a la pasta cáustica. En su mayoría, esta práctica de topizar/ descornar era realizada por el propietario o trabajador (86.7%; n=14/16) frente al veterinario, observándose que en el 93.7% (n=15/16) de los sistemas no se utiliza analgesia ni anestesia local.
La castración se realiza a una edad promedio de 13 ± 8.2 meses (rango: 3 a 24 meses) y era realizada por el propietario o un trabajador en todos los sistemas donde castraban (n=6), con cuchillo con herida abierta o con pinza de burdizzo, y sin empleo de analgesia o anestesia local. La marcación se realiza a una edad promedio de 8.4 ± 7.7 meses (rango: 2 a 36 meses), principalmente usando hierro caliente (95%, n=19/20) vs. nitrógeno líquido. El marcaje era realizado en su mayoría por el propietario o trabajador (85.7%; n=12/14) frente al veterinario (14.3%; n=2/14); en seis sistemas no se proporcionó la información sobre quien hacía este procedimiento.
Actitudes específicas sobre el bienestar bovino
El 60% (n=12/20) de los productores considera que el bienestar de los bovinos DP en Colombia es 'adecuado' o al menos 'generalmente adecuado con campo para mejoras' (15%, n=3 y 45%, n=9, respectivamente); 25% considera que es 'deficiente' (n=5), 10% considera que es 'muy pobre' (n=2); y solo 5% considera que es 'excelente' (n=1).
Respecto a los aspectos que impactan el bienestar bovino, en general, los aspectos relacionados con la salud obtuvieron la calificación promedio más alta en comparación con los aspectos relacionados con prácticas de manejo o aspectos ambientales, aunque sin diferencia significativa (X2 = 0.24; p = 0.8; Cuadro 2). Las puntuaciones promedio del impacto percibido en el bienestar bovino para los 20 aspectos listados en el Cuadro 2 oscilaron entre 3.15 (estrés por frío) y 4.65 (carga de parásitos externos y falta de verificación del consumo de calostro). Los cinco aspectos 'top' categorizados por la mayoría de los productores como factores de 'Impacto extremo' fueron: la carga de parásitos externos (70% de los productores, n=14/20), estrés por calor (70%, n=14/20), miasis (70%, n=14/20), falta de verificación de consumo de calostro (65%, n=13/20) y topizar/descornar sin anestesia (55%, n=11/20); mientras que los cinco aspectos que menos fueron categorizados por los productores como factores de 'Impacto extremo' en el bienestar bovino fueron: suciedad de la ubre (10%, n=2), estrés por frío (20%, n=4), destete de las crías (25%, n=5), separación diaria de vacas y crías (30%, n=6), y la poca leche que le queda a la cría pos-ordeño (30%, n=6) (Figura 1).
Con relación a los indicadores para evaluar el bienestar bovino, se encontró que los indicadores ambientales, de manejo y de salud obtuvieron las calificaciones promedio más altas, mientras que los relacionados con el estado emocional de los bovinos recibieron la calificación más baja (X2 = 19.77; p = 0.0002; Cuadro 3). Las puntuaciones promedio de la importancia percibida de los 34 indicadores listados en el Cuadro 3 oscilaron entre 3.50 (uso de analgesia y/o anestesia durante el marcaje) y 4.65 (acceso a sombra en los potreros). Los cinco indicadores 'top' categorizados por los productores como 'Esenciales' a la hora de evaluar el bienestar de los bovinos fueron: acceso a sombra en los potreros (65%, n=13/20), consumo de calostro por los terneros (55%, n=11), mortalidad de crías (55%, n=11), capacidades del personal (50%, n=10) y acceso a agua potable (50%, n=10); mientras que los cinco indicadores categorizados en menor proporción como 'Esenciales' fueron: uso de analgesia y/o anestesia durante la topizada/ descorne (10%, n=2), uso de analgesia y/o anestesia durante el marcaje (15%, n=3), uso de analgesia y/o anestesia durante la castración (15%, n=3), método de destete de crías (15%, n=3) y como se hace la separación vacas-crías diaria (15%, n=3) (Figura 2).
DISCUSIÓN
En general, los productores tuvieron una percepción positiva y optimista sobre el estado de bienestar de los bovinos DP. Resultados similares han sido reportados en Bélgica (Vanhonacker et al., 2008) para animales de granja en general y en Brasil (Albernaz-Gonçalves et al., 2021) con relación a cerdos, donde los productores otorgan una 'evaluación satisfactoria' al estado de bienestar de los animales de producción y afirman proveer buenos estándares de bienestar a sus animales. Sin embargo, en esta actitud optimista sobre el bienestar animal juega un papel clave lo que los productores entienden por bienestar animal; y es que, para la mayoría de ellos, bienestar animal se refiere a asegurar una buena salud y no necesariamente a evitar el maltrato, y a proveer una buena alimentación y condiciones de alojamiento limpias (Te Velde et al., 2002), enfocándose en satisfacer el componente de salud y funcionamiento biológico de los animales (pues es más tangible), dejando en segundo plano el propender por la experiencia de estados afectivos positivos y la capacidad de realizar comportamientos naturales(Balzani y Hanlon, 2020). En el presente estudio, los productores otorgaron menor importancia a los indicadores de bienestar relacionados con estados afectivos (como el control adecuado del dolor durante procedimientos dolorosos) comparado con los indicadores de salud, manejo y ambientales.
Todos los aspectos y prácticas inherentes al sistema productivo DP (listados en el Cuadro 2) fueron considerados como aspectos importantes, con un impacto entre moderado y extremo en el bienestar de los bovinos, pues todos los promedios de las calificaciones estuvieron por encima de 3.0 (correspondiente a un nivel de impacto 'neutro'). Similarmente, los indicadores listados en el Cuadro 3 tuvieron las calificaciones promedio por encima de 3.0. Adicionalmente, es interesante ver que los productores participantes evidencian una congruencia entre algunos de los aspectos 'top' considerados a tener un impacto extremo en el bienestar del bovino y el alto nivel de importancia percibido como indicador al evaluar el bienestar de esos animales. Específicamente, esta congruencia se vio para estrés por calor como aspecto de impacto extremo y el acceso a sombra en los potreros como indicador esencial de bienestar, así como en la falta de verificación de consumo de calostro como aspecto de impacto extremo y el manejo de calostro y mortalidad de las crías como indicadores esenciales del bienestar en estos sistemas.
El estrés por calor ha sido catalogado globalmente como uno de los principales problemas de bienestar animal de los sistemas de producción extensivos (Tarazona et al., 2020; Temple y Manteca, 2020). Parte de las soluciones para mitigar el estrés por calor en sistemas extensivos es el proveer sombra (artificial o natural por medio de sistemas silvopastoriles) (Edwards-Callaway et al., 2021). El Consejo de Bienestar para Animales de Granja (FAWC, por sus siglas en inglés) promueve el concepto de "oportunidades de buena vida" como una forma de alcanzar un bienestar animal positivo, donde se busca que los animales tengan acceso a recursos que vayan más allá de cubrir sus necesidades biológicas, recursos que los animales valoran y están altamente motivados a tener (FAWC, 2009). Dentro de este concepto se resalta que los animales deben tener opciones y poder escoger dentro de estos recursos, dándoles un sentido de control de su entorno (Stokes et al., 2020). El proveer sombra no solo contribuye a la oportunidad de 'confort', sino además a la oportunidad de 'interés', donde los bovinos podrán vivir experiencias positivas en un ambiente enriquecido (Edgar et al., 2013).
La mortalidad de las crías en sistemas de producción bovina, tanto de lechería especializada como de cría, es considerado un problema e indicador de bienestar, debido a que se asocia con una pobre calidad de vida y de sufrimiento (Costa et al., 2019; Nalon et al., 2021). Se estima que la tasa de mortalidad de terneros al destete en sistemas de leche y de carne es hasta 10% (Mee, 2020). Un factor de riesgo de importancia es el consumo inadecuado de inmunoglobulinas calostrales (Raboisson et al., 2016) por un mal manejo del calostro (Godden et al., 2019), especialmente por demoras en la toma/administración del calostro (Godden, 2008; Godden et al., 2019). La forma más eficiente de asegurar el consumo adecuado de calostro es suministrarlo directamente, vía tetero o sonda esofágica (Godden, 2008). No obstante, el método de suministro más común en los sistemas DP colombianos es permitir que el ternero mame el calostro directamente de la ubre, método que ha sido catalogado como una práctica de manejo perjudicial para el bienestar bovino en chile (Calderon-Amory Gallo, 2020) y Uruguay(Schild et al., 2020) al ser considerado un factor de riesgo asociado al consumo inadecuado del calostro (Godden, 2008; Stull y Reynolds, 2008).
Por otro lado, se evidenció una incongruencia entre el nivel de impacto percibido por los productores respecto a la práctica de topizar/descornar sin anestesia local (aspecto considerado a tener un impacto extremo en el BA) y el bajo nivel de importancia como indicador (si se usa o no anestesia/analgesia durante este procedimiento) del bienestar del bovino DP. Existe evidencia de este dualismo en productores de leche en países como Canadá, donde los productores expresan la responsabilidad que tienen por cuidar las crías y la importancia de controlar el dolor en pro del confort animal; no obstante, no presentan un cumplimiento completo de los requerimientos de manejo de dolor exigido en dicho país (Saraceni et al., 2022).
El manejo adecuado del dolor es un pilar fundamental de la mejora del bienestar en animales de producción (McLennan, 2018; Steagall et al., 2021), pero que en general, la experiencia de dolor en animales de producción es usualmente subestimada (Steagall et al., 2021). Por lo menos, que los productores hayan reconocido que el dolor experimentado durante la topización/descorne, sin anestesia, de los bovinos DP tiene un impacto extremo en su bienestar es alentador, ya que evidencia una mayor sensibilidad y aceptación de la capacidad sintiente de los bovinos.
Diversos estudios han evidenciado cambios positivos en el uso de medicamentos para el manejo adecuado del dolor, impulsados principalmente por mejores asesorías veterinarias y presión pública, entre otros (Winder et al., 2016; Robles et al., 2021).
Es importante mencionar áreas a las que pocos productores les atribuyeron un peso importante como aspectos de impacto extremo en el bienestar del bovino DP y como indicadores esenciales para evaluar el bienestar en sistemas DP. Estas áreas fueron la cantidad de leche para consumo de las crías, la separación diaria vaca-cría y los métodos de destete, donde el común denominador es la cría. Se sabe que en sistemas de lechería el cuidado de los terneros no ha sido una prioridad (Ventura et al., 2015), y esto podría atribuirse igualmente a los sistemas DP, donde la atención tiende a centrarse en las vacas productoras de leche por traer ingresos tangibles diarios a la finca, por lo que hay un gran espacio para mejoras en la etapa de crianza. En estos sistemas DP, las vacas y las crías tienen contacto diario desde el nacimiento hasta el destete (con periodos de separación diaria,usualmente en las horas de la tarde-noche), lo cual permite que las crías consuman la leche directamente de la ubre durante los periodos en que están juntos; sin embargo, se desconoce si la cantidad de leche que le queda a las crías DP es suficiente.
El presente estudio describió las percepciones de un grupo limitado de productores de sistemas bovinos doble propósito del Meta en el trópico bajo colombiano quienes voluntariamente participaron en el estudio, lo cual pudo generar algún tipo de sesgo de selección, limitando la generalización de los resultados. No obstante, comparando la población participante con datos de la cadena láctea colombiana, se puede inferir que los productores y sistemas involucrados representan al promedio de las ganaderías DP del trópico bajo del país (UPRA, 2020).
CONCLUSIONES
Los aspectos e indicadores relacionados con estrés térmico, parásitos externos, manejo de calostro, mortalidad de los terneros y aptitudes del personal, fueron percibidos por los productores DP como aspectos de impacto en el bienestar de los bovinos DP.
La falta de control del dolor durante prácticas dolorosas se percibió como un aspecto que impacta el BA, pero el uso de fármacos para minimizar el dolor no fue visto como un indicador esencial de bienestar.
La aceptabilidad en general de los aspectos e indicadores de BA por parte de los productores es un aliciente y la base para construir protocolos de evaluación y manuales de buenas prácticas de BA para sistemas DP con fundamentos previamente aprobados por el sector primario.